Ganadores, perdedores.

Dr. Carlos Alberto Díaz. Profesor Titular Universidad ISALUD.

Transformaciones y Desafíos del Sistema de Salud Argentino en el Último Año

Desregulación, Concentración y Provincialización del Sistema de Salud

El año que culmina se caracteriza como un período de cierre de época y de profundas reformas en el sistema de salud argentino. Tres procesos principales definen este momento: la desregulación, la concentración y la provincialización. Claramente los ganadores son las prepagas, y el mercado farmacéutico. Perdedores son los pacientes que hoy tienen obras sociales, las provincias, los afiliados del PAMI, TODOS AQUELLOS QUE NO TIENEN COBERTURA FORMAL.

Prepagas

La desregulación se manifestó, principalmente, en la libre elección de las empresas prestadoras de salud, lo que provocó un notorio aumento de afiliados en las prepagas. Así, más de dos millones de personas se sumaron al sistema, alcanzando un total de 8.100.000 beneficiarios. Este fenómeno responde tanto a aspiraciones de pertenencia social —particularmente al identificarse con la clase media— como al deseo de acceder a servicios de mayor calidad, instalaciones más lujosas, amplia cartilla de prestadores y mejor atención.

En cuanto a la concentración, se observa que siete empresas de medicina prepaga concentran el 70% del mercado. Entre ellas, Swiss Medical se destaca como la más beneficiada, impulsada además por una importante inversión en Uruguay en asociación con Blue Cross, Shields, con un fondo de apalancamiento de 300 millones de dólares y la adquisición de Diagnóstico Maipú. Esto ha permitido a Swiss Medical contar no solo con camas propias, sino también con sus propios centros de diagnóstico.

Por su parte, OSDE, históricamente motor del sector privado y de los sanatorios más reconocidos, ha iniciado un proceso de transformación hacia la integración vertical, con proyectos de sanatorios propios en Córdoba, Mendoza y, próximamente, en la Ciudad de Buenos Aires. Esta estrategia podría buscar equilibrar los aumentos de precios en las prestaciones y competir con otras prepagas en la fijación de honorarios para los profesionales de la cartilla. OSDE también ha modificado el modelo de atención, incorporando médicos propios en sanatorios privados, en pos de un ahorro estructural que, no obstante, podría tener efectos adversos, como el aumento de la estancia media hospitalaria.

Situación de las Obras Sociales

El sector de las obras sociales enfrenta una clara problemática, evidenciada por la disminución de ingresos en la seguridad social. Este fenómeno se debe al atraso salarial, cambios en los subsidios, actualización del nomenclador de discapacidad e incorporación indiscriminada de medicamentos de alto costo. Además, la falta de actualización de los pagos en salud de los monotributistas genera una subvención cruzada: los trabajadores formales subsidian a los monotributistas. La intención de trasladar jubilados a las obras sociales agrava el déficit operativo, actualmente cubierto por el aporte sindical obligatorio de todos los afiliados (el polémico 2%). Si este aporte se elimina, las obras sociales colapsarán, lo que podría derivar en un aumento de denuncias por falta de servicios, intervenciones estatales y, finalmente, disolución de las mismas.

Un caso emblemático es el de OSPRERA, la segunda obra social en cantidad de afiliados después de OSECAC, que se encuentra intervenida debido a graves denuncias de corrupción y sucesivas intervenciones que no han resuelto los problemas estructurales. Asimismo, las obras sociales de derechos especiales, como la de las fuerzas armadas, presentan deudas significativas (200.000 millones de pesos), y la propuesta de escindir a Gendarmería y Prefectura podría incrementar los riesgos al perder economías de escala. Las fuerzas armadas cuentan con prestadores propios, que deberían unificar para evitar la dispersión de gastos, o bien comercializar el excedente de capacidad a valores rentables, lo que requeriría una gestión profesional actualmente ausente.

El PAMI

El PAMI atraviesa una etapa compleja, como entidad estatal intervenida por más de tres décadas. Su función principal es asegurar la cobertura de personas jubiladas mayores de 65 años, lo que implica asumir una alta carga de enfermedad. Actualmente, los 5,3 millones de afiliados al PAMI demandan el 43% del mercado de medicamentos.

Salud Provincializada:

Finalmente, la salud tiende a convertirse en una función delegada a las provincias, lo que genera tensiones presupuestarias por dos motivos principales: la informalidad económica, que deriva en una mayor demanda de atención en hospitales públicos por parte de quienes no poseen cobertura formal, y el incremento de la demanda de servicios, especialmente cuando la atención primaria es insuficiente. Esto obliga a los hospitales provinciales a aumentar su gasto y a las economías provinciales a optimizar la gestión de recursos humanos y la provisión de servicios, en un contexto donde la inflación en salud supera a la inflación general.

Incremento de Costos y Perspectivas

Durante el año, el costo de los servicios de salud mostró incrementos heterogéneos: las prepagas aumentaron a la par de la inflación, los medicamentos subieron menos (21,8%), mientras que los servicios externos y hospitalarios lo hicieron un 42,8%. Esto generó un crecimiento de casi un 1% del gasto total respecto a la inflación anual.

Conclusiones:

Durante el último año, el sistema de salud argentino atravesó profundas transformaciones marcadas por la desregulación, concentración y provincialización. La desregulación permitió a los usuarios elegir libremente entre empresas prestadoras, generando un fuerte aumento de afiliados a prepagas, impulsado tanto por aspiraciones sociales como por la búsqueda de mejores servicios. El mercado se concentró en siete compañías que reúnen el 70% de los afiliados, destacándose Swiss Medical por sus inversiones y adquisiciones, y OSDE por su transición hacia sanatorios propios y cambios en el modelo de atención, lo que podría impactar en la duración de las internaciones.

Las obras sociales enfrentaron una disminución de ingresos, déficit operativo y problemas de gestión, agravados por aportes sindicales polémicos, denuncias de corrupción e intervenciones estatales, como el caso de OSPRERA. Las obras sociales de derechos especiales, especialmente las de las fuerzas armadas, acumulan deudas significativas y requieren una gestión profesional para ser sostenibles.

El PAMI, entidad estatal intervenida, sigue siendo fundamental para los jubilados mayores de 65 años, quienes demandan una parte considerable del mercado de medicamentos. Finalmente, la salud se delega progresivamente a las provincias, lo que genera desafíos presupuestarios y de gestión, con gastos hospitalarios en aumento, inflación sectorial superior a la general y una creciente presión sobre la atención pública debido a la informalidad económica y la mayor demanda de servicios.

Publicado por saludbydiaz

Especialista en Medicina Interna-nefrología-terapia intensiva-salud pública. Director de la Carrera Economía y gestión de la salud de ISALUD. Director Médico del Sanatorio Sagrado Corazon Argentina. 2010-hasta la fecha. Titular de gestión estratégica en salud

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