El mercado de los productores de vacunas no esta en condiciones de producir los 10.000 millones de dosis necesarias para vacunar, acercándose al gran reto que es generar el efecto rebaño en el planeta. Siendo realistas las estimaciones llegan a 4000 millones de dosis hasta el fin de 2021. La gran mayoría de las vacunas requiere la aplicación de dos dosis, con lo cual, si no son efectivas las medidas de aislamiento social, (que exigen una gran conciencia colectiva, responsabilidades individuales y compartidas que faltaron durante esta pandemia) la pandemia podría durar dos o tres años, afectando seriamente la economía mundial, debiendo implementar medidas de cooperación de los países centrales con el resto de los países. La solidaridad también interesa a los países ricos, porque no tendrán quienes les compren sus excedentes de producción. Esto nos lleva a una solidaridad interesada y abandonar el nacionalismo vacunal. Ortún Rubio 2021.
Navegando por el mar de las incertidumbres no sabemos cual será la efectividad real de las vacunas, si esta variará con la edad, la etnia de las personas, y sobre su seguridad en el largo plazo, su inmunogenicidad, si afectarán a pacientes con enfermedades autoinmunes. Cada cuanto tendremos que darnos refuerzos, y si esa dosis, en el caso, debe ser de la misma vacuna. Los nuevos ensayos para ampliar las bases de sustentación de la producción mundial de vacunas tendrán dificultades para reclutar voluntarios. Tampoco tenemos certezas si estas vacunas podrán contra las variantes de la cepa silvestre original secuenciada del coronavirus en Enero de 2020. Ampliando la incertidumbre biológica y económica. Esto puede obligar como la vacuna antigripal a producir nuevas versiones de las vacunas.
Los acuerdos de pre-compra no tuvieron transparencia, acuerdo estado – estado, estado – empresa, sin hacer públicas las condiciones de entrega ni las económicas. Esto claramente está ocurriendo en Argentina. Causando con anuncios sin fundamento una gran desilusión en la población prometiendo que hacia fines de agosto íbamos a tener al 70% de la población vacunada.
También es necesario saber, para que estamos vacunando. Para disminuir la mortalidad. Para evitar el contagio. Para disminuir las formas graves?. Para evitar el colapso del sistema de salud. Países como Chile, con alto ritmo de vacunación y stock de dosis, no pudo evitar un nuevo cierre. Según una autoridad como Antony Fauci dice que debido al lento ritmo de vacunación, la transmisibilidad a pesar de estar vacunados, el porcentaje de personas para lograr el efecto rebaño podría ser mayor al 70%, lo cual agrava el escenario y acerca las afirmaciones de Biden, que quiere vacunar a toda la población de EE.UU. Es necesario elevar el umbral de inmunidad colectiva.
Por lo tanto, tiene sentido enfocar los esfuerzos de rastreo de contactos en la nueva variante, como la forma de mantenerla bajo control y retrasar la propagación por unos meses,
Las variante británica es un 56% más transmisible que la silvestre. La manaos P1 es un 100%. Que la cepa sudafricana es más eficaz para esquivar la inmunidad adquirida.
No obstante las observaciones y las incertidumbres, las preguntas sin respuestas las vacunas son un gran cambio para mejor. Esa será nuestra salida. Como dicen Bea López González Valcárcel y Vicente Ortún Rubio, la «luz ya llega del fondo del túnel». Aunque tengo dudas razonables, si esa luz no proviene de una locomotora que viene en sentido contrario hacia donde estamos dirigiéndonos.