El aumento del gasto por encima de la inflación puede poner en riesgo la sostenibilidad de los sistemas de salud y tornarlos más inequitativos, porque cubran prestaciones primero en quienes la pueden pagar y no en las que mas los necesitan, una de las causas es el empleo informal que crece día tras día, ilegal y explotadoramente, la disminución de la productividad de los hospitales públicos que no puede mejorar el acceso, la carencias de insumos, los problemas con la modernización de los sistemas, la falta de integración en redes, hace que los que no acceden a medicina gestionada social o prepaga estén en peores condiciones para resolver sus problemas, listas de esperas encontradas con la muerte sin oportunidades. La situación de empeoramiento de algunos indicadores de calidad de atención tienen a esta inobservancia como causal, la tecnoestructura burocrática, la falta de obligatoriedad en la acreditación de las instituciones permitan que muchas que tendrían que estar cerradas sigan brindando servicios de salud. La política esta lejos de la salud y de la educación. Sin salud no hay libertad. Es una limitante absoluta de las posibilidades. Las ineficiencias y la no calidad tienen causas políticas, de gestión de financiadores, del gobierno federal y de los prestadores, de los colegios profesionales, de los pacientes que no tienen opciones. Algunos ganan mucho dinero y hacen retiro anticipado de ganancias. Los profesionales cada vez ganan menos, están en peores condiciones. La no calidad se produce por falta de integración, por trabajar en competencias, y por dificultades en la formación de los equipos. Por ello realicé una investigación para señalizar en esta editorial las causas, para que los gestores las tengan en cuenta y traten de mejorarlas en el sector que están ocupando. Que de lo poco que puedan hacer la sumatoria será mucho. Ello impactará en un mejor servicio para los necesitados. En eso tiene que estar nuestro compromiso.
Bajar el gasto en salud Manteniendo la calidad.
Se puede bajar un 25% el gasto sin llevarse por delante la calidad, ni las remuneraciones a los trabajadores de la salud;[i] [ii] [iii] Por la vía de la eficiencia, disminuir desperdicios, tiempos de ejecución, comprometiendo a los empleados, jerarquizando las tareas, y la mejora de los procesos. Es un proceso que requiere evidencias, organización, trabajo en equipo, microgestión, optimización de costos y calidad, dedicación y sostenimiento. Los gastos de la ineficiencia, de la sobreproducción, de la sobre prescripción pueden ser limitados. Como así también los stocks excesivos.
- Reduciendo la infección por procedimientos médicos, [iv]
- Las internaciones innecesarias, inadecuadas.[v]
- Estancias inapropiadas. Disminuir los tiempos de estancia.[vi] [vii]
- los internados por causas sociales.
- Efectividad inferior a la esperada.[viii]
- Haciendo gestión clínica. [ix] [x]
- Profesionalizar la mesogestión. [xi]
- Mejorar la accesibilidad en la gestión de pacientes.[xii] [xiii]
- Desarrollar redes y fortalecer las instaladas. El paciente debe acceder por las mejores relaciones de agencia en el sistema de salud.[xiv]
- Basar las decisiones en las evidencias clínicas independientes.
- Desarrollar tecnologías tuteladas para su aplicación efectiva.[xv]
- Mejorar la gestión de compra. Amortiguar el proceso inflacionario en la salud.[xvi]
- Evitar la judicialización y “legislar” mediante amparos. Evitar que los jueces sean “buenos” y no justos.[xvii]
- Normas clínicas. A flor de piel. En el punto de uso. Con recordatorios y alertas. Ojo, el problema más difícil para lograr su cumplimiento es relacionar su existencia al proceso operativo-asistencial. [xviii]
- Normalización de los procedimientos. Especialmente los de seguridad.[xix]
- Mejorar la calidad de los insumos. [xx]
- Disminuir los stocks excesivos. [xxi]
- Fortalecer la producción nacional de los medicamentos costosos.[xxii]
- Continuar con la política de genéricos. Refortalecerla. Se ha abandonado. Hoy esta sostenido por los laboratorios “marquistas” de capital Argentino. De los diez laboratorios de mayor venta, cinco son argentinos, 60% de las ventas son de laboratorios nacionales. Estos quieren que su medicamento sea reconocido por el nombre de fantasía, no por DCI.[1] [xxiii] [xxiv]
- Disminuir las diferencias entre las horas trabajadas y las contratadas.
- Disminuir las esperas improductivas.
- Pago alineado con el desempeño. [xxv]
- Evitar la sobre-prestación. Mejorar sistemas de auditorías y penalizaciones. Debe convenir trabajar bien.
- Modernizar la política contractual. Transparencia para disminuir la Corrupción en los vínculos contractuales entre financiadores y prestadores.
- Inconvenientes de logísticas de abastecimiento y traslado de paciente.[xxvi]
Sobre estos aspectos la gestión puede actuar valiéndose de su ciclo recursivo de planificar, organizar, ejecutar, comunicar, control, y evaluar, con loops que permiten siempre, siempre revisar lo que se está haciendo y corregir, replantear, incrementar niveles de seguridad, aumentar las competencias de los que están ejecutando.[xxvii]
[1] La Ley 25.649 de “Promoción de la utilización de medicamentos por su nombre genérico” fue sancionada en el mes de agosto de 2002 y promulgada parcialmente en el mes de septiembre del mismo año. En una parte de su articulado dice: “ARTICULO 2º — Toda receta o prescripción médica deberá efectuarse en forma obligatoria expresando el nombre genérico del medicamento o denominación común internacional que se indique, seguida de forma farmacéutica y dosis/unidad, con detalle del grado de concentración”
[i]Díaz CA. 2012. Innovaciones en la Gestión Sanitaria. Ediciones irojo. Buenos Aires.
[ii] Blasco Castany R. 2012. Nuevos Formas de Gestión. Modelo Alzira.
[iii] NÚÑEZ FEIJÓO, A. 1999; «Nuevas formas de gestión en el Sistema Nacional de Salud». Revista de Administración Sanitaria, 9:59-67.
[iv] Bolis M. Coord. Organización Panamericana de la Salud. 2007. Infección Hospitalaria. Legislación en America Latina. Trabajo conjunto con la USAID.
[v] Paiva Gadelha MZ. 1997. Comité de Control de infecciones intrahospitalarias OPS.
[vi] Meneu de Gillerna R, Peiró S. 1997 La revisión del uso inapropiado de la hospitalización en España: ¿de la comunicación científica a la utilización práctica? Todohosp.;134:53-60.
[vii] Zambrana García JL, Delgado Fernández M, Cruz Caparrós G, Díez García F, Martín Escalante MD, Salas Coronas J. 2001. Factores predictivos de estancias no adecuadas en un servicio de medicina interna. Med Clin (Barc).;116:652-4
[viii] Ministerio de Salud de Chile. 2010. Estudio costo efectividad de las prestaciones de salud. Informe final.
[ix] Díaz CA. 2011. Gestión clínica. www.isalud.org
[x] Román A. 2012. Conceptos y definiciones básicas de la gestión clínica. Medwave 2012 12.
[xi] González García G. 2001. Las reformas sanitarias y los modelos de gestión. Rev. Panam Salud Pública. 9.6.406
[xii] Marzo Arana .S 2009. Sistema de Gestión de pacientes. Aragón.
[xiii] Tamayo Canillas L. 2005. Admisión y Gestión de pacientes en la atención especializada.
[xiv] Rovere M. 1999. Redes en salud. Libro digital.
[xv] López Arbolay Omar;. González González Justo L; Rincón Flores Noemí; Piñeiro Martí Juan Tecnología Médica: problemas éticos y necesidad de su evaluación. II Congreso Virtual Neurocirugía 02. www.neuroc.sld.cu
[xvi] PNUD 2009. Manual del comprador responsable en salud. http://www.undp.org.ar/docs/Libros_y_Publicaciones/El_Comprador_Responsable_17marzo2009.pdf
[xvii][xvii] Clarin 09.2012. La judicialización de la medicina una nueva enfermedad. http://www.clarin.com/opinion/judicializacion-salud-nueva-enfermedad_0_779922026.htm
[xviii] Grifell Martín E, Carbonell Riera J M Infiesta García F. 2001 Mejorando la gestión clínica. Desarrollo e implantación de guías de práctica clínica Barcelona: CHC Consultoria i Gestió
[xix] Cometo MC. Gómez PF. Dal Sasso GT. Zarate Grajales RA. De Bertoli Cassiani SH. Falconi Morales C. 2011. Enfermería y seguridad de los pacientes. OPS. Libro.
[xx] Vallejos V. C. 2010. Estudio Costo efectividad de las intervenciones sanitarias. Chile. MINSAL
[xxi] Diaz CA. Braem V. Quiros MC. 2012. Gestión por procesos Lean. Irojo Ediciones Buenos Aires.
[xxii] Puig Junoy J. 2012. Impacto de la regulación de precio de los medicamentos sobre la competencia en el mercado de genéricos: valoración y necesidad de reforma
[xxiii] González García G. De la Puente C Tarragona. 2005 Medicamentos. Salud, política y Economía. Ediciones ISALUD. Buenos Aires.
[xxiv] Gutiérrez Godínez J. Flores Hernández J. Atonal Flores G. 2011. Los medicamentos genéricos: ¿Más barato por lo mismo?. Revista Elementos. 41-47.
[xxv] Báscolo E 2009. Cambios en los mercados de servicios de salud en la seguridad social en Argentina. Serie Estudios para el Desarrollo. Comisión Económica en América Latina y el Caribe. Naciones Unidas. Unidad de Estudios para el desarrollo.
[xxvi] Ruiz Muñoz D. 2005. Nuevas tendencias en la logística sanitaria. Revista de Administración Sanitaria. 505-516.
[xxvii] Díaz CA. 2012. Ciclo recursivo de la gestión. http://www.isalud.org.ar