Dr. Carlos Alberto Dìaz. Profesor Titular Universidad Isalud.
La significación prioritaria de este tema lleva desde dos décadas en la gestión estratégica de servicios de salud, genera la necesidad de ponerlo en la consideración gestora permanentemente, el acervo comenzó en unade la publicación en la asociación de economía de la salud de un programa de transformación de los jefes de servicio en gerentes en el año 2001, al que siguieron varios artículos, cursos, horas de cátedra, dos libros, estos gerentes, jefes, ahora también líderes, coach del cambio y la transformación. De manera más taxativa, más clara, para generar una conjunción constituida por un buen clima de trabajo, incremento de la productividad, satisfacción de los usuarios, calidad en las prestaciones, seguridad y mejor recorrido para el paciente, extendiendo los campos de acción, la formación, las actividades profesionales confiables, más allá de ser un buen jefe de la especialidad, abarcar el manejo del recurso humano, la mejora en la experiencia de los pacientes con sus servicios, en la comunicación, provisión de información, intercambio de conocimientos, proponer y acompañar la implementación de innovaciones, el respaldo de la facturación del servicio y la imagen corporativa, en el liderazgo para transformar las metas estratégicas en operativas. Las habilidades, las competencias en acción que deben desarrollar estos jefes de servicio, se materializan mediante el talento de utilizarlas en las actividades cotidianas, de la atención a los pacientes, el vínculo con los colegas, el cumplimiento de las normas con escribir las historias clínicas respaldando lo que se hace y cómo se hace, Cuidando el bienestar del grupo, la interacción, compartir información. El gerente debe entender que en una empresa de salud se gestionan básicamente nueve cosas: la salud de las personas, el conocimiento, procesos matriciales, las inquietudes de cinco colectivos intervinientes, gran volumen de recursos económicos, contratos imperfectos, resultado positivo de la cadena de valor, la praxis médica –la medicina defensiva y la relación de la empresa con el entorno.La búsqueda radica en la competencia para la acción, “en y sobre” el ejercicio de su función como jefe en una situación concreta, expresado porque lo importante de la competencia no es la propia capacitación, son la manifestación de los comportamientos asociados a una intervención competente ante una situación surgida en el seno de la actividad. La competencia entonces son el conjunto de comportamientos observables que están relacionados con un desempeño bueno o excelente.La competencia es una manifestación compartimental del talento.
Esto requiere que proveamos a los jefes, de conocimientos, habilidades y aptitudes. Estas habilidades se clasifican en discretas y longitudinales. las discretas son las propias de los jefes de servicio para cada especialidad, y las longitudinales las que deben tener todos los jefes. Las discretas deben ser dialogadas con la dirección puesto que deben alinearse también con ventajas competitivas que necesita el establecimiento para los próximos años. Las longitudinales responden a la cultura organizacional: humanización de la atención, atención centrada en la persona, profesionalismo, habilidades interpersonales, choosing wisely, seguridad del paciente, prevención de las infecciones, buen clima organizacional, seguimiento longitudinal, buenas transiciones, formación de postgrado, buena relación con la enfermería y el personal de gestión de pacientes.
Qué son las APROC:
«Las APROC son unidades de confiabilidad de práctica específicas para especialidades médicas. Las facultades o escuelas de medicina –a través de profesionales calificados, denominados ‘supervisores’– asignan y confían tareas o responsabilidades a estudiantes que por medio de la práctica cuenten con las competencias de conocimiento, habilidad y actitud necesarias para ejecutar estas tareas sin supervisión, una vez que hayan sido alcanzadas. Además, son parte esencial del trabajo profesional, ya que contemplan tareas importantes llevadas a cabo en la práctica diaria reconocidas ampliamente por los estudiantes, supervisores y pacientes».
Las APROC son un enfoque superador de la gestión por competencias, hacen que sean factibles y evaluables, al ser el vínculo entre estas y las actividades clínicas.
El modelo de educación para jefes de servicio que propongo es basado en competencias: técnicas, comunicacionales, de liderazgo, manejo de incentivos, conocimiento de costos, alineamiento y generación de imagen. Debe estar apoyado por las APROC que conjugara conocimiento, habilidades y aptitud.
Un jefe de servicio de una especialidad habitualmente tiene aquilatados conocimientos sobre su saber hacer técnico, pero no todas las otras actividades que hacen al buen funcionamiento de su servicio y del conjunto del establecimiento, por ello debemos trabajar y señalar sus habilidades, conocimientos y aptitudes para que se convierta en un buen jefe.
Jefes de Servicio:
Ser responsable de guiar a un equipo de personas hacia objetivos de mejorar el sistema de atención, la experiencia del paciente y la equidad, disminuir los costos en salud, hacer sustentable al sistema es de todas formas un desafío, Esos equipos de alto rendimiento necesitan un líder que saque lo mejor de cada uno y del conjunto.
Si bien este rol debe transitar por un camino de sostener orden y disciplina, dar el ejemplo, los líderes de equipo también aportan un elemento de tutoría y “coaching” a los equipos.
Los jefes de equipo son responsables de todo lo que involucra a su servicio, desde las operaciones diarias hasta de garantizar que los miembros del equipo reciban el mejor apoyo para poder lograr sus objetivos.
El compromiso, la dedicación, el estar detrás de objetivos de calidad y seguridad, que tengan un proyecto de desarrollo de área de responsabilidad en consonancia con los objetivos estratégicos del hospital.
En el informe publicado por Berwick D en 2013, conocido como “Una promesa de aprender un compromiso de actuar”, expresa que el liderazgo consiste en movilizar la atención, los recursos y las prácticas de los demás hacia objetivos, valores o resultados comunes y estratégicos del sistema de salud. Además de la mejora en la calidad de las prestaciones, en aumentar el acceso, universalizar prestaciones y reducción continua del daño al paciente requiere claridad y constancia de propósito entre todos los líderes, desde la primera línea hasta el todo el sistema.
El liderazgo requiere presencia y visibilidad.Los líderes necesitan conocimiento de primera mano de la realidad del sistema en primera línea, y necesitan aprender directamente de aquellos de quienes son responsables y permanecer conectados con ellos.
Estos jefes reconvertidos deben depender del Director médico asociado y responsable de la producción asistencial. Que no solo debe ocuparse de quien ingresa, sino de darle una continuidad hasta su domicilio al paciente, que sepa cómo siguen sus cuidados.
Un líder de equipo es responsable de guiar a un equipo de personas a través de una determinada iniciativa o hacia el logro de un objetivo específico como ser: disminuir infecciones en heridas limpias, altas médicas en horario, disminuir infecciones en catéteres centrales, disminución de la neumonía del respirador, entrega de la epicrisis, pautas de alarma y educación al alta de los pacientes para mejorar su calidad de atención.
El líder del equipo es responsable principalmente de crear un entorno de trabajo colaborativo, cooperación, Inter actuación y de compartir información.
Un líder de equipo brinda instrucciones y ofrece orientación sobre cómo atender, que debe internarse, mejorar la eficiencia asignativa, debe bajar las metas estratégicas a flujos de trabajo operativos, convertidos en vías clínicas o procedimientos. Debe saber delegar para aumentar la capacidad de trabajo y la productividad del servicio, Supervisar el progreso hacia el logro de los objetivos y preparar a los miembros del servicio según sea necesario. Los líderes de equipo a menudo actúan como mentores del equipo, incluso si no tienen un título gerencial. Deben observar no solo lo asistencial sino también lo técnico, el gasto, por acción y omisión, el momento que se dan las altas, preparar el servicio para la recepción de pacientes, cuidar el uso de recursos de diagnóstico y tratamiento. No generar expectativas no fundadas en los pacientes y sus familias. Es un rol operativo moderno, para llevar a la realidad la implementación de un servicio de salud seguro, de calidad, confiable, eficiente, oportuno accesible que genere valor, Evolucionar por ese camino dentro de una organización exige que signifique un mérito a reconocer, en carrera y en valor, sino se agotará en la fase de voluntarismo. Debe estar correspondido con la provisión de medios. También debería ser responsable de mantener la energía del equipo. Un Jefe de servicio debe saber responder de porqué y en que, es importante su trabajo.
Organizar el trabajo cotidiano, altas, egresos, procedimientos, planes de diagnóstico y tratamiento, revista, clases, etc.
Comunicar los objetivos del servicio y como estos contribuyen a los objetivos institucionales.
Conectar el trabajo con el contexto del hospital y del medio
Mejorar los informes a los pacientes y los familiares.
Delegar tareas para los que integran el servicio y vayan creciendo.
Liderar con el ejemplo, llegar temprano, estar cuando se lo necesita, estudiar, buscar información.
Solucionar los problemas que surjan con los pacientes, con los médicos, con los otros colectivos intervinientes.
Identificar las áreas que se pueden mejorar. Genera una propuesta de los gaps del servicio, para que se relacionen las relaciones causa efecto.
Gestionar el progreso de las metas del servicio
Informar el progreso a los participantes involucrados
Actuar como “coach” para ayudar a mejorar las habilidades de los miembros del equipo
Motivar a los miembros del equipo para lograr sus objetivos y mantener la energía.
Es una lista ideal, exigente, que debe ser un programa que evolucione en el tiempo hacia el sistema técnico de toma de decisiones, con la decisión política de priorizar estos aspectos. Mejorar las habilidades comunicacionales.
Debe saber gestionar objetivos y metas de tu servicio, los objetivos deben tener relación directa con el trabajo diario, con la actividad asistencial pura. Cuando los miembros del equipo no comprenden claramente a qué objetivos impacta su trabajo, están menos motivados para realizar un trabajo de calidad. Enseñar a los miembros del equipo como continúan los procesos, que el output de ese proceso se convierte en input de otro, allí, debe estar la continuidad en el pensamiento. También debe ofrecer una visión general del sanatorio u hospital. Atender sus problemas remunerativos o de condiciones de trabajo. Con esa información, pueden establecer las prioridades de las tareas de manera más efectiva y asegurarse de llevar a cabo el trabajo de mayor impacto en el momento adecuado.
Hacer que el trabajo asistencial avance de manera efectiva, eficaz, continua, integrada y longitudinal, que se haga un buen registro de las actividades.
Para ello hay que disponer Métricas claras, de indicadores que se identifiquen. Los miembros del equipo no pueden saber si van por el camino correcto si no entienden con claridad en qué están trabajando y como se está midiendo objetivamente su trabajo.
Seguimiento del progreso. No basta con saber hacia dónde te diriges, también necesitas saber en qué posición te encuentras en relación con tu objetivo.
Comunicación de las actualizaciones y novedades. Como jefe del equipo, también es tu responsabilidad supervisar el progreso y compartir actualizaciones con el equipo del proyecto y los participantes clave.
Como en cualquier posición de liderazgo, los líderes de equipo deben tener excelentes habilidades de comunicación para poder comunicarse con los miembros del equipo sobre el trabajo, informar a las partes interesadas del proyecto sobre el progreso y coordinar con los colaboradores interdisciplinarios en nombre de las necesidades del equipo del proyecto. Es importante señalar que esto incluye tanto la comunicación verbal como la no verbal, ya que una parte considerable de la comunicación en realidad se expresa a través del lenguaje corporal y las expresiones faciales.
Esta comunicación es fundamental para convertir las órdenes de la dirección en flujos de trabajo operativo asistenciales, y transmitir la información de los pacientes a los colegas y de estos a los propios pacientes que deben coparticipar en su cuidado y en la toma de decisiones compartidas, con el principio de la transparencia como base.
Resolver problemas.La gestión de los problemas y la resolución de problemas son habilidades importantes en todos los niveles del proceso de toma de decisiones. Como líder, puedes ayudar a resolver cualquier problema a nivel estratégico y conceptual. Por ejemplo, resaltar los objetivos (a corto o largo plazo) más importantes de la organización y usar estrategias de resolución de problemas para identificar cualquier obstáculo que pueda interponerse en el camino hacia el cumplimiento de los objetivos trazados de tu equipo.
Organizar la actividad, respetar algunas rutinas, acortar tiempos en los pases de guardia, e incrementar los tiempos para que los profesionales médicos y enfermeros estén más tiempo con los pacientes y revisando la información que solicitaron.
GESTION PRODUCTIVA
Participación en la formulación de plan operativo anual y contratos
Conocimiento de la transferencia de riesgo si existen acuerdos modulados
Participación en la decisión de las compras de insumos descartables y tecnologías
Disminución en la utilización de insumos innecesarios.
GESTION DE RECURSOS
Gestión recurso humano
Perfil de utilización de recursos
Preocupación por control del gasto
Conocer el presupuesto del servicio
Conocimiento del flujo de fondos
Perfil médico administrativo adecuado
Manejo adecuado de la información
Implementación de la tarea en equipo
Gestión corporativa
Gestión financiera
Aprender a Delegar, esto también genera aprendizaje en el resto, y descentraliza, permite customizar y generar empowerment. brinda a los miembros del equipo oportunidades para desarrollar habilidades nuevas.
Identifica qué trabajo se puede delegar. Deja en claro la importancia y la urgencia del trabajo delegado para que los miembros del equipo puedan establecer las prioridades. Brinda la capacitación necesaria. Confía, pero verifica.
Gestionar bien los tiempos para asignar a las tareas en función de la importancia y la seguridad.
Evitar que una exigencia inadecuada genere agotamiento en los miembros del equipo esto ocurrió durante la pandemia de covid, cuidado, porque después de superado los límites, es muy difícil recuperar a esas personas.
Para ser un líder eficaz, dedica tiempo a fortalecer los vínculos y el espíritu dentro del equipo, y asegúrate de que todos se sientan parte del mismo.
Para lograr fortalecer los vínculos y el espíritu del equipo, primero debes asegurarte de que todos comprendan los objetivos del servicio para que puedan avanzar juntos hacia la meta del mismo y las institucionales.
para formar un equipo altamente eficaz, debes tener en cuenta lo siguiente:
Supervisar el progreso de forma diaria o semanal, dependiendo de la duración del proyecto.
Evaluar el desempeño del equipo y motivar a cada uno de los miembros.
Una parte muy importante del rol de un líder de equipo es ofrecer “coaching”, capacitación y asesoría a los empleados según lo necesiten
Los jefes deben desarrollar su habilidades de liderazgo e inteligencia emocional.
Conclusión:
Para desarrollar estos aspectos los jefes de servicio debe conocer el sistema de salud para el cual trabajan, gestionar por procesos, saber sobre medicina basada en el valor, diagnosticar la situación de su servicio, identificar los principales gaps o falencias y cómo abordar los problemas, trabajo en equipo, comunicación institucional, interpersonal y asertiva, aspectos de la calidad en salud, prevención de riesgos de mala praxis, saber sobre contratos, costos, que comprar, indicadores y cuadro de mando.
Esta temática se introduce por la observación en el mundo real de diagnósticos de cáncer en estadios más avanzados, siendo probable su vínculo con el alejamiento de los pacientes de sus controles programados habituales que se postergaron en el tiempo por la pandemia, revisando las conductas que hemos tomado, debemos manifestar que los controles si esto se vuelve a repetir deben seguir regularmente, porque sino el daño colateral de la pandemia del Covid 19 será mucho mayor, con el sustento razonable de la cantidad de habitantes vacunados y los refuerzos colocados al personal de salud, que genera protección de casos clínicos más graves como vimos al comienzo de la pandemia, por ello realice una consulta en la base de datos para poder obtener algunas visiones que me parecen útiles.
La primera que el sistema de atencion del cancer no estaba bien, sino que ya venía con alguna crisis, que existe un grupo de pacientes que no recibe de sus sistemas de atención una política activa para hacer diagnóstico precoz de las afecciones neoplásicas, aunque tengan prepaga, obra social, PAMI o el sistema público de salud.
El segundo aspecto tan importante como el anterior es el costo de las nuevas tecnologías de medicamentos en salud que son gasto expansivas con respecto al crecimiento de las economías en el mundo. Las estimaciones predicen que el número de nuevos casos aumentará en las próximas dos décadas a 29,5 millones por año para 2040. De manera preocupante, la falta de análisis de la situación y presupuestación de esta patología se ha identificado como uno de los principales obstáculos que amenazan la sostenibilidad de los sistemas de salud.
Una de las muchas lecciones clave para el control del cáncer de la pandemia actual como tal es invertir en la preparación de los sistemas de salud para brindar una respuesta médica oportuna sin comprometer la calidad de la atención del cáncer. Demasiados sistemas de salud se vieron obligados a disminuir o cerrar la atención de rutina no relacionada con la COVID, lo que ha tenido un impacto negativo en los resultados de los pacientes debido a retrasos tanto en el diagnóstico como en el tratamiento del cáncer.
Corresponde ser optimista, por la respuesta del mundo de la ciencia ante la amenaza de la pandemia, pero hemos retrocedido en algunos aspectos que debemos recuperar, desde una gestión más activa sobre la población, y evitar perder años de vida y recursos por diagnósticos tardíos de cáncer.
Se produce con el cáncer, como con otras enfermedades una toxicidad financiera, que afecta los principios asignativos basados en la evidencia científica, coaptada, no independiente y en la ética, especialmente en los países de bajos recursos.
Se requiere un sistema de atención para enfrentar los desafíos de una ciencia que avanza, aplicación clínica más integral, patrones de enfermedades crónicas cambiantes y un sistema de atención médica fragmentado, complejo y en evolución.
Reproducirá algunos conceptos de esos artículos leídos para efectuar este posteo sobre gestión de pacientes modificada en la era postcovid.
Achieving a multilevel evidence-based approach to improve cancer care in the U.S. post-COVID era: What is the role of management?
En 2018, casi 610 000 personas en los EE. UU. murieron después de soportar las agonías y las humillaciones del cáncer, mientras que a otros 1,7 millones de personas en los EE. UU. se les diagnosticó alguna forma de la enfermedad [ 1 ]. Dejando a un lado los costos humanos, se proyecta que la carga económica de la atención médica relacionada con el cáncer sea de $ 246 mil millones en los EE. UU. para 2030 [ 2 ], con el cáncer reemplazando a las enfermedades cardíacas como la principal causa de muerte en los países de altos ingresos [3 ]. Sin embargo, ya en 2013, el Instituto de Medicina había advertido sobre un “sistema de atención del cáncer esta en crisis” [ 4].
La respuesta de EE. UU. a la crisis de COVID-19 ha revelado dramáticamente la incapacidad del sistema de entrega para satisfacer las necesidades de salud de la población. En particular, COVID-19 desafió al cáncer y las enfermedades cardíacas como una de las principales causas de muerte en 2020 [ 5 ].
Tanto la atención del cáncer como el control de la pandemia requieren un sistema de atención de la salud integrado y bien administrado que pueda ayudar a los pacientes y sus familias a lo largo de todo el proceso, desde la prevención hasta el final de la vida.
Detrás de la evaluación despectiva del IOM sobre el sistema de atención del cáncer del país y el sistema de salud en general [ 6 , 7 ], particularmente evidente cuando se enfrenta a los desafíos de la COVID-19, se encuentran los esfuerzos dentro de la comunidad de atención del cáncer para diseñar un sistema integrado y basado en evidencias. enfoque basado en la mejora de la atención de la salud. Estos esfuerzos de investigación y programas clínicos, que involucran tanto al sector público como al privado, operan en la interfaz entre la ciencia en evolución, su aplicación clínica y un sistema de atención médica cambiante, que representa un microcosmos del sistema de atención médica más grande [ 8], con implicaciones tanto para la gestión como para la comunidad clínica. Como recordó el Dr. Harvey Fineberg, en sus últimos días como presidente del IOM, a las comunidades clínicas, de investigación y gerenciales: “Si podemos resolver los problemas de la atención del cáncer, entonces tenemos la clave para resolver la atención de la salud de manera más amplia”.
La Academia Nacional de Ciencias ha declarado que el estado de la atención del cáncer es una crisis.
El costo de la atención del cáncer está aumentando a un ritmo exponencial.
COVID-19 se ha sumado a los desafíos para mejorar los resultados del cáncer en todo el proceso
El objetivo triple de Berwick ofrece un marco para progresar. Mejor salud para la población, con una mejor experiencia a menor costo por cápita.
Abordar estos desafíos requiere el compromiso de gestión de los sectores público y privado.
Se ofrecen ejemplos de iniciativas del sector público y privado dentro del Triple Objetivo.
Se recomiendan estrategias para que la gerencia las emplee para mejorar el resultado.
La perspectiva para el paciente es mala, abrumadora y aterradora. Casi todos los que ingresan al sistema de prestación de atención experimentarán períodos de frustración y desesperación, y muchos enfrentarán dificultades financieras significativas. A menudo, el “sistema” es poco más que una ilusión, ya que inhibe la transferencia y aplicación efectivas de los avances científicos para mejorar la atención centrada en el paciente a lo largo de todo el proceso, desde la prevención hasta el final de la vida. Debido a que es tan frecuente y costoso, la atención del cáncer en la era de la COVID-19 dramatiza la falta de articulación de los sistemas de pago y prestación de atención médica .
Centrarse en el paciente es fundamental para mejorar la experiencia de la atención del cáncer. Implica un manejo clínico de múltiples especialidades; concordancia con medidas basadas en evidencia; servicios de apoyo, como atención psicosocial , cuidados paliativos y manejo de síntomas; acceso a terapias dirigidas y ensayos clínicos; atención culturalmente adaptada; y acceso oportuno. El sector público ha sido un catalizador de los esfuerzos para mejorar la atención centrada en el paciente para los pacientes con cáncer.
Si bien los desafíos son significativos, hay señales de que, al menos dentro del microcosmos de la atención del cáncer, los gerentes y los líderes clínicos dialogan y colaboran para cumplir con esta responsabilidad:
El sector público y el NIH/NCI han jugado un papel importante en muchos avances de la práctica clínica que ahora se dan por sentados. En una asociación público-privada con hospitales comunitarios, el NCI proporcionó la infraestructura y sirvió como catalizador para los avances a lo largo de la continuidad de la atención en el entorno comunitario [ 43 ]. Más que nunca, estos esfuerzos son necesarios para enfrentar los desafíos de una ciencia que avanza, una aplicación clínica, patrones de enfermedades cambiantes y un sistema de atención médica complejo y en evolución.
La amplia colaboración es la piedra angular para mejorar la atención del cáncer dentro de un entorno comunitario. En 2019, las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de EE. UU. (NASEM, por sus siglas en inglés) emitieron un informe que pedía la coordinación de los esfuerzos de control del cáncer en varias agencias federales para que los temas relevantes, como la calidad, los avances científicos, la seguridad y el costo y el pago, pudieran abordarse de manera integrada en todos los sectores involucrados en la prestación de atención [ 51 ]. Estos esfuerzos pueden representar el prototipo para mejorar la colaboración en el manejo de enfermedades agudas y crónicas, así como para eventos imprevistos como una pandemia.
Programas como el NCORP tienen como objetivo realizar investigaciones sobre el sistema de atención del cáncer a través de una red nacional de oncólogos comunitarios y organizaciones y sistemas de atención médica. Esta red ofrece la capacidad de colaborar con la comunidad clínica para desarrollar intervenciones basadas en evidencia a lo largo de todo el continuo de la atención. Dichas intervenciones incluyen la evaluación para mejorar los procesos de atención, evaluar modelos alternativos de reembolso y estudiar nuevos modelos de prestación de atención a medida que se aceleran los cambios en la ciencia y el sistema de salud. Es importante encontrar formas de acelerar el tiempo para el estudio de estos temas urgentes si queremos aprovechar el valor de estos programas.
Los hospitales están fortaleciendo sus líneas de servicios oncológicos con una mejor alineación con los médicos especialistas en cáncer y apoyo organizacional para garantizar una atención centrada en el paciente. El COVID-19 ha acelerado los esfuerzos para desarrollar programas en el hogar para controlar los síntomas a través de asociaciones de atención domiciliaria y el uso ampliado de la tecnología de monitoreo digital. Algunos proveedores han introducido la infusión de quimioterapia en el hogar, a pesar del impacto financiero bajo algunos modelos de pago actuales, y muchos han lanzado esfuerzos agresivos para abordar los retrasos en las pruebas de detección del cáncer debido al COVID-19. Otros están abordando el rediseño de procesos de trabajo a través de estrategias como LEAN Six Sigma [ 52]. En el futuro, los programas de cáncer se enfrentarán a una competencia cada vez mayor del sector comercial, incluidas las empresas de tecnología, las presiones de los costos y el consumismo, lo que requerirá flexibilidad en la gestión, innovación y una rápida toma de decisiones.
Los elementos básicos para los enfoques multinivel y los objetivos del objetivo triple están establecidos, y se están forjando nuevos caminos dentro de los sectores público y privado para mejorar la atención del cáncer en la comunidad, con implicaciones para el sistema de salud en general. El éxito depende del desarrollo de una visión compartida, un entorno de aprendizaje de apoyo y la creación de confianza entre la dirección y el liderazgo clínico. Como sugiere John Schaar, politólogo y futurista:
El futuro no es un lugar al que vamos, sino uno que estamos creando. Los caminos no se encuentran sino que se hacen . Y la actividad de hacerlos cambia tanto al protagonista como al destino [ 53 ]
La guerra entre Rusia y Ucrania, en sus inicios nos impone otras urgencias, por la alteración de los precios relativos de los commodities y la energía, y una inflación que suma los riesgos de los desequilibrios de la macro. Pero, No tenemos que olvidar que estamos saliendo de una pandemia y hay muchas demandas no respondidas en el sistema de salud, entre ellas la atención del cáncer.
Comentario Propio del blog: Siempre creí que la mejora en el desempeño de los hospitales privados o sin fines de lucro tenía un retorno de inversión vinculado entre otras cosas con: con acortamiento de la estancia hospitalaria, menor cantidad de reinternaciones no programadas por patología, inferior repetición de estudios innecesarios, precisión diagnóstica, mayor cumplimiento de las guías clínicas, disminución del gasto de medicamentos, menos débitos de la facturación, menor gasto en medicina defensiva y el aumento de la reputación institucional, la imagen, que da confianza, en los financiadores, como prestador integral. Menor gasto por eventos adversos por atender la seguridad de los pacientes en la identificación de los pacientes, en el uso de la medicación, prevención de caídas, cirugía segura, prevención de infecciones, de lesiones de piel, en procedimientos disminuye los gastos inherentes a la cobertura de eventos adversos, motivo por el cual, me parece fundamental proponer analizar este tema en la red y en el claustro, que además debería ser una exigencia de acreditación de establecimientos, no solo de la categorización. Esta es una deuda de nuestro sistema de salud, la acreditación obligatoria de hospitales públicos y privados. Es un tópico que tiene muchas aristas, pero empezando de lo más simple es que existen altas barreras de salida de los prestadores de salud, entonces quedan los que cumplen con programas de calidad y seguridad de pacientes y los que no. Los principales financiadores no hacen evaluación de estos aspectos solo de la capacidad instalada, de precios de venta, y si no hay una fuerte expresión de preferencia de los usuarios, se elige por precio. no se indagan los procesos, ni el desempeño. Ellos, los grandes financiadores podrían ser con su poder de compra aliados fundamentales de la mejora de los establecimientos y del sistema de salud en su conjunto.
En la otra cara de la misma moneda, los problemas económicos y financieros de los sanatorios, terminan impactando en la calidad y la seguridad de los pacientes, por problemas en las compras y pago de haberes, que trae dificultades para retener a los mejores.
Los incentivos para impulsar los programas de calidad y de seguridad de los pacientes deben partir de lo estructural, del factor humano, de los procesos, de los insumos, de los proveedores, del cumplimiento de normas de manejo de residuos, de calidad de aire, de la puesta a tierra, de la calidad de agua, de la disposición de los procesos de gestión clínica para el cuidado continuo, longitudinal y prestaciones postatención, para asegurar mejores transiciones, manejo de datos, de información, de competencia y formación continua. De incentivos financieros. de premios, de tiempos de pago, de acompañamiento en inversiones para mejora a cuenta de prestaciones futuras, con cumplimientos de los planes de obra, como así también la renovación de la tecnología para la mejora de la calidad y la seguridad de los pacientes.
Akinleye DD, McNutt L-A, Lazariu V, McLaughlin CC (2019) Correlation between hospital finances and quality and safety of patient care. PLoS ONE 14(8): e0219124. https://doi.org/10.1371/journal.pone.0219124
«Las iniciativas para incentivar financieramente la calidad, como los informes públicos y el pago basado en el valor (VBP), solo lograrán mejorar la salud de la población para todos si están diseñadas para dar cuenta de la complicada relación entre la calidad y la estabilidad financiera de las instalaciones. De lo contrario, estos programas corren el riesgo de perpetuar la historia de «los ricos se hacen más ricos» del sistema de atención médica estadounidense y seguirán penalizando a los hospitales de la red de seguridad y a sus poblaciones desatendidas»
Es difícil determinar si existe alguna relación entre el desequilibrio o los problemas financieros de las instituciones y cuando se empiezan a llevar por delante la calidad, y con qué indicadores se miden, estos racionamientos realizados sin racionalidad.
«Los hospitales rentables con fuertes flujos de efectivo pueden pagar la deuda más rápido, lo que les permite invertir más en capital a costos más bajos que los hospitales con problemas de liquidez. Con más capital, estas instalaciones pueden realizar inversiones considerables en tecnología de información clínica y administrativa y sistemas de monitoreo, contratar personal mejor calificado, mantener programas de capacitación continuos, iniciar protocolos clínicos basados en evidencia y proyectos de mejora de la calidad, con el objetivo y el resultado de atraer más mercado. compartir y aumentar las ganancias.»
«Dado que las actividades para mejorar la calidad y la seguridad del paciente puede implicar costos sustanciales, se supone que los hospitales que enfrentan una mayor presión financiera por ingresos inadecuados limitarán las mejoras de calidad a medida que disminuya el desempeño financiero».
Algunos aspectos de la calidad dependen por ejemplo de la cantidad de enfermeros por cama, especialmente en las unidades críticas, del tiempo de trabajo médico en la interfase con el paciente, la continuidad de atención, la disminución de las esperas, puede motivar el pago de mayor cantidad de salarios y la expansión del plantel. Esto produce una exigencia vinculada a obligaciones, que requieren altos niveles de producción, ocupación y utilización para llegar a los puntos de equilibrio. Debemos ver cómo se logra el punto de equilibrio con el 70% de utilización de la capacidad instalada. Con la atención gerencial que esto implica, porque el tener capacidad ociosa, es un incentivo para aumentar los ingresos de pacientes, sin que por ello mejora la rentabilidad, que depende del mix de casos internados.
«La literatura existente sugiere que la falta de recursos impide que las instalaciones de la red de seguridad inviertan en la mejora de la atención. iniciativas, que pueden conducir a tasas más altas de mortalidad y morbilidad.[ 27 , 28 ] También se ha demostrado que estos centros brindan atención costosa y sobrevaluada debido a sistemas y personal ineficientes, todo lo cual ha demostrado tener un impacto negativo en la atención del paciente y aumentar duración de la estadía en el hospital.[ 29 – 32 ]»
Las iniciativas de pago por valor de las obras sociales o los prepagos, debería contemplar para las instituciones una tasa de retorno de la inversión. Generando sinergias entre financiadores y prestadores, para la mejora en la atención. El financiador también puede asegurar con esta integración vertical no contractual sino de intereses una mayor concentración de pacientes que aseguren el rápido desarrollo del servicio, por una derivación orientada de pacientes, vinculadas a un mejor desempeño, mayor calidad y menos complicaciones.
«Medición de la calidad de la atención hospitalaria y la seguridad del paciente
Se incorporaron un total de 46 indicadores de calidad de atención y seguridad del paciente en una medida compuesta, que abarca cuatro dominios: (1) calidad del paciente hospitalizado, (2) seguridad del paciente, (3) proceso de atención y (4) experiencia de atención del paciente . Llamamos a esta medida el puntaje compuesto de desempeño de calidad/seguridad.
El dominio de calidad de pacientes hospitalizados incluía dos Indicadores de calidad de pacientes hospitalizados (IQI) desarrollados por la Agencia para la investigación y la calidad de la atención médica (AHRQ) y respaldados por el Foro nacional de calidad (NQF): tasa de mortalidad por insuficiencia cardíaca ajustada al riesgo (IQI 16) y mortalidad por neumonía ajustada al riesgo tasa (IQI 20). Las tasas de mortalidad del IQI se obtuvieron del sitio web de datos abiertos del NYSDOH y se basaron en los datos de alta de pacientes hospitalizados del Sistema cooperativo de investigación y planificación estatal (SPARCS) del estado de Nueva York para 2014 [accedido el 27 de marzo de 2018, IQI versión 5.0, marzo de 2015].[ 58 , 59 ]
El dominio de seguridad del paciente se evaluó utilizando 11 indicadores de seguridad del paciente (PSI) de la AHRQ, también basados en datos de SPARCS de 2014 obtenidos del sitio web NYSDOH Open Data [accedido el 27 de marzo de 2018, PSI versión 6.0, septiembre de 2015].[ 59] El dominio abarcó seis medidas de eventos adversos perioperatorios y posoperatorios. Estos eventos incluyeron fractura de cadera posoperatoria (PSI 08), hemorragia o hematoma perioperatorios (PSI 09), alteraciones fisiológicas y metabólicas posoperatorias (PSI 10), insuficiencia respiratoria posoperatoria (PSI 11), embolia pulmonar perioperatoria o trombosis venosa profunda (PSI 12), dehiscencia de herida posoperatoria (PSI 14), úlceras por presión (PSI 03), neumotórax iatrogénico (PSI 06), infección del torrente sanguíneo relacionada con catéter venoso central (PSI 07), punción o laceración accidental (PSI 15) y muertes entre pacientes con baja diagnósticos de mortalidad (PSI 02). Estos PSI, excepto el PSI 10, están respaldados por NQF o incluidos en el PSI compuesto respaldado por NQF.
El dominio del proceso de atención (también conocido como estrategias oportunas y efectivas) se compiló a partir de los indicadores del Programa de informes de calidad de pacientes hospitalizados (IQR) de CMS derivados de revisiones de gráficos [accedido el 27 de marzo de 2018, HQA 2007, año de admisión = 2014]. Para cada hospital, 21 indicadores del proceso de atención contribuyeron al cálculo del puntaje compuesto de desempeño de calidad/seguridad. Las cinco categorías del proceso de atención incluyen: rendimiento del departamento de emergencias (seis indicadores), atención preventiva (seis indicadores), mejora de la atención quirúrgica (seis indicadores), atención de la neumonía (dos indicadores) y atención de accidentes cerebrovasculares (un indicador).
El dominio Experiencia de atención del paciente se evaluó a través de la Encuesta de perspectivas de atención del paciente de Evaluación del consumidor hospitalario sobre proveedores y sistemas de atención médica (HCAHPS), una encuesta públicamente estandarizada a nivel nacional utilizada para medir las percepciones de los pacientes sobre su experiencia hospitalaria. [ 60] Once medidas de HCAHPS son medidas informadas públicamente en el sitio web de Hospital Compare, que incluyen seis temas compuestos, dos elementos individuales y tres elementos globales. Los temas compuestos incluyen la comunicación con los médicos, la comunicación con las enfermeras, la capacidad de respuesta del personal del hospital, el manejo del dolor, la comunicación sobre los medicamentos y la información sobre el alta. Los elementos individuales incluyen la limpieza y la tranquilidad del entorno hospitalario, mientras que los elementos globales incluyen la calificación general del hospital, la voluntad de recomendar el hospital y la transición de la atención: la comprensión del paciente de su atención al momento del alta. Las 11 medidas incluidas en esta presentación han sido respaldadas desde 2006 y los resultados se han vinculado al pago del hospital por informar desde 2007, y se han utilizado en el pago por desempeño y VBP desde 2012.[ 61] Las tasas de respuesta de la encuesta para los hospitales de nuestro análisis oscilan entre el 10 % y el 52 %. Las tasas de respuesta variables y a menudo bajas entre hospitales nos llevaron a realizar un análisis de sensibilidad de nuestros hallazgos con y sin las medidas de experiencia del paciente (accedido el 27 de marzo de 2018, comparación de hospitales. Los datos se usaron desde la fecha de inicio de la medida del 01/04/2014). hasta el 31/03/2015).[ 61 ] 2020: Hospital Compare se consolida con los otros sitios de «Comparación» de CMS en el sitio web de Care Compare ubicado en www.medicare.gov/care-compare/ y el Catálogo de datos de proveedores en data.cms.gov .
Además del compuesto basado en cuatro dominios, se incluyeron varios indicadores de calidad individuales en el análisis con el fin de realizar un análisis comparable con la literatura publicada. Estos incluyeron el 2014 CMS Value Based Purchasing Total Performance Score (VBP-TPS), el reingreso a los 30 días y la mortalidad a los 30 días ajustados al riesgo por todas las causas entre adultos, así como el reingreso a los 30 días y la mortalidad a los 30 días ajustados al riesgo para infarto agudo de miocardio (IAM), insuficiencia cardíaca congestiva (IC) y neumonía (NP). Las medidas de readmisión, respaldadas por NQF, se obtuvieron del Programa de informes de calidad de pacientes hospitalizados durante el año calendario 2014 y están disponibles en el sitio web de Hospital Compare ( http://www.hospitalcompare.hhs.gov ).). Los respaldos de NQF han incluido la consideración de medidas de mortalidad y readmisión específicas de la condición desde abril de 2012 ( http://www.qualityforum.org/ProjectDescription.aspx?projectID=73619 ).»
Características del hospital y covariables
Para describir los hospitales estudiados y para ajustar posibles factores de confusión que pueden influir en el desempeño financiero de los hospitales, se utilizaron las siguientes características del hospital: estado docente, recuento de camas, proporción de altas con Medicare como pagador (Porcentaje-Medicare), proporción de altas con Medicaid como pagador (Porcentaje-Medicaid), y geografía rural versus urbana.
De acuerdo con otras investigaciones, todos los hospitales se ubicaron en una de tres categorías según su respuesta a la encuesta de la Asociación Estadounidense de Hospitales (AHA): hospitales universitarios principales (aquellos que son miembros del Consejo de Hospitales Universitarios [COTH]), hospitales universitarios menores ( miembros no COTH que tenían una afiliación a la escuela de medicina informada a la Asociación Médica Estadounidense) y hospitales no docentes (todas las demás instituciones) [ 63 , 64 ]. El recuento de camas evalúa la cantidad de camas agudas a corto plazo en el hospital, con o sin personal, obtenido de la Encuesta anual de hospitales de la AHA (obtenido el 4 de marzo de 2016 ; https://www.ahadataviewer.com/quickreport/). El número de casos anual de Medicare se definió como la proporción de altas de Medicare dividida por el número total de altas, según los datos de SPARCS de 2014. De manera similar, el número de casos anual de Medicaid se definió como la proporción de altas de Medicaid dividida por el número total de altas según los datos de SPARCS de 2014. Un hospital se consideró urbano si estaba ubicado en un área estadística metropolitana considerada no urbana en caso contrario. Esta información se obtuvo de la Encuesta anual de hospitales de la AHA (recuperada el 4 de marzo de 2016 ; https://www.ahadataviewer.com/quickreport/ ).
«
«Discusión
«Nuestros análisis encontraron pruebas sólidas, como se planteó, de que los hospitales financieramente estables tienen una mejor experiencia del paciente, tasas de reingreso más bajas y muestran evidencia de un menor riesgo de resultados adversos en la calidad y la seguridad del paciente, tanto para pacientes médicos como quirúrgicos. Los hospitales que están en mejores condiciones financieras pueden mantener sistemas altamente confiables y proporcionar recursos continuos para mejorar la calidad, según lo medido predominantemente por las experiencias de los pacientes y un mejor desempeño en las iniciativas de proceso de atención, mientras que las instalaciones con dificultades financieras luchan en estas categorías. Estos resultados superiores en hospitales financieramente estables persistieron después de ajustar por el número de casos del pagador público y las características del hospital, lo que sugiere que las cualidades subyacentes de las instalaciones económicamente acomodadas conducen a una atención médica y quirúrgica superior.14 , 17 , 18 , 48 , 52 ] Mejoramos las instantáneas transversales anteriores mediante el desarrollo de medidas compuestas financieras y de calidad/seguridad que han mejorado la validez predictiva. Los resultados sugieren que el dinero sí importa.
Al estudiar esta relación, también reconocemos que la medición es importante. La fuerza de la relación entre las finanzas y la calidad en este informe varía según los indicadores utilizados en estos análisis de regresión. La salud financiera y la calidad/seguridad del paciente son conceptos complicados que se pueden medir en muchas dimensiones. Los desafíos surgen cuando se intenta encontrar indicadores elusivos para medidas abstractas, amplias y complicadas, como la salud financiera de las organizaciones y/o la calidad de la atención de los establecimientos de salud. La salud financiera se puede medir considerando la estructura de capital, el costo, la rentabilidad, la liquidez y la eficiencia; mientras que la atención de seguridad/calidad del paciente puede variar desde el cumplimiento de las normas del hospital hasta las perspectivas del paciente sobre la atención.[ 62] Los hallazgos de estudios previos sobre este tema son equívocos y tienen diversas limitaciones [ 14 , 25 , 45 – 47 , 50 , 69 – 75 ]. Este informe intenta superar las limitaciones anteriores relacionadas con la medición mediante la integración de un espectro más amplio de datos existentes recopilados de forma rutinaria.
Todas las medidas se estandarizaron antes del análisis de regresión. Con la estandarización, la interpretación de los coeficientes de regresión es el cambio de desviación estándar en las variables dependientes por cambio de desviación estándar en la variable independiente. Esta técnica conserva la validez interna, pero los coeficientes estandarizados solo son generalizables a otras poblaciones con distribuciones de variables similares. Los coeficientes estandarizados también facilitan la comparación entre ecuaciones que usan el mismo conjunto de variables independientes.[ 66 , 67] Al comparar los diversos indicadores financieros y utilizar el modelo sin ajuste por porcentaje de Medicare y Medicaid, la puntuación compuesta de rendimiento de calidad/seguridad tuvo el efecto más fuerte seguido por VBP-TPS y luego varios subconjuntos de readmisiones de 30 días. También se encontró que la mortalidad a los 30 días por infarto agudo de miocardio estaba significativamente asociada con la salud financiera utilizando este modelo; sin embargo, ninguno de los otros indicadores de mortalidad fue significativo en ninguno de los modelos. El mismo patrón se mantuvo cuando se incluyeron en el modelo el porcentaje de Medicare y el porcentaje de Medicaid, aunque la fuerza se atenuó y hubo menos asociaciones significativas.
Cuando los hospitales se comparan entre sí en función de los resultados de los pacientes, inevitablemente surgen preocupaciones sobre el ajuste del riesgo y la heterogeneidad estadística debido a los pequeños numeradores. Para mejorar la medición, se agregaron métricas intermedias de proceso y desempeño a los conjuntos de medidas, lo que genera preocupación sobre si estas medidas informan adecuadamente sobre resultados de salud significativos. [ 76 ] Si bien hay evidencia modesta que conecta muchos puntos finales sustitutos, como el control de factores de riesgo o los procesos de atención, estas métricas pueden elegirse porque son fáciles de acceder y medir, en lugar de ser resultados significativos centrados en el paciente [ 76 , 77]. Con el pago en juego, los médicos y las organizaciones de salud pueden sentirse obligados a participar en juegos, en pruebas y tratamientos excesivos, o en dedicar un esfuerzo desproporcionado a los pacientes que mejoran estos criterios de valoración alternativos en lugar de centrarse en aquellos con mayor riesgo [ 76 , 77 ]. Además, la disponibilidad y la influencia de estos marcadores interfieren con las oportunidades para establecer intervenciones más reflexivas y enfoques individualizados para las complicaciones clínicas, como los determinantes sociales y la multimorbilidad. [ 76 , 78 – 82] Intentamos abordar estas preocupaciones mediante la creación y el uso de medidas de riesgo global que representan tanto la salud financiera como la calidad de la atención, ya que las decisiones para hospitales y sistemas de salud completos a menudo se basan en indicadores a nivel hospitalario. Las medidas globales son más sólidas y preferibles a los factores de riesgo individuales, ya que es más probable que indiquen organizaciones altamente confiables al reducir la influencia del juego y las intervenciones centradas en la mejora de las métricas individuales [ 76 , 83 , 84 ].
Las variables elegidas para el ajuste en nuestros modelos están bien documentadas en la literatura. Está bien documentado que una mayor dependencia de los pagadores del gobierno, como Medicare y Medicaid, se asocia con una mayor probabilidad de dificultades financieras porque estos pagadores generalmente no pagan el costo total promedio de la atención.[ 85 – 91 ] Los análisis se ajustaron para la enseñanza . El estado del hospital, ya que estudios previos asociaron a los hospitales universitarios con un desempeño financiero más bajo, considerando que a menudo cuentan con personal que requiere más mano de obra y ofrecen una amplia gama de servicios médicos costosos. El mero tamaño de un hospital, medido por la cantidad de camas, permite que un hospital soporte valores atípicos costosos que probablemente podrían tener efectos adversos en las instalaciones más pequeñas.[ 92] La combinación de factores operativos y de mercado que influyen en la situación financiera de los hospitales de manera diferente en áreas urbanas y no urbanas está bien documentada.[ 19 ] Los hospitales no urbanos tienden a ser más pequeños y ofrecen menos servicios que los hospitales urbanos. Finalmente, todas las métricas basadas en resultados que se usaron para la puntuación compuesta de calidad se basaron en la metodología de ajuste de riesgo publicada.[ 93 , 94 ]
Implicancias políticas
La política federal y estatal también es importante, ya que los déficits en la calidad de la atención pueden ser sistémicos y requieren modificaciones a nivel de los sistemas para producir los cambios y resultados deseados. A medida que los formuladores de políticas consideran la acción para lograr el triple objetivo, se debe abordar la interrelación de reducir los costos de atención médica y lograr la calidad, particularmente porque afecta la capacidad de las instalaciones con problemas fiscales que atienden a pacientes vulnerables para participar en la mejora de la calidad.
Este estudio tiene implicaciones de política para los millones de pacientes que obtuvieron cobertura de Medicaid a partir de 2014 a partir de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio y para el futuro del programa de Medicaid, en general. La atenuación de la asociación observada aquí cuando se controla por el pagador público es consistente con estudios previos que encontraron que los hospitales con una alta combinación de casos de Medicaid tenían peor calidad de atención que otros hospitales. [ 56 , 95 – 100 ] La investigación sobre hogares de ancianos también sugiere una vínculo entre los niveles más bajos de reembolso de Medicaid y la calidad más baja.[ 101 – 104] A pesar de esta asociación, se ha publicado evidencia poderosa que sugiere que Medicaid tiene un impacto positivo en el acceso a la atención, la seguridad financiera y la salud autoinformada.[ 105 , 106 ] Al mismo tiempo, bajo el velo de la reducción del déficit, se espera que el futuro los recortes podrían conducir a un acceso reducido a una atención de alta calidad. Nuestros hallazgos sugieren que cualquier esfuerzo de reducción de costos por parte de Medicare, Medicaid y los pagadores privados debe diseñarse y administrarse cuidadosamente para que la seguridad del paciente y la atención centrada en el paciente no se vean comprometidas.
Dado que nuestro análisis se realizó con datos a nivel hospitalario, no podemos examinar la variación en la atención de pacientes individuales dentro de cada hospital. El análisis a nivel de paciente sería relevante si la disparidad en la calidad que surge de las dificultades financieras contribuyera a las disparidades en los resultados que se han observado para poblaciones de pacientes vulnerables, incluidos pacientes mayores y más pobres, aquellos cubiertos por Medicaid o Medicare, aquellos con comorbilidades complejas y médicamente grupos desfavorecidos, como las minorías raciales y de género.[ 107 , 108 ] [ 109 – 114 ] Sin embargo, la evaluación del desempeño en el nivel de análisis del hospital es relevante ya que los sistemas y las decisiones políticas se determinan más comúnmente en el hospital, el estado o el gobierno federal. nivel [57 ]. Además, no existe una fuente actual de datos a nivel individual sobre la experiencia de atención del paciente, que el análisis presentado aquí confirma que representa la mayor variabilidad en todo el sistema de atención médica del hospital. Los resultados presentados aquí representan el estado de cosas en Nueva York antes del lanzamiento del Programa de Pago de Incentivos para la Reforma del Sistema de Entrega (DSRIP) financiado por la Exención de Demostración de la Sección 1115 [ 115 ]. La repetición de estos análisis al final de la demostración de cinco años en Nueva York identificará si los cambios sistémicos han reducido los abismos en la calidad de la atención o los han hecho más profundos.[ 116 ]
«Nuestros hallazgos respaldan la noción de que los hospitales con mayores dificultades financieras tienen una experiencia de atención del paciente menos favorable, tasas de reingreso más altas y un mayor riesgo de resultados adversos en la calidad y la seguridad del paciente, tanto para pacientes médicos como quirúrgicos. Estos resultados deficientes en los hospitales con dificultades financieras persistieron después de ajustar el número de casos del pagador público y las características del hospital. Esto sugiere que las cualidades subyacentes de las instalaciones más deficientes pueden conducir a una atención médica y quirúrgica inferior, así como a una experiencia inferior para los pacientes. Este estudio proporciona medidas compuestas que optimizaron la correlación estimada entre el estado financiero y los resultados de calidad/seguridad del paciente.»
El enfoque Lean en las instalaciones de atención médica
Si bien Lean es un enfoque de gestión general que se origina en el mundo de la fabricación y la producción industrial, trasciende a las instalaciones modernas de los hospitales de futuro, se ha utilizado cada vez más en el sector de la salud en las últimas décadas.La adopción de los principios Lean en la etapa de operación del cuidado de la salud ha aumentado rápidamente hasta ahora, tanto que el cuidado de la salud Lean se ha convertido en una importante línea de investigación [ 44 ]. Como herramienta, método o práctica, este enfoque se ve principalmente como una forma de optimizar los procesos médicos y las salas de las instalaciones (servicio de emergencia, quirófanos, etc.) para aumentar el valor para los pacientes, ahorrar costos y ganar eficiencia general . En Quebec (Canadá), el Ministerio de Salud y Servicios Sociales ha adoptado un enfoque sanitario Lean desde 2010, y varios sitios (hospitales y otras instalaciones clínicas) han estado experimentando iniciativas Lean con la implicación del personal para mejorar la atención de los pacientes y los trabajadores. ‘ condiciones [ 48 ]. Liderados por el departamento de recursos humanos, se realizan talleres enfocados en procesos específicos para mejorar las prácticas actuales y adaptarlas para ganar en eficiencia, seguridad y comodidad. Esas iniciativas Lean vienen con la necesidad de una gestión del cambio, ya que las personas tienen que adaptar sus comportamientos a los procesos recién definidos [ 49]. Las partes interesadas importantes son los médicos senior y los líderes clínicos, ya que son agentes de cambio influyentes si se adoptan nuevos comportamientos después de la implementación, pero a veces actúan como antagonistas [ 50 ].Mientras que la implementación de los principios Lean durante la etapa de operación se denomina Lean Healthcare, la implementación de los principios Lean durante la definición del proyecto hospitalario se denomina Lean-led Design. La terminología fue utilizada por primera vez por Grunden y Hagood [ 19 ] en 2012. Se ha definido como «un enfoque sistemático para el diseño arquitectónico de atención médica que se centra en desarrollar e integrar procesos operativos seguros, eficientes y sin desperdicios para crear el entorno físico más solidario y centrado en el paciente posible” Grunden y Hagood [ 19 ] (p. 18). Se busca una planificación rigurosa del espacio para ofrecer el máximo valor a los clientes al tiempo que se maximiza el ahorro de espacio y energía.El diseño dirigido por Lean representa un enfoque participativo en el que los equipos de diseño trabajan en estrecha colaboración con el personal para comprender el papel que juega el entorno en la implementación de los requisitos de espacio funcional y programático. Una herramienta interesante para organizar una iniciativa Lean es a través de talleres, o Kaizen , como lo definen Grunden y Hagood [ 19 ] (p. 16), “En japonés, Kaizen se traduce típicamente como ‘cambio para bien’ e implica una mejora continua. Este es un evento de mejora rápida basado en equipos, generalmente de múltiples vías, diseñado para analizar problemas particularmente complejos que fluyen entre departamentos. Juntos, los miembros del equipo interdepartamental analizan el estado actual, encuentran las causas fundamentales de los problemas, desarrollan una visión del estado futuro y experimentan nuevas formas de trabajar, implementar y evaluar el nuevo método y mantenerlo en el tiempo”.Otra particularidad de Lean utilizada durante el proceso de definición de proyectos es el concepto de flujo que es fundamental para la teoría de la producción [ 51 ]. En el Reino Unido, Hicks et al. [ 11 ] han llevado a cabo talleres Lean específicos (llamados 3P) que incluyen a diferentes clientes para analizar los diversos flujos (pacientes, personal, familiares y amigos, equipos, medicamentos e información) mientras diseñan instalaciones de atención médica antes de calcular los metros cuadrados y proponer una solución de diseño . El objetivo de este análisis es reducir los desperdicios y minimizar las distancias entre los diferentes departamentos del hospital.Sin embargo, a pesar de que el Lean-led Design ha crecido en popularidad, se ha prestado poca atención a la aplicación de los principios Lean en la etapa de definición de proyectos en salud, a diferencia de la etapa de operación, razón por la cual nos enfocamos en esta investigación.
Esta investigación tuvo como objetivo comprender cómo se podría implementar un enfoque de diseño dirigido por Lean para ayudar a mejorar la alineación entre las necesidades del cliente y las soluciones de diseño durante la definición del proyecto en un contexto complejo. Los resultados y la discusión han presentado consideraciones importantes sobre el papel de la participación temprana de las partes interesadas al ilustrar la contribución del diseño dirigido por Lean a la definición del proyecto. Los participantes subrayaron que el Lean-led Design promovió un diálogo entre arquitectos y usuarios, favoreció la evolución de un entendimiento común y durante el proceso, las primeras partes interesadas opuestas podrían convertirse en agentes de cambio positivos.Los resultados de la presente investigación profundizan nuestra comprensión de la fase de definición de proyectos de salud, como la fusión y la construcción de un hospital. También proporciona un marco de diseño conceptual dirigido por Lean para un mayor desarrollo que podría ayudar a los profesionales a implementar de manera efectiva el enfoque en proyectos complejos. Por lo tanto, puede ayudar a mejorar el proceso de definición del proyecto.
Pensar en el diseño es para aumentar el confort, la ergonomía, los traslados, las relaciones entre los servicios, la flexibilidad y la mejora en la productividad, la mejora continua, la calidad la disminución de la variabilidad, además debe facilitar el Gemba, para que los gerentes puedan ver y comprender.
Este es un interesante artículo, que repasa las teorías actuales basadas en Safety II, recordando que es complementaria con Safety I, Porque respectivamente analiza lo que se hace bien y la otra la causa del error. Este desarrollo condujo a un cambio de denominación pasando del pensamiento Safety-I (es decir, centrarse en la prevención de accidentes e incidentes) a Safety-II (comprensión del funcionamiento diario y cómo las cosas suelen «salir bien»). Si bien se ha enfatizado que estos puntos de vista son complementarios en lugar de expresar conceptos opuestos, Safety-II aboga por un enfoque mucho más fuerte en la variabilidad del desempeño normal dentro de un sistema, especialmente en los niveles más altos (por ejemplo, gobierno, reguladores) que tradicionalmente adoptan un punto de vista de Safety-I ( Hollnagel et al., 2013 ). Es una evolución normal de la seguridad de pacientes.
Pasar del error humano a la perspectiva de los sistemas cambiaría fundamentalmente la forma en que vemos y medimos constructos como la conciencia de la situación (ver Stanton et al. 2017 ), la carga de trabajo (Salmon et al. 2017 ) y el trabajo en equipo.
1. Introducción
Muchos de nosotros, en particular los que trabajamos en industrias críticas para la seguridad, recibimos una educación fundamenta en modelos de errores humanos (p. ej., Rasmussen 1982 ; Reason 1990 , 1997 ) y métodos de análisis (p. ej., Kirwan 1992a , 1992b ). La simplicidad del término ‘error humano’ puede ser una bendición, pero es insuficiente. Es probable que hayamos explicado nuestro papel a quienes están fuera de la disciplina utilizando este término. De hecho, la familiaridad con el error humano dentro del lenguaje cotidiano puede haber facilitado la aceptación de la importancia de la ergonomía y los factores humanos (EHF). 1 Sin embargo, su simplicidad también puede ser una preocupación (Shorrock 2013 ), con consecuencias no deseadas para la seguridad y la justicia, y para la disciplina EHF en general.
Actualmente, factores humanos se encuentran dentro de un cambio que está modificando la naturaleza de muchos conceptos antiguos, introduciendo sutilezas que son menos fáciles o simples de explicar a los usuarios de los servicios de EHF, los medios, el sistema de justicia y el público. El movimiento de la ‘vieja visión’ a la ‘nueva visión’ del error humano propuesto por Dekker ( 2006 ) y de Seguridad-I a Seguridad-II (Hollnagel et al. 2013 ; Hollnagel 2014 ) considera muchos de estos desafíos e introduce conceptos más nuevos a la gestión de la seguridad. Ya sea que se considere un cambio de paradigma (por ejemplo, Provan et al. 2020 ) o más una evolución en el pensamiento, el discurso reciente ha cuestionado la utilidad práctica de los métodos y teorías del error humano (Salmon et al. 2017 ).). Apuntalar esto es un cambio fundamental en el enfoque en EHF de analizar las interacciones humano-tecnología a una forma de pensamiento más amplia y holística que reconoce varios aspectos de la ciencia de la complejidad (Dekker 2011b ; Salmon et al. 2017 ; Walker et al. 2010 ).
Junto a esto está el reconocimiento de que la actividad ocurre dentro de los sistemas sociotécnicos, que comprenden componentes humanos y técnicos que trabajan juntos para lograr un objetivo común. En sistemas sociotécnicos complejos, los resultados (por ejemplo, comportamientos, accidentes, éxitos) surgen de las interacciones entre múltiples componentes del sistema (es decir, humanos y tecnologías). Estas interacciones son dinámicas, no lineales (es decir, la fuerza de una causa no es equivalente a su efecto) y no deterministas (es decir, inciertas y difíciles de predecir). Las personas actúan localmente, sin conocimiento del sistema como un todo; por lo tanto, existen diferentes perspectivas y cosmovisiones. Es importante destacar que los sistemas sociotécnicos complejos generalmente están abiertos a su entorno y deben responder y adaptarse a los cambios ambientales. Estos aspectos diferencian los sistemas complejos de los sistemas meramente complicados, dentro del cual las relaciones entre los componentes se pueden analizar con mayor certeza. Muchos artefactos de ingeniería tradicionales pueden conceptualizarse como sistemas complicados, como un avión jumbo o un automóvil. Estos sistemas se pueden reducir a sus partes, analizar y luego volver a ensamblar en su totalidad. Sin embargo, una vez que un elemento social (es decir, la interacción humana) se convierte en parte de los límites del sistema, el sistema se vuelve complejo (Cilliers1998 ; Dekker, Cilliers y Hofmeyr 2011 ). Los sistemas complejos son indivisibles, y por tanto el sistema debe ser la unidad de análisis (Ottino 2003 ). Ackoff ( 1973 )) describió cómo debemos alejarnos de las visiones del mundo de la ‘era de las máquinas’ que asumen que los sistemas son complicados y, por lo tanto, pueden ser tratados de manera reduccionista (es decir, divididos en partes constituyentes, analizados y re ensamblados en un todo). El reverso de esto es el pensamiento sistémico: una forma de pensar el mundo en sistemas, enfatizando las interacciones y relaciones, múltiples perspectivas y patrones de causa y efecto. Aquí, el sistema es la unidad de análisis y el comportamiento de los componentes solo debe considerarse dentro del contexto del todo. Una implicación clave del pensamiento sistémico es que los accidentes no se pueden atribuir al comportamiento de un componente individual (es decir, un error humano), sino que debemos examinar cómo fallaron las interacciones entre los componentes; es decir, cómo falló el propio sistema. Vale la pena señalar aquí, al usar el término ‘fallo del sistema’, se reconoce que los sistemas en sí solo funcionan; los resultados se definen como éxitos o fracasos desde la perspectiva de las partes interesadas humanas (es decir, si se cumplen o no los propósitos de las partes interesadas y las expectativas del sistema).
Ha habido muchos trabajos influyentes que describen este caso para el cambio (por ejemplo, Rasmussen 1997 ; Leveson 2004 ; Dekker 2002 ; Hollnagel 2014 ). Si bien estos debates comenzaron hace más de treinta años (Senders y Moray 1991 ), siguen sin resolverse. Si bien las perspectivas de pensamiento sistémico están experimentando un resurgimiento en EHF (Salmon et al. 2017 ), esta perspectiva aún debe fluir hacia los medios o los sistemas de justicia (p. ej., Gantt y Shorrock 2017 ). Esto crea una situación difícil en la que los mensajes ambiguos de la comunidad EHF sobre la validez y utilidad del error humano son potencialmente perjudiciales para la disciplina (Shorrock 2013 ).). Por lo tanto, esta revisión del estado de la ciencia es oportuna.
Este documento tiene como objetivo resumir la historia y el estado actual de la investigación del error humano, evaluar críticamente el papel del error humano en la investigación y la práctica modernas de EHF, resumir los argumentos para un cambio a los enfoques de pensamiento sistémico y proporcionar recomendaciones para que los investigadores y profesionales de EHF tomen la disciplina adelante.
1.1. Consecuencias del ‘error humano’
Se sigue citando el error humano como la causa de la mayoría de los accidentes (Woods et al. 2010 ). Surgiendo en la década de 1970 como un foco de investigación de accidentes después de desastres como Three Mile Island y Tenerife, las explicaciones de errores humanos llegaron a complementar el enfoque anterior dirigido por la ingeniería en las fallas técnicas y de equipos en las investigaciones (Reason 2008 ). En la actualidad, se afirma comúnmente en los dominios críticos para la seguridad que las fallas humanas causan la mayoría de los accidentes (en el rango de 50 a 90 % según el dominio; p. ej., Baybutt 2002 ; Guo y Sun 2020 ; Shappell y Wiegmann 1996 ). La Agencia Nacional de Seguridad del Transporte por Carretera de los Estados Unidos (NHTSA 2018 )) asigna el 94 % de los accidentes de tránsito al conductor, lo que se interpreta como que «el 94 % de los accidentes graves son causados por errores humanos» (por ejemplo, Rushe 2019 ). En la aviación, el error humano está implicado en la mayoría de las ‘siete causas significativas’ de accidentes de la Autoridad de Aviación Civil (CAA) del Reino Unido (CAA 2011 ), y se ha estimado que el error médico es la tercera causa principal de muerte en los EE. UU. (Makary y Daniel 2016). No sorprende que cifras como estas se utilicen para justificar el reemplazo de humanos por automatización, o la introducción de controles de comportamiento más estrictos (es decir, reglas o procedimientos) con castigo para disuadir el incumplimiento. Sin embargo, a pesar de (ya veces debido a) los controles de seguridad como la automatización, los controles de comportamiento y los castigos, aún ocurren accidentes. De hecho, hemos llegado a un punto en muchos dominios donde la disminución de las tasas de accidentes en los países más desarrollados se ha estancado, por ejemplo, en aviación (Weigmann y Shappell 2003) , carreteras (Departamento de Transporte 2017; NHTSA 2019) y ferrocarril (Walker y Strathie 2016). La visión tradicional del error humano nos ha llevado tan lejos y, al hacerlo, ha expuesto cada vez más la naturaleza sistémica de los errores ‘sobrantes’ junto con las limitaciones de los modelos y métodos existentes (Leveson 2011 ; Salmon et al. 2017 ).
1.2. Orígenes y uso del término
La tendencia humana a atribuir causalidad a las acciones de otro ser humano parece ser parte de nuestra naturaleza (Reason 1990 ). Sin embargo, los esfuerzos por traducir esta atribución común en una construcción científica han resultado difíciles. Para brindar contexto al uso moderno del concepto de error, comenzamos explorando su historia en lenguaje común y su desarrollo temprano como una construcción científica.
El término ‘error’ tiene una larga historia. El latín errorem , del que deriva error, significaba ‘un extraviarse, extraviarse, extraviarse; serpenteante; duda, incertidumbre’; también ‘un extravío figurativo, error’.2 Alrededor de 1300, el error del inglés medio significaba , entre otras cosas, ‘desviación de la verdad, sabiduría, buen juicio, buena práctica o precisión hecha por ignorancia o inadvertencia; algo imprudente, incorrecto o equivocado’ o una ‘ofensiva contra la moral o la justicia; transgresión, maldad, pecado’ (Kurath 1953/1989 ) . El término ‘accidente’ se deriva del latín cadere , que significa ‘caer’ 3que tiene similitudes con el significado de errorem en que ambos implican un movimiento desde algún ‘camino correcto’ objetivo. Esto requiere que se haga un juicio sobre cuál es el ‘camino correcto’ y la naturaleza de cualquier transgresión de él. Por lo tanto, el juicio es clave. Esta es ‘la capacidad de tomar decisiones meditadas o llegar a conclusiones sensatas’ o ‘una desgracia o calamidad vista como un castigo divino’. 4 Juicio es el sustantivo mientras que ‘ser juzgado’ es el verbo, y aquí radica la etimología de la relación del error humano con la ‘culpa’: la culpa connota ‘responsabilidad’, ‘condena’ o incluso ‘condenación’. La responsabilidad individual es fundamental para el derecho penal occidental (Horlick-Jones 1996) y las relaciones superpuestas entre error, accidente, juicio y culpa aparecen regularmente en los juicios jurídicos y en el discurso popular. Algo a lo que Horlick-Jones se refiere como un enfoque ‘culpista’.
Después de la Segunda Guerra Mundial, el lenguaje y las metáforas de nuevos campos de investigación como la cibernética y la computación encontraron expresión en nuevos conceptos de error humano en el campo emergente de la psicología cognitiva. Los modelos de procesamiento de información, como el modelo de atención por etapas de Broadbent ( 1958 ), hicieron explícita la idea de que diferentes unidades cognitivas de procesamiento de información realizan diferentes funciones que permiten a los humanos procesar información del entorno y actuar sobre esta información. Uno de los primeros enfoques del error humano basado en el procesamiento de información fue el de Payne y Altman ( 1962 ).) taxonomía. Esto clasificó los errores asociados con la sensación o la percepción como «errores de entrada«, los errores asociados con el procesamiento de la información como «errores de mediación» y los errores asociados con las respuestas físicas como «errores de salida». No todos los errores, por tanto, eran iguales.
Más recientemente, ha surgido la ingeniería de resiliencia para considerar la capacidad intrínseca de un sistema para ajustar su funcionamiento antes, durante o después de cambios y perturbaciones, de modo que pueda sostener las operaciones requeridas en condiciones esperadas e inesperadas” (Hollnagel 2014).
Este desarrollo condujo a un cambio de marca del pensamiento Safety-I (es decir, centrarse en la prevención de accidentes e incidentes) a Safety-II (comprensión del funcionamiento diario y cómo las cosas suelen «salir bien»). Si bien se ha enfatizado que estos puntos de vista son complementarios en lugar de conflictivos, Safety-II aboga por un enfoque mucho más fuerte en la variabilidad del desempeño normal dentro de un sistema, especialmente en los niveles más altos (por ejemplo, gobierno, reguladores) que tradicionalmente adoptan un punto de vista de Safety-I ( Hollnagel et al., 2013 ).
A partir de la etimología de la palabra error, la creciente referencia al error humano en la literatura científica y los orígenes de diferentes bases teóricas, es claro que el error humano -como concepto- es central en la disciplina, aunque no completamente resuelto. Los orígenes del concepto en EHF se basaron rápidamente en el hecho de que el error humano es muy a menudo un «error inducido por el diseño», y desde entonces ha habido tensión entre eso y una visión más mecanicista y coloquial del error y la «inculpación». Esta tensión impregna el estado actual de la ciencia. A continuación, consideramos cómo se ve el error humano desde diferentes perspectivas de una manera más general, incluso por parte de quienes están fuera de la disciplina EHF. Proponemos un amplio conjunto de perspectivas sobre el error humano y su papel en la seguridad y la causalidad de accidentes (reconociendo que la seguridad no es el único contexto relevante para las discusiones sobre el error humano). Luego, exploramos cómo se ha definido, modelado y analizado el «error humano» mediante la aplicación de métodos EHF.
2. Perspectivas, modelos y métodos para comprender el error humano
2.1. Perspectivas sobre la seguridad y el error humano
En esta sección, proponemos cuatro perspectivas para sintetizar nuestra comprensión del error humano: la perspectiva mecanicista, la perspectiva individual, la perspectiva interaccionista y la perspectiva de sistemas. Los aspectos clave de cada perspectiva se resumen en la Tabla 1 .
Tabla 1. Perspectivas sobre la gestión de la seguridad y la causalidad de accidentes.
Perspectiva
Conceptualización típica del comportamiento humano en el sistema
Unidad típica de análisis
Error como causa
Seguridad-I o Seguridad-II
Perspectiva mecanicista
Complicado
Micro – el humano
Con frecuencia
Seguridad-I
Perspectiva individual
Complicado
Micro – el humano
Con frecuencia
Seguridad-I
Perspectiva interaccionista
Complicado
Meso: el contexto humano y más amplio, a veces la organización.
Con frecuencia
Seguridad-I
Perspectiva de sistemas
Complejo
Macro – el sistema como unidad de análisis
–
Seguridad-I o -II
Las perspectivas representan de alguna manera la evolución de las prácticas de gestión de la seguridad a lo largo del tiempo. Si bien el concepto de error humano y culpa ha prevalecido en la sociedad a lo largo de la historia, los enfoques formales de seguridad, como la investigación de accidentes, comenzaron desde una perspectiva de ingeniería (Reason 2008 ), seguidos por la introducción de la psicología y EHF, y luego la adopción de la teoría de sistemas y ciencia de la complejidad dentro de EHF. También podría verse que las perspectivas encajan a lo largo de un continuo entre la ‘vieja visión’ y la ‘nueva visión’ del error humano de Dekker ( 2006 ), con las perspectivas mecanicista e individual que representan la antigua visión, la visión interaccionista que tiende hacia la nueva visión, y la perspectiva de sistemas que representan la nueva visión.
2.1.1. La perspectiva mecanicista
La perspectiva mecanicista se centra en la tecnología y ve el comportamiento humano de manera determinista. Respaldada por los principios de ingeniería y la ciencia newtoniana, esta perspectiva sugiere que el comportamiento humano se puede predecir con cierta certeza y que se puede calcular la confiabilidad de la falla humana. Una visión reduccionista, la perspectiva mecanicista toma una visión micro y se alinea con el pensamiento de Seguridad-I en relación con la prevención de fallas. Tiende a ver el error como una causa de accidentes.
2.1.2. La perspectiva individual
Esta perspectiva puede conceptualizarse como abordando las ‘malas aplicaciones’ (Dekker 2006 ) o los malos comportamientos. Una indicación de que esta perspectiva está en uso puede ser una referencia al ‘factor humano’. Este enfoque a menudo se asocia con ‘blamismo’ y está desactualizado dentro de EHF. Sin embargo, todavía se puede encontrar dentro de la práctica de seguridad ejemplificada en algunos enfoques de seguridad basados en el comportamiento y en las intervenciones de educación y cumplimiento comúnmente aplicadas para abordar problemas de seguridad pública. Por ejemplo, este enfoque continúa dominando la investigación y la práctica de la seguridad vial en la que el comportamiento del conductor se considera la causa principal de los accidentes de tránsito y la educación vial y la aplicación son estrategias de intervención comunes (p. ej., Salmon et al. 2019 ).
2.1.3. La perspectiva interaccionista
Generalmente aplicada en un contexto de Seguridad-I, esta perspectiva todavía ve el error como la causa de los accidentes, pero reconoce el papel contribuyente de los factores contextuales y organizacionales. A veces denominado «pensamiento sistémico simplista» (Mannion y Braithwaite 2017 ), considera las influencias del sistema en el comportamiento, pero a menudo de forma lineal o mecanicista, y se limita al contexto organizacional. A diferencia de las perspectivas mecanicista e individual, la perspectiva interacciona lista no connota una visión negativa de los humanos, a menudo todo lo contrario (p. ej., el enfoque de la ergonomía centrado en la persona de Branton (1916-1990); Osbourne et al. 2012).
2.1.4. La perspectiva de los sistemas
Esta perspectiva, respaldada por la teoría de sistemas y la ciencia de la complejidad, adopta una visión más amplia del comportamiento del sistema en múltiples organizaciones y reconoce influencias sociales más amplias. Puede diferenciarse de la perspectiva interaccionista en que toma el propio sistema como unidad de análisis (a menudo considerando elementos más allá de los límites de la organización); considera interacciones no lineales; y generalmente ve los accidentes como ‘fallas de los sistemas’, en lugar de adoptar la visión del ‘error como causa’. Excepcionalmente, esta perspectiva puede explicar los accidentes en los que no hay un «error» subyacente, pero en los que el desempeño normal de las personas en todos los niveles del sistema lo lleva a ir más allá de los límites de la operación segura. Johnston y Harris ( 2019 )), hablando de las fallas del Boeing 737 Max explica que “también se debe recordar que nadie en Boeing quería cambiar vidas humanas por mayores ganancias… A pesar de las creencias y prioridades individuales, las organizaciones pueden tomar y ejecutar decisiones que ninguno de los participantes realmente quiere… (pág. . 10). La perspectiva de los sistemas se alinea más a menudo con Safety-II, con el objetivo de optimizar el rendimiento en lugar de solo prevenir fallas. También es compatible con los enfoques de diseño centrados en el ser humano en los que las necesidades y perspectivas del usuario se consideran dentro de una comprensión más amplia del funcionamiento del sistema (por ejemplo, Clegg 2000 ).
2.2. Modelos de desempeño humano
Partiendo predominantemente de las perspectivas EHF individual e interaccionista, los modelos de desempeño humano (ver Tabla 2 ) brinda representaciones conceptuales de los mecanismos por los cuales surgen los errores. Los modelos deben interpretarse en el contexto en el que se desarrollaron, con modelos que surgen de los cambios en el estado de la ciencia. Los modelos estructurales, como los enfoques de procesamiento de información, se alinean con la perspectiva individual. Estos modelos se centran en las estructuras cognitivas y la cognición ‘en la cabeza’. En contraste, modelos funcionales como el modelo de ciclo perceptual (Neisser 1976 ), rutinas reescribibles (Baber y Stanton 1997 ; Stanton y Baber 1996 ) y el modelo de control contextual (Hollnagel 1993; Hollnagel y Woods 2005 ), se alinean con la perspectiva interaccionista y consideran interacciones dirigidas a objetivos entre los humanos y su entorno. Es importante destacar que el error humano, fenomenológicamente, aparecerá de manera diferente dependiendo de la lente de modelado a través de la cual se proyecte. Algunos modelos iluminarán ciertas perspectivas más que otras y algunos tendrán mayor validez predictiva, en algunas situaciones, que en otras. El modelo seleccionado, por tanto, incide en la realidad del error humano.
Tabla 2. Resumen de los modelos de desempeño humano y error humano; por orden de fecha de publicación.
La selección de modelos también influye en los métodos aplicados. Hace dos décadas, Kirwan ( 1998a ) revisó y analizó 38 enfoques para la identificación de errores humanos, y desde entonces se han desarrollado muchos más. Esto incluye análisis de confiabilidad humana (HRA), identificación de errores humanos (HEI) y métodos de análisis de accidentes. Por lo tanto, limitamos nuestra revisión (ver Tabla 3 ) a los métodos descritos en Stanton et al. ( 2013) como representación de métodos que están generalmente disponibles y en uso por los profesionales de EHF. Para comprender la influencia relativa de cada método, utilizamos Scopus para identificar citas y otras métricas de artículos para cada publicación fundamental que describe un método. Si bien estos recuentos de citas son una medida aproximada y no nos dicen nada sobre la utilización en la práctica, 5 brindan una idea de la importancia de los métodos dentro de la literatura académica.
En términos generales, los métodos de error humano revisados pertenecen a dos clases: retrospectivo y prospectivo; sin embargo, un subconjunto abarca ambas clases.
Los métodos retrospectivos de análisis de errores humanos brindan información sobre qué comportamientos contribuyeron a un accidente o evento adverso, y la mayoría de los métodos alientan al analista a clasificar los errores (p. ej., resbalones, fallas o errores) y los factores que determinan el desempeño (p. ej., presión de tiempo, acciones del supervisor, procedimientos en el lugar de trabajo). . El Sistema de Clasificación y Análisis de Factores Humanos (HFACS; Weigmann y Shappell 2001 ) fue el único método identificado como retrospectivo únicamente. Originalmente desarrollado para la aviación, HFACS se ha adaptado para varios dominios críticos para la seguridad (p. ej., marítimo, Chauvin et al. 2013 ; minería, Patterson y Shappell 2010 ; y ferrocarril, Madigan, Golightly y Madders 2016 ).). HFACS proporciona taxonomías de errores y modos de falla en cuatro niveles organizacionales (actos inseguros, condiciones previas para actos inseguros, supervisión insegura e influencias organizacionales).
Los métodos de error humano prospectivo se utilizan para identificar todos los posibles tipos de error que pueden ocurrir durante tareas específicas para que los remedios de diseño puedan implementarse con anticipación. Generalmente aplicados junto con el análisis de tareas, permiten al analista identificar sistemáticamente qué errores podrían cometerse. El Enfoque Sistemático de Reducción y Predicción del Error Humano (SHERPA; Embrey 1986 , 2014 )), por ejemplo, proporciona a los analistas una taxonomía de ‘modos de error externo’ basados en el comportamiento, junto con ‘mecanismos de error psicológico’, con los que identificar errores creíbles basados en operaciones derivadas de una tarea de análisis del proceso bajo análisis. Los errores creíbles y los factores relevantes que influyen en el rendimiento se describen y clasifican según su probabilidad y criticidad antes de identificar las medidas correctivas adecuadas. Los métodos prospectivos también pueden apoyar HRA, mediante el cual las tareas se evalúan para las probabilidades cuantitativas de que ocurran errores humanos teniendo en cuenta las probabilidades de error humano de referencia y los factores de configuración de rendimiento relevantes. Los ejemplos incluyen la técnica de evaluación y reducción de errores humanos (HEART; Williams 1986 ) y el método de análisis de errores y confiabilidad cognitiva (CREAM; Hollnagel1998 ). Como se puede ver en la Tabla 3 , CREAM fue el más citado de los métodos revisados.
En diversos grados, todos los métodos de error humano se basan en una perspectiva mecanicista, individual o interaccionista subyacente. No hay duda de que tales enfoques son útiles, pero se recomienda precaución. La precisión de los enfoques HRA ha sido cuestionada dadas las incertidumbres que rodean las estimaciones de probabilidad de error (Embrey 1992 ) y la confiabilidad y validez metodológica general (Stanton et al. 2013 ). También se ha sugerido que la categorización y el conteo de errores respaldan una visión del mundo de los humanos como componentes de sistemas poco confiables que necesitan ser controlados o incluso reemplazados por automatización (Woods y Hollnagel 2006 ). Tanto Embrey ( 1992 ) como Stanton et al. ( 2006) sugieren que los métodos deben centrarse en la identificación de errores potenciales en lugar de su cuantificación, con el beneficio de los conocimientos cualitativos obtenidos y las oportunidades para identificar medidas correctivas que pueden informar el diseño o el rediseño.
Como era de esperar, ninguno de los métodos revisados adopta una perspectiva de sistemas.
3. Uso, mal uso y abuso del error humano
Está claro que el estado actual de la ciencia comprende múltiples perspectivas sobre el error humano, múltiples marcos teóricos y múltiples métodos. Todos han desempeñado un papel en la elevación del perfil de EHF dentro de las industrias críticas para la seguridad. Del mismo modo, desde la perspectiva de la conciencia pública de EHF, la idea de error humano está muy extendida en los informes de los medios y tiende a usarse como sinónimo de EHF (Gantt y Shorrock 2017 ). Se ha demostrado que el ‘blamismo’ de los medios influye en las personas para que acepten más fácilmente que las personas culpables merecen un castigo y asignen menos responsabilidad a la organización en general (Nees, Sharma y Shore 2020). De hecho, los medios de comunicación tienden a modificar el término para culpar a la persona más cercana al evento (por ejemplo, error del piloto, error del conductor, error de la enfermera). La tensión no resuelta entre el error humano y el error de diseño conduce a consecuencias no deseadas. Incluso el uso de tales términos fomenta un enfoque en el ‘factor humano’ en lugar del sistema más amplio (Shorrock 2013 ). Parafraseando a Parasuraman y Riley ( 1997 ) sobre la automatización; el término error humano es ‘usado’, ‘mal usado’ y ‘abusado’. Una discusión que considere estos temas ayuda a explorar más a fondo el estado actual de la ciencia.
3.1. Uso y utilidad del error humano
3.1.1. Una construcción intuitiva y significativa
El error humano es “intuitivamente significativo” (Hollnagel y Amalberti 2001 , 2). Es fácil de explicar a personas ajenas a la disciplina EHF oa aquellos nuevos en EHF. Enmarcar las acciones como errores, como actos u omisiones no intencionales en lugar de violaciones intencionales, puede ayudar a reducir la culpa injusta. La mayoría de la gente también estará de acuerdo con la frase “errar es humano” (Alexander Pope 1688-1744), al menos en principio. De hecho, el ensayo y error es una parte importante de los procesos normales de aprendizaje y los errores ayudan a mantener los sistemas seguros al desarrollar la experiencia del operador en su gestión (Amalberti 2001 ). Singleton ( 1973 , 731) señaló que los operadores hábiles hacen un “buen uso del error” y “son efectivos debido a sus características supremas en la corrección de errores más que en la prevención de errores”.
3.1.2. Los errores y las recuperaciones heroicas surgen de los mismos procesos subyacentes.
Los errores también facilitan la innovación fortuita (Reason 2008 ). Por ejemplo, si Wilson Greatbatch no hubiera instalado el tamaño incorrecto de resistencia en su dispositivo experimental de registro del ritmo cardíaco, no habría notado que el circuito resultante emitía pulsos eléctricos y probablemente no se habría inspirado para construir el primer marcapasos en 1956 (Watts 2011 ). De manera similar, si Alexander Fleming hubiera mantenido un laboratorio limpio y ordenado, no habría regresado de vacaciones para encontrar moho creciendo en una placa de Petri, lo que condujo al descubrimiento de la penicilina (Bennett y Chung 2001 ).). De acuerdo con los argumentos de Seguridad II, estos eventos demuestran que los procesos que sustentan el error humano son los mismos que conducen a resultados deseables. En consecuencia, la eliminación del error a través de la automatización o controles estrictos también puede actuar para eliminar la innovación, la adaptabilidad, la creatividad y la resiliencia humanas.
3.1.3. Oportunidades para aprender
Los modelos de error humano y las taxonomías han sido una herramienta importante en EHF durante décadas. Han facilitado el aprendizaje de cuasi accidentes y accidentes (p. ej., Chauvin et al. 2013 ; Baysari, McIntosh y Wilson 2008 ), el diseño de interfaces hombre-máquina mejoradas (p. ej., Rouse y Morris 1987 ) y el diseño de sistemas tolerantes a errores. (por ejemplo, Baber y Stanton 1994 ).
3.2. Mal uso y abuso del error humano
Por el contrario, hay varias formas en las que el error humano ha sido mal utilizado, abusado o ambos. Estos se relacionan con la falta de precisión en el constructo y la forma en que se usa en el lenguaje. También se relaciona con una cultura subyacente de culpabilidad, explicaciones simplistas de la causalidad de los accidentes, un enfoque en los trabajadores de primera línea y la implementación de soluciones inapropiadas.
3.2.1. Una falta de precisión en la teoría y el uso en el lenguaje.
Una crítica científica clave de la noción de error humano es que representa un modelo popular de cognición. Es decir, el error humano es una construcción no observable, utilizada para hacer inferencias causales, sin claridad sobre el mecanismo detrás de la causalidad (Dekker y Hollnagel 2004 ). Esta noción está respaldada por el hecho de que existen múltiples modelos de error humano. En términos de lenguaje, Hollnagel y Amalberti ( 2001 ) sugieren que el mal uso del error humano puede estar relacionado con que se considere una causa, un proceso o una consecuencia:
Error humano como causa : Cuando se utiliza el error humano como causa o explicación de un evento adverso, representa un punto de parada para la investigación. Esto dificulta el aprendizaje, con factores más amplios que jugaron un papel contribuyente en el accidente potencialmente pasados por alto. El error humano no es una explicación del fracaso, exige una explicación ” (Dekker 2006 , 68). Enmarcar el error como causa del fracaso genera varios resultados negativos, como el refuerzo de la culpa, la recomendación de contramedidas inapropiadas (es decir, reentrenamiento, modificación del comportamiento) y la falta de acción sobre los problemas sistémicos que son las verdaderas causas subyacentes del fracaso. Razón ( 2000) proporcionó la analogía de aplastar mosquitos versus drenar pantanos. Podemos aplastar a los mosquitos (culpando y reentrenando a las personas) o drenar los pantanos en los que se reproducen los mosquitos (abordando los factores sistémicos). Sin embargo, las acciones de quienes están en primera línea siguen siendo el foco de las investigaciones oficiales de accidentes. Por ejemplo, la investigación sobre el descarrilamiento de un tren en Santiago de Compostela en 2013 por parte de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios de España se centró en el error del maquinista (Vizoso 2018 ) y la investigación de la Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil de Francia sobre Air France El accidente del 447 se centró en la falla de los pilotos para controlar la aeronave (Salmon, Walker y Stanton 2016 ).
El error humano como proceso : cuando el error humano se analiza como un proceso o un evento, la atención se centra en el error en sí mismo, en lugar de sus resultados. Uno de los problemas con este enfoque es que el error a menudo se define como una desviación de un proceso ‘bueno’ (Woods y Cook 2012 ); alguna ‘verdad fundamental’ en una realidad objetiva. Pero esto plantea más preguntas, como qué estándar es aplicable y cómo explicamos la racionalidad local. También plantea preguntas sobre lo que significa para otras desviaciones, dado que estas son relativamente comunes y ocurren sin consecuencias adversas (y, de hecho, a menudo conducen a consecuencias exitosas).
Confundir el error con su resultado : El uso final del error humano discutido por Hollnagel y Amalberti ( 2001 ) es donde el error se define en términos de su consecuencia, es decir, el evento del accidente. El error humano usado en este sentido se confunde con el daño que ha ocurrido. A modo de ejemplo, aunque el informe de salud seminal To Err is Human (Kohn, Corrigan y Donaldson 1999) pidió un cambio sistémico y fue un catalizador para centrarse en la seguridad del paciente, también confundió el daño médico con el error médico, poniendo así el foco en el desempeño individual del trabajador de la salud. Hacer referencia al error humano también tuvo la consecuencia no deseada de que el sector de la salud creyera que podía abordar los problemas que enfrentaba sin la ayuda de otras disciplinas, por lo que no pudo mantenerse al día con los desarrollos modernos en la ciencia de la seguridad (Wears y Sutcliffe 2019 ).
Como señalan Hollnagel y Amalberti ( 2001 ), para cada una de las formas en que se utiliza el error humano en el lenguaje, tiene connotaciones negativas. Esto es importante, porque aunque muchas personas en la vida cotidiana y en los lugares de trabajo reconocerán que ‘todo el mundo comete errores’, estamos sesgados cognitivamente para suponer que las cosas malas (es decir, los errores y los resultados adversos asociados) les suceden a las personas malas, los llamados ‘simplemente’. hipótesis mundial’ (ver Furnham 2003 para una revisión; también Reason 2000 ). De manera similar, el ‘credo de la causalidad’ (Hollnagel 2014) es la idea de que para cada accidente debe haber una causa, y generalmente una mala (ya que las malas causas preceden a las malas consecuencias), que estas malas causas pueden buscarse hacia atrás hasta que una ‘causa raíz’ (o conjunto de causas) pueda ser identificados, y que todos los accidentes son prevenibles encontrando y tratando estas causas. Esta mentalidad refuerza un enfoque en descubrir ‘cosas malas’. Sin embargo, como hemos visto, el pensamiento contemporáneo postula que las personas actúan en un contexto de racionalidad limitada y local, donde la adaptación y la variabilidad no solo son comunes sino necesarias para mantener el desempeño del sistema. La contribución del ‘desempeño normal’ a los accidentes ahora es ampliamente aceptada (Dekker 2011b ; Perrow 1984 ; Salmon et al. 2017 ).
3.2.2. Culpa y explicaciones simplistas de los accidentes
El credo de la causalidad se alinea con la tradición legal de responsabilidad individual por accidentes, donde la mala causa es un delito o el incumplimiento de un deber legal. Dekker ( 2011a ) describe el cambio en las actitudes sociales desde antes del siglo XVII, cuando la religión y las supersticiones explicaban las desgracias, hasta la adopción de lo que se consideraba un concepto más científico y racional de «accidente». Los accidentes fueron vistos como “simplemente una coincidencia en el espacio y el tiempo sin motivación ni humana ni divina” (Green 2003, 31). No fue hasta el advenimiento de catástrofes industriales a gran escala como Three Mile Island en 1979 y Tenerife en 1977 que un enfoque de gestión de riesgos pasó a primer plano, con la correspondiente reducción en la aceptación pública del riesgo a “tolerancia cero al fracaso”. (Dekker 2011a , 123). Esto ha generado una presión adicional para identificar a un actor culpable y garantizar que sea llevado ante la justicia.
Otro elemento es el sesgo de resultado por el cual la culpa y la criminalización son más probables cuando las consecuencias de un evento son más graves (Henriksen y Kaplan 2003 ; Dekker 2011b ). Teoría de la atribución defensiva (Shaver 1970) propone que se atribuye más culpabilidad a los accidentes de alta severidad que a los de baja severidad, ya que un evento de alta severidad evoca nuestras defensas autoprotectoras contra la aleatoriedad de los accidentes. El aumento de la culpa proporciona entonces una sensación de control sobre el mundo. Atribuir la culpa después de un evento adverso, particularmente uno catastrófico, restaura un sentido de confianza en los ‘expertos’ (que pueden ser individuos u organizaciones). Esta reparación de la confianza es necesaria para la continuación de la expansión tecnológica y sugiere una “necesidad fundamental, casi primitiva, de culpar…” (Horlick-Jones 1996 , 71).
La retrospectiva también juega un papel importante (Dekker 2006 ). Después de un accidente, es fácil caer en la trampa de ver los eventos y las condiciones que conducen al evento como lineales y deterministas. El sesgo retrospectivo en combinación con el sesgo de atribución ayuda a fortalecer las creencias de gerentes, jueces, investigadores y otros que revisan accidentes para ‘persuadirse a sí mismos… de que nunca habrían sido tan irreflexivos o imprudentes’ (Hudson 2014 , 760). El derecho penal en los países occidentales tiende a basarse en la noción de que los eventos adversos surgen de las acciones de actores racionales que actúan libremente (Horlick-Jones 1996 ). Este ‘determinismo progresivo’ (Fischoff 1975) también aumenta la confianza en nuestra capacidad para predecir eventos futuros, lo que significa que es posible que no tengamos en cuenta las vías causales que no han surgido previamente.
3.2.3. Centrarse en los trabajadores de primera línea
Los modelos y métodos de error humano, casi universalmente, no tienen en cuenta que los errores son cometidos por humanos en todos los niveles de un sistema (Dallat, Salmon y Goode 2019 ). Más bien, hacen que los analistas se concentren en el comportamiento de los operadores y usuarios, particularmente aquellos en la ‘primera línea’ o ‘extremo afilado, como los pilotos, los operadores de la sala de control y los conductores. Esto es inconsistente con la comprensión contemporánea de la causalidad de los accidentes, que enfatiza el papel que juegan las decisiones y acciones de otros actores en todo el sistema de trabajo en las trayectorias de los accidentes (Rasmussen 1997 ; Salmon et al. 2020 ). Además, décadas de investigación sobre liderazgo en seguridad (Flin y Yule 2004 ) y clima de seguridad (Mearns, Whitaker y Flin 2003) destacan la importancia de las decisiones y acciones gerenciales en la creación de ambientes seguros (o inseguros). No obstante, es interesante notar que, a pesar de décadas de investigación, nuestro conocimiento del error humano todavía se limita en gran medida a los trabajadores o usuarios de primera línea, mientras que la naturaleza y la prevalencia de los errores en los niveles más altos de los sistemas críticos para la seguridad han recibido mucha menos atención. Esto puede explicarse por el hecho de que la relación o acoplamiento entre el comportamiento y el resultado afecta cómo se atribuye la responsabilidad (Harvey y Rule 1978 ). Los aspectos clave de esto incluyen la causalidad y la previsibilidad (Shaver 1985). A menudo hay un lapso de tiempo entre las decisiones o acciones tomadas por aquellos que están fuera de la línea del frente y el evento del accidente. Dentro del marco de tiempo intermedio, existen muchas oportunidades para que otras decisiones y acciones, o circunstancias, cambien el curso de los acontecimientos. Además, cuando las decisiones están separadas temporalmente del evento, es más difícil prever las consecuencias, particularmente en sistemas complejos donde las consecuencias no deseadas no son infrecuentes.
La forma en que definimos el error humano también puede generar dificultades al considerar el papel de quienes están en los niveles superiores del sistema. Los trabajadores de primera línea generalmente operan bajo reglas y procedimientos que proporcionan un estándar normativo contra el cual se puede juzgar su comportamiento. Por el contrario, los diseñadores, gerentes y demás generalmente operan con más grados de libertad. Es más fácil entender que sus decisiones involucran compensaciones entre demandas en competencia, como un gerente que no puede contratar personal adicional debido a restricciones presupuestarias o un diseñador que renuncia a la funcionalidad para maximizar la usabilidad. En muchos sentidos, la gran cantidad de reglas y procedimientos que imponemos a los trabajadores de primera línea para restringir su comportamiento enmascara nuestra capacidad de ver sus decisiones y acciones como involucrando el mismo tipo de compensaciones (por ejemplo, entre costo y calidad,
Otras razones para centrarse en el trabajador de primera línea son más pragmáticas, como las dificultades prácticas de identificar decisiones específicas que ocurrieron mucho antes del evento que pueden no estar bien documentadas o recordadas. Incluso cuando se pudiera identificar a los involucrados, puede ser difícil localizarlos. Centrarse en el trabajador de primera línea, o «la última persona en tocar el sistema», proporciona una explicación sencilla. Los gerentes y los tribunales prefieren las explicaciones causales simples (Hudson 2014 ) y son menos costosas que las investigaciones en profundidad que pueden identificar fallas sistémicas.
Además, la investigación ha demostrado que las explicaciones causales simples reducen la incertidumbre pública sobre los eventos adversos, como los tiroteos en las escuelas (Namkoong y Henderson 2014 ). También es conveniente que una organización se centre en la responsabilidad individual. Esto no solo es legalmente deseable, sino que enmarca el problema de una manera que permite que la organización continúe operando como de costumbre, dejando intactas sus estructuras, cultura y sistemas de poder (Catino 2008 ; Wears y Sutcliffe 2019 ).
3.2.4. Arreglos inapropiados
En la práctica, el enfoque en el error humano ha llevado a recomendaciones frecuentes de correcciones o contramedidas inapropiadas del sistema. Por ejemplo, en muchas industrias, las investigaciones de accidentes aún conducen a recomendaciones centradas en los trabajadores de primera línea, como el reentrenamiento o la educación sobre los riesgos (Reason 1997 ; Dekker 2011b). Además, la omnipresencia del enfoque de jerarquía de control en ingeniería de seguridad y salud y seguridad ocupacional (OHS) puede reforzar la filosofía de que los humanos son un «punto débil» en los sistemas y necesitan ser controlados a través de mecanismos administrativos y de ingeniería. Esta filosofía de seguridad, sin la entrada adecuada de EHF, puede reforzar las intervenciones basadas en personas que intentan restringir el comportamiento, como la adición de nuevas reglas y procedimientos a un conjunto ya abrumador del cual nadie tiene total supervisión o comprensión. Esto contrasta con las intervenciones tradicionales de EHF basadas en un diseño centrado en el ser humano, mejorando la calidad de vida laboral y promoviendo el bienestar de los trabajadores. Un ejemplo contemporáneo es una tendencia hacia el uso de la automatización en más aspectos de nuestra vida cotidiana, como conducir, respaldado por el argumento de que los humanos son intrínsecamente poco confiables. Esto encarna la suposición determinista que subyace a muchos enfoques de la seguridad y la prevención de accidentes que ignora los atributos fundamentales de los sistemas complejos, como la no linealidad, la emergencia, los bucles de retroalimentación y la variabilidad del rendimiento (Cilliers1998 ; Grant et al. 2018 ). Por lo tanto, las soluciones se basan en suposiciones inapropiadas de certeza y estructura, en lugar de ayudar a los humanos a adaptarse y hacer frente a la complejidad. En una nota relacionada, la creciente imposición de reglas, procedimientos y tecnologías agrega complejidad y acoplamiento dentro del sistema, lo que a su vez puede aumentar las oportunidades de fracaso (Perrow 1984 ).
4. Perspectivas de sistemas y métodos en EHF
El uso apropiado de términos, teorías y métodos relacionados con el error humano ha permitido indudablemente progresar, pero la tensión subyacente entre el error humano y el «fallo de los sistemas» sigue sin resolverse. El uso indebido y el abuso del error humano generan desventajas que pueden estar ralentizando el progreso en la mejora de la seguridad. En respuesta, las perspectivas sobre el error humano que se consideraban radicales en la década de 1990 se están generalizando y el estado actual de la ciencia apunta hacia un enfoque sistémico. De hecho, EHF se conceptualiza regularmente como una disciplina de sistemas (por ejemplo, Dul et al. 2012 ; Moray 2000 ; Wilson 2014 ; Salmon et al. 2017). Específicamente, al considerar las fallas, se propone que vayamos más allá del error humano, el error de diseño (Fitts y Jones 1947 ), incluso más allá de la ‘falla inducida por el sistema’ de Weiner ( 1977 ) para reconocer los accidentes como ‘fallas del sistema’.
Adoptar un enfoque de sistemas, ya sea para examinar el fracaso o para respaldar el éxito, requiere métodos estructurados y sistemáticos para respaldar la aplicación práctica de constructos como la teoría de sistemas y el pensamiento de sistemas. Si bien los métodos de la perspectiva interaccionista pueden ser apropiados en algunas circunstancias, por ejemplo, al comparar opciones de diseño o evaluación predictiva de riesgos, no toman el sistema completo como unidad de análisis y consideran posibles interacciones no lineales.
Actualmente se utiliza un conjunto básico de métodos de sistemas (Hulme et al. 2019 ). Estos incluyen AcciMap (Svedung y Rasmussen 2002 ), el Modelo Teórico de Accidentes de Sistemas y Procesos (STAMP; Leveson 2004 ), el Análisis Cognitivo del Trabajo (CWA; Vicente 1999 ), el Análisis de Eventos del Trabajo Sistémico en Equipo (EAST; Walker et al. 2006 ), el Sistema de gestión de riesgos y análisis de peligros en red (Net-HARMS; Dallat, Salmon y Goode 2018 ) y el Método de resonancia de análisis funcional (FRAM; Hollnagel 2012 ). Estos métodos tienen en cuenta las propiedades clave de los sistemas complejos (ver Tabla 4 ). En comparación con los métodos de error humano ( Tabla 3), los métodos de sistemas ofrecen una perspectiva fundamentalmente distinta al tomar el sistema como unidad de análisis, en lugar de comenzar con un enfoque en el comportamiento humano. En consecuencia, los análisis producidos son útiles para identificar las condiciones o componentes que pueden interactuar para crear los tipos de comportamientos que otros métodos clasificarían como errores. Es importante destacar que esto incluye fallas pero también un rendimiento normal. En particular, el límite del sistema de interés siempre debe definirse para un propósito particular y desde una perspectiva particular, y esto puede ser más amplio (p. ej., social; Salmon et al. 2019 ) o más estrecho (p. ej., que comprende un equipo operativo y actividades asociadas). , contextos y herramientas; Stanton 2014). Las definiciones de los límites dependerán del nivel de detalle requerido y de un juicio sobre la fuerza de las influencias externas, pero son vitales para definir la ‘unidad de análisis’.
Tabla 4. Error humano definido en relación con las propiedades de los sistemas complejos.
Si bien los métodos de sistemas se han utilizado durante algún tiempo, sigue habiendo solicitudes de aplicaciones más frecuentes en una variedad de dominios (Hulme et al. 2019 ; Salmon et al. 2017 ), desde la aviación (p. ej., Stanton, Li y Harris 2019 ), salud (Carayon et al. 2014 ), hasta energía nuclear (p. ej., Alvarenga, Frutuoso e Melo y Fonseca 2014 ), para abordar el riesgo de terrorismo (Salmon, Carden y Stevens 2018). Están viendo un uso cada vez mayor en la práctica, ya que son más capaces de hacer frente a la complejidad de los sistemas sociotécnicos modernos. Por ejemplo, en el contexto de la gestión del tráfico aéreo, EUROCONTROL ha abogado por un alejamiento de las nociones simplistas del error humano y hacia el pensamiento sistémico y los conceptos y métodos asociados, como los citados en este documento (Shorrock et al. 2014 ). Se han desarrollado métodos como Net-HARMS (Dallat, Salmon y Goode 2018 ) con el propósito expreso de que sean utilizados tanto por profesionales como por investigadores.
Un beneficio significativo de la perspectiva de sistemas y los métodos de sistemas es abordar el problema de la culpa y las explicaciones simplistas de los accidentes, expandiendo el mensaje más allá de los profesionales de EHF y las organizaciones en las que trabajan. Como ejemplo, el Grupo de Trabajo de Cultura Justa de EUROCONTROL ha llevado al reconocimiento de la cultura justa en las regulaciones de la UE (Van Dam, Kovacova y Licu 2019 ) y ha brindado, durante 15 años, educación y capacitación sobre cultura justa y el poder judicial. Esto incluye talleres y conferencias anuales que reúnen a fiscales, controladores de tránsito aéreo, pilotos y especialistas en seguridad y EHF (Licu, Baumgartner y van Dam 2013) e incluye contenido en torno al pensamiento sistémico, así como solo a la cultura. Se proporciona orientación para interactuar con los medios, ayudar a educar a los periodistas sobre la cultura justa y, en última instancia, facilitar que los medios informen sobre incidentes de gestión del tráfico aéreo de manera equilibrada y sin prejuicios (EUROCONTROL 2008 ). Si bien se reconoce que el cambio cultural es un proceso lento, estas actividades tienen un enfoque a largo plazo con el objetivo de cambiar la mentalidad con el tiempo.
5. Resumen del cambio del desempeño humano a la ergonomía de los sistemas
El surgimiento de la perspectiva de sistemas en EHF sin duda ha impactado la popularidad y el uso de términos, teorías y métodos de error humano. La Figura 2 resume el desarrollo a lo largo del tiempo de las teorías, modelos y métodos que se relacionan con las cuatro perspectivas sobre el error humano. Esto destaca la proliferación del desarrollo de modelos y métodos en un período relativamente corto, particularmente desde finales de la década de 1970 hasta principios de la de 2000. Hollnagel ( 2009 )) atribuye este aumento en el desarrollo de métodos, en particular los métodos de error humano, a la fusión nuclear de Three Mile Island en 1979. Él identifica esto al comienzo de la segunda era de los factores humanos, donde el ser humano es visto como un lastre. Vale la pena destacar que muchos de los métodos de sistemas se desarrollaron en paralelo a los métodos de error humano, con algunos ejemplos notables que también provienen del sector nuclear (por ejemplo, CWA). Figura 2sugiere que EHF ha pasado las últimas tres décadas operando bajo múltiples perspectivas, en lugar de experimentar necesariamente un cambio de paradigma. Curiosamente, ha habido algunos ejemplos de integración entre perspectivas, como el método Net-HARMS extraído de SHERPA y la adopción de la taxonomía SRK por parte de CWA. Sin embargo, dado que la EHF ya no es una disciplina ‘nueva’, con solo esta revista celebrando recientemente 60 años de publicación, es oportuno discutir un camino más claro a seguir.
Figura 2. Resumen de la evolución de modelos ( cuadros blancos ), métodos ( óvalos blancos ) y teoría subyacente ( cuadros grises ) por perspectiva. Tenga en cuenta que la alineación con las perspectivas pretende ser aproximada y confusa en lugar de una clasificación estricta.
6. Errar dentro de un sistema es humano: una propuesta de camino a seguir
El concepto de error humano ha llegado a un punto crítico. Si bien continúa siendo utilizado por investigadores y profesionales de todo el mundo, cada vez hay más preguntas sobre su utilidad, validez y, en última instancia, su relevancia dado el cambio hacia la perspectiva de los sistemas. Sugerimos que existen tres campamentos dentro de EHF (Shorrock 2013): 1) un grupo que sigue usando el término con ‘buena intención’, argumentando que hay que seguir hablando de error para aprender de él; 2) un grupo que sigue usando el término por conveniencia (es decir, cuando se comunica en ámbitos que no son EHF) pero rechaza el concepto simplista y, en cambio, se centra en cuestiones organizativas o sistémicas más amplias; y 3) un grupo que ha abandonado el término, argumentando que el concepto carece de claridad y utilidad y su uso es perjudicial. Prevemos que este tercer grupo seguirá creciendo. Reconocemos que el concepto de error puede tener valor desde un punto de vista psicológico, al describir un comportamiento que se aparta de las expectativas e intenciones de un individuo. Sin embargo, también podría considerarse proactivamente en el diseño del sistema, los métodos HEI interaccionistas que se centran en todos los tipos de rendimiento, en lugar de solo errores o fallas, brinde a los analistas una visión más matizada. Sin embargo, es importante que hayamos visto cómo el concepto de error humano ha sido mal utilizado y abusado, particularmente asociado con una visión de error como causa, lo que lleva a consecuencias no deseadas que incluyen culpa y soluciones inapropiadas.
Se ofrece un conjunto de recomendaciones prácticas como una forma de alejar a EHF y a nuestros colegas dentro de disciplinas relacionadas, de un enfoque en el «error humano» individual, mecanicista y culpable y hacia la concepción de un sistema holístico de rendimiento del sistema. Estos se muestran en la Figura 3 .
Figura 3. Una propuesta de camino a seguir.
Es importante considerar las implicancias de los cambios propuestos en otras áreas de la disciplina de la seguridad. Pasar de un error humano a la perspectiva de los sistemas cambiaría fundamentalmente la forma en que vemos y medimos constructos como la conciencia de la situación (ver Stanton et al. 2017 ), la carga de trabajo (Salmon et al. 2017 ) y el trabajo en equipo, por ejemplo. También hay implicaciones significativas para áreas como el trabajo y el diseño del trabajo, donde podemos ver un resurgimiento del interés en los enfoques respaldados por la teoría de los sistemas sociotécnicos (Clegg 2000 ) junto con nuevos entendimientos de cómo las organizaciones pueden apoyar a los trabajadores, por ejemplo, promoviendo la agencia en respondiendo a la incertidumbre (Griffin y Grote 2020). Una nota final mientras terminamos nuestra discusión es que un principio clave del pensamiento sistémico se relaciona con mantener la conciencia de las diferentes visiones del mundo y perspectivas dentro de un sistema complejo. Donella Meadows (1941–2001) destacó una consideración vital para cualquier disciplina cuando sugirió que el punto de influencia más alto para el cambio de sistema es el poder de trascender paradigmas. No hay certeza en ninguna visión del mundo, y la flexibilidad en el pensamiento, en lugar de la rigidez, puede ser la base para un “empoderamiento radical” (Meadows 1999 , 18).
7. Conclusiones
El error humano ha ayudado a avanzar en nuestra comprensión del comportamiento humano y nos ha proporcionado un conjunto de métodos que continúan utilizándose hasta el día de hoy. Sigue siendo, sin embargo, una construcción esquiva. Su base científica y su uso en la práctica han sido cuestionados. Si bien su naturaleza intuitiva sin duda ha ayudado a EHF a ganar aceptación dentro de varias industrias, su uso generalizado dentro y más allá de la disciplina ha tenido consecuencias no deseadas. El reconocimiento de que los humanos solo operan como parte de sistemas complejos más amplios lleva a la conclusión inevitable de que debemos ir más allá de un enfoque en un error individual a la falla de los sistemas para comprender y optimizar sistemas completos. Existen teorías y métodos que adoptan una perspectiva de sistemas para respaldar este cambio, y el estado actual de la ciencia apunta a que su aceptación va en aumento.
Comentario: Los proceso de atención, se constituyen como una serie de procesos relacionados, algunos con el paciente y el equipo de salud, y otros que proveen logística o información, el core, que es la atención centrada en el usuario se sustenta en mejorar la experiencia del paciente, el respeto por su dignidad, su decisión compartida, su voluntad expresada luego de conocer las opciones, evitar interferencias que agreguen desperdicios por procesamiento, por trámites administrativos que no agregan valor, autorizaciones que son anodinas, que comprometen la accesibilidad de los pacientes componente de peso de la calidad, junto con el desempeño, la efectividad, la anticipación, lo proactivo, la continuidad, la orientación, la eficiencia y la equidad, que hacen a las dimensiones de la equidad, por ello quiero dejar este trabajo realizado por la King Fund organization, para la evaluación de los procesos administrativos de gestión de pacientes y la percepción de usuarios específicos del sistema de salud. Lo llamativo es un más de la mitad de los pacientes tiene alguna queja contra los sistemas administrativos, por lo tanto, es un aspecto de la mejora, fundamental y estratégico que impactará sobre la adhesión de los pacientes a las indicaciones de tratamiento y medidas de apoyo.
Asuntos administrativos: el impacto de la administración del NHS en la atención al paciente
La atención del NHS se basa en los procesos de administración (admin). Estos procesos aseguran que los pacientes, el personal, el equipo y la información estén en el lugar correcto en el momento correcto.
Los pacientes, los cuidadores y el personal experimentan procesos administrativos del NHS, incluidas llamadas telefónicas, cartas, sistemas de reserva y otras comunicaciones, que no satisfacen de manera uniforme las necesidades de todos los usuarios. Estas experiencias pueden suponer una pesada carga práctica para los pacientes y cuidadores, restringir su acceso a la atención, afectar negativamente a su bienestar y tener consecuencias en cadena para el personal.
Para las personas que viven con condiciones Crónicas de largo plazo, usan múltiples servicios de salud y atención o que tienen necesidades adicionales, por ejemplo, personas con una discapacidad, su experiencia como administrador puede desempeñar un papel fundamental en su experiencia general de atención.
La administración de alta calidad tiene el potencial de mejorar la experiencia del paciente, reducir las desigualdades, promover una mejor atención y contribuir a un mejor entorno de trabajo para el personal. A pesar de esto, rara vez ha sido un foco importante para los responsables de la formulación de políticas y los líderes.
Adoptar una perspectiva de usuario, buscar y aprovechar los comentarios de los pacientes y trabajar con los pacientes y el personal para co diseñar procesos será esencial para desarrollar una administración verdaderamente de alta calidad en el NHS.
Los sistemas de atención integrados y las asociaciones basadas en el lugar dentro de ellos tienen la tarea de promover una atención más fluida que satisfaga mejor las necesidades de las personas. Para hacer esto, deberán comprender el papel que desempeña el administrador en la atención, tanto desde la perspectiva del paciente como del personal.
Es difícil imaginar cómo funcionaria el NHS sin sus procesos de administración (admin). Estos procesos funcionan, a menudo entre detrás de la escena, no se ven, salvo cuando algo falla, sirven para garantizar que los pacientes, el personal, la información y el equipo estén en el momento y el lugar correctos para garantizar una atención médica de alta calidad. Aquí, nos enfocamos en un aspecto de la administración del NHS que a menudo se pasa por alto: la perspectiva del paciente. Exploramos lo que sucede cuando ve al administrador del NHS a través de los ojos de un paciente.
Más de un millón de personas utilizan los servicios del NHS todos los días. Muchos tendrán una o más condiciones a largo plazo y accederán a la atención de diferentes equipos, a menudo en diferentes lugares y, a veces, de diferentes organizaciones. Sin embargo, las experiencias de las personas al interactuar con los procesos administrativos del NHS no han recibido mucha atención. Si bien hay foros donde las personas comentan sobre la administración del NHS, la investigación sobre el tema se ha centrado más a menudo en cómo la administración puede afectar al personal, la eficiencia organizacional o la seguridad del paciente (p. ej., Schwarz et al 2019 ; Burnett et al 2011 ; Sanjay et al 2007).
La investigación emergente sugiere que los procesos administrativos juega un papel importante en la configuración de la experiencia de atención de los pacientes.
Dado que los pacientes acceden cada vez más a la atención médica digitalmente y con una mayor integración de la atención médica y social, este es un buen momento para explorar el papel que desempeña la administración en la calidad de la atención.
Aquí consideramos dos preguntas clave.
¿Qué dicen los pacientes y cuidadores sobre sus experiencias con la administración del NHS y su impacto en ellos?
¿Cómo se podrían usar los conocimientos de los pacientes y los usuarios del personal para mejorar la administración del NHS para los pacientes?
Nos basamos en el trabajo realizado por The King’s Fund; Healthwatch England, el champion independiente de usuarios de servicios de salud y atención; y National Voices, una coalición de organizaciones benéficas de salud y atención. (Para obtener detalles sobre cómo llevamos a cabo el trabajo de este proyecto, consulte el Apéndice A). National Voices ha publicado su análisis de las experiencias de administración de los pacientes . The King’s Fund también entrevistó a diez miembros del personal que trabajan en atención primaria y secundaria.
Diferentes categorías de administrador del NHS
El viaje de atención médica de un paciente implica una variedad de procesos administrativos y solo algunos de los cuales son visibles para el paciente. Hemos simplificado la administración del NHS en tres amplias categorías.
Administrador orientado al paciente : los contactos que tiene un paciente (en persona, por teléfono, por escrito o en línea) directamente con el NHS (principalmente fuera de los encuentros clínicos), por ejemplo, reservando una cita, accediendo a los resultados de las pruebas, solicitando una receta, buscando información sobre el cuidado
Administración procesos proveedores de compras y nóminas: los procesos y comunicaciones ‘detrás de escena’ que respaldan la prestación de atención (que generalmente ocurren sin contacto directo con el paciente). Por ejemplo, los procesos de recursos humanos, adquisiciones y nómina, así como las tareas rutinarias centradas en el paciente, como la asignación de camas, el equipamiento y la reserva de habitaciones.
Administrador de interfaz/límite : algunos sistemas, por ejemplo, los registros médicos electrónicos (EHR), se extienden a ambos lados de las funciones administrativas y de atención al paciente. El personal puede actualizar el registro de un paciente con los resultados de las pruebas sin ningún contacto directo con el paciente, pero también puede actualizar el registro con la información proporcionada por el paciente durante una cita clínica.
Esta lectura larga se enfoca en la administración de cara al paciente y, en algunos lugares, toca la administración de límites.
¿Qué dicen los pacientes, los cuidadores y el personal sobre la administración y su impacto en ellos?
Los pacientes y el personal del NHS se ven afectados por los procesos administrativos a diario, y los pacientes a menudo recurren al personal en busca de ayuda cuando tienen problemas para acceder y navegar por la atención. Analizamos las perspectivas de los pacientes y del personal sobre cómo es usar la administración del NHS, para comprender el impacto que puede tener y dónde hay oportunidades de mejora.
Pacientes y cuidadores
The King’s Fund, National Voices y Healthwatch England utilizaron varios enfoques para preguntar a las personas sobre sus experiencias con la administración del NHS ( consulte el Apéndice A).
The King’s Fund analizó una muestra de 310 historias de pacientes publicadas en Care Opinion , una plataforma de comentarios en línea.
Un grupo de enfoque con diez personas con discapacidad auditiva, facilitado por National Voices en colaboración con Sign Health, una organización benéfica que apoya a las personas con pérdida auditiva.
Entrevistas con nueve personas con experiencia en el uso de múltiples servicios de salud, por ejemplo, debido a una condición de salud a largo plazo, realizadas por National Voices.
Cinco Healthwatch locales en diferentes partes de Inglaterra involucraron a las personas utilizando múltiples métodos, incluidas conversaciones cara a cara, entrevistas telefónicas y herramientas de comentarios en línea.
Los datos de Care Opinion proporcionaron una instantánea de las experiencias de los pacientes del administrador del NHS. Los hallazgos clave fueron los siguientes.
Los procesos administrativos y/o el personal de recepción se mencionaron en el 42 por ciento de las historias. De ellos, hubo una mezcla de experiencias positivas y negativas (y algunas historias incluyen elementos tanto positivos como negativos); El 52 por ciento fueron negativos en general.
La mayoría de los comentarios sobre la administración estaban relacionados con los servicios de atención primaria e incluían informes de insatisfacción con los procesos de rutina, como la reserva de citas. Otros describieron experiencias en las que los procesos administrativos habían salido mal, por ejemplo, las solicitudes de recetas no se procesaban.
Los problemas administrativos dieron lugar a una combinación de consecuencias prácticas (p. ej., personas que dedican tiempo a volver a programar citas canceladas con poca antelación) e impactos emocionales, como estrés y frustración.
Posteriormente, nuestro trabajo con National Voices y Healthwatch England nos permitió explorar estas experiencias con mayor profundidad. Descubrimos que ese administrador puede tener un impacto en las personas de varias maneras.
La administración no solo es un factor importante en la forma en que las personas acceden a la atención, sino que también puede influir en cómo se sienten acerca de su atención e incluso afectar los resultados de la atención. Las personas describieron una variedad de experiencias, algunas positivas, muchas no.
A continuación, consideramos cinco categorías interrelacionadas que ilustran el rango de impacto que las experiencias de administración pueden tener en los pacientes: seguridad del paciente y resultados clínicos; tiempo y dinero; el bienestar emocional; confianza y satisfacción con el servicio de salud; y su comprensión y participación en el cuidado de la salud.
Seguridad del paciente y resultados clínicos
Un pequeño número de personas relató experiencias en las que sintieron que los errores administrativos o las deficiencias habían tenido consecuencias significativas para sus resultados de salud. Los ejemplos incluyen errores de medicación o no poder acceder a medicamentos recetados de una farmacia comunitaria debido a un problema de comunicación. La investigación destaca que los errores administrativos se han relacionado con la readmisión al hospital, errores de medicación y daños graves .
Nadie llamó para darme mis resultados. Entonces, asumo que si hay algo mal, me llamarán por teléfono. Un médico me llamó recientemente cuando tenía glóbulos blancos bajos, me hicieron otro análisis de sangre, volví al médico y me dijo que estaba preocupado y que lo averiguarían con un especialista. Eso fue hace cuatro semanas, no he oído nada.Paciente
Tiempo y dinero
Los pacientes describieron cómo la mala comunicación significó que desperdiciaron tiempo y energía navegando por los servicios de salud, y cómo a veces habían incurrido en pérdidas financieras (por viajes o por pérdida de salario) que podrían haber evitado si la comunicación hubiera sido mejor. Por ejemplo, escuchamos sobre personas que dedican tiempo a viajar a sus citas, a veces ausentarse del trabajo o cubrir sus compromisos de atención, solo para descubrir que las consultas se cancelaron o retrasaron con poca anticipación.
No se le dio ninguna razón [por la cita cancelada] y ya había tomado vacaciones anuales.familiar del paciente
Es bastante raro, según mi experiencia, que no se retrase o reprograme algo. Nunca obtienes ninguna razón para eso, es solo ‘Tuvimos que reprogramar su cita’.Paciente
Otras personas mencionaron que las llamadas telefónicas no fueron respondidas cuando llamaron para programar o reprogramar citas, y perdieron el tiempo tratando de comunicarse varias veces.
Las personas con necesidades adicionales experimentaron otros desafíos al navegar por el sistema y sintieron que su capacidad para acceder a la atención se vio obstaculizada cuando, por ejemplo, las fallas administrativas significaron que los intérpretes del lenguaje de señas británico no estaban disponibles y las consultas tuvieron que reorganizarse.
Tanto los pacientes como el personal reconocieron que algunos de estos problemas pueden deberse a la falta de capacidad y las presiones de la demanda que significaron que las clínicas se cancelaron con poca antelación, por ejemplo. Si bien algunos pacientes expresaron simpatía por el personal que trabaja bajo presión real, también sintieron que los problemas a veces se exacerbaban debido a procesos administrativos deficientes que afectaban su atención y les hacían perder el tiempo.
El bienestar emocional
Los pacientes revelaron el impacto emocional de los procesos administrativos que no son intuitivos de usar. Hablaron de sentirse frustrados, exasperados, estresados y ansiosos al tratar de obtener citas, en un momento en que ya podrían estar experimentando cierta angustia por problemas de salud. Algunos también expresaron temores de perder citas debido a comunicaciones de mala calidad, por ejemplo, recibir una cita para una fecha que ya había pasado y tener dificultades para asegurar una nueva cita.
Otros pacientes hablaron sobre cómo encontraron las comunicaciones del NHS inflexibles y, a menudo, unidireccionales, sin opciones para que las personas respondieran o para satisfacer necesidades específicas.
Después de decirle a la enfermera ya la recepcionista que no podía hacer citas antes de las 12:00, ya que no conduzco y tengo que tomar tres autobuses, conseguí una cita reprogramada para las 10:30. Solo pude comunicarme con el correo de voz en el número de la carta y finalmente me rendí.Paciente
Algunos pacientes sintieron que las advertencias automáticas sobre los costos de las citas perdidas carecían de empatía. Las personas con necesidades adicionales hablaron de sistemas administrativos que no satisfacían sus necesidades y dijeron que el estrés era una característica común de sus interacciones con el servicio de salud.
Como resultado de las fallas administrativas, algunos pacientes y cuidadores sintieron que tenían que asegurarse de que el sistema funcionara revisando los procesos administrativos ellos mismos. Por ejemplo, algunos pacientes sintieron que necesitaban preparar preguntas sobre pruebas anteriores o seguir el progreso de los siguientes pasos para la atención después de una consulta para estar seguros de que se llevaron a cabo las acciones.
Hay muchísimo esfuerzo, emocional y de tiempo, para asegurarme de que mi hija obtenga lo que necesita del NHS. Toma más tiempo y emoción de lo que necesitaría. Cuidador
La administración deficiente ha hecho que sea más difícil hacer frente a todas mis condiciones. Te causa mucha angustia que quizás no se vea. Que mi médico de cabecera no reciba mi carta sobre la medicación debería molestarme, pero es más que eso, me estresa mucho.Paciente
Confianza y satisfacción con el servicio de salud
La administración deficiente puede cambiar la forma en que las personas se sienten acerca de los servicios de salud, lo que tiene implicaciones en la forma en que interactúan con el NHS, lo que lleva a retrasos en el tratamiento y, potencialmente, tiene un impacto en los resultados de su salud. Algunos pacientes se sintieron insatisfechos con los procesos de obtener citas, asistir a citas y recibir comunicaciones de seguimiento, como cartas de alta. En algunos casos, estas experiencias socavaron la confianza de las personas en la calidad, incluida la calidad clínica, de los servicios.
De ahora en adelante solo iré a Urgencias. No me molestaré en nada más porque no responden. No me siento apoyado.Paciente
No confiaré en que los servicios del NHS hayan hecho algo útil. El daño ya está hecho, no creo que nada vaya a ser diferente.Paciente
Algunos pacientes respondieron a estos problemas cambiando la forma en que acceden a la atención, por ejemplo, buscando atención de otro médico de cabecera u hospital o de urgencias. Otros describieron cómo su exasperación significaba que habían llegado a un punto en el que optaron por depender de la atención de familiares o amigos o manejar su salud de forma independiente. Algunos creían que esto había contribuido al deterioro de su salud.
Acabo de decidir vivir con ello. Va a empeorar. Soy bastante cínico sobre todo esto. Estoy cansado. Tienes que pasar mucho tiempo justificando por qué necesitas lo que necesitas.Paciente
Comprensión y participación en el cuidado de la salud.
Las personas describieron que a veces se confundían con las comunicaciones, incluida la recepción de múltiples comunicaciones que se contradecían entre sí (por ejemplo, un hospital que enviaba una serie de cartas para programar y cancelar citas), lo que resultaba en citas perdidas. La investigación también ha sugerido que las cartas de derivación de mala calidad estaban vinculadas a pacientes que faltaban a las citas . Para aquellos con necesidades adicionales, estos desafíos se agravan porque las comunicaciones estándar pueden ser inaccesibles. Las personas se sentían más aisladas cuando no podían hablar con un profesional que pudiera brindarles aclaraciones.
Algunos pacientes reflejaron que las comunicaciones del NHS pueden crear un desequilibrio de poder entre los servicios y los pacientes porque a los pacientes les puede resultar difícil entender su atención. Algunas personas describieron sentirse impotentes.
Entonces, nuevamente, es solo poner a ese paciente al frente realmente, se supone que debemos sentirnos agradecidos de tener una cita. Y no estamos agradecidos, lo he pagado, lo has pagado tú, lo hemos pagado todos. Pero es como si tuviéramos que aceptar lo que nos dan y no quejarnos.Paciente
Para algunos, el efecto acumulativo de las comunicaciones que no satisfacen las necesidades de los pacientes contribuyó a que percibieran su experiencia general de atención como carente de dignidad y respeto.
Personal
King’s Fund entrevistó a diez miembros del personal del NHS que trabajan en servicios de atención primaria y secundaria en una variedad de funciones operativas y estratégicas. Sus reflexiones sobre sus experiencias de administración ilustran dos puntos generales. Primero, el personal reconoce que, a pesar de sus mejores esfuerzos, la administración a menudo está por debajo de la media y afecta negativamente la experiencia de atención de los pacientes. En segundo lugar, los pasos para mejorar la administración de los pacientes también podrían ayudar al personal a usar su tiempo de manera más productiva y mejorar su vida laboral.
Al igual que los pacientes, el personal quiere procesos administrativos sólidos que sean intuitivos para navegar, empoderar a los pacientes y trabajar para todos los pacientes. Reconocen esto como un aspecto clave de la atención de buena calidad. El personal destacó una serie de áreas que deben abordarse.
Información de contacto de los pacientes: algunos miembros del personal dijeron que a veces los proveedores no tienen información de contacto actualizada o no conocen los canales de comunicación preferidos de los pacientes, lo que dificulta los esfuerzos para comunicarse de manera efectiva.
Necesidad cambiante del paciente : el personal explicó que el administrador a menudo está diseñado para brindar información a los pacientes que se someten a un solo episodio de atención. También suelen surgir problemas para los pacientes que manejan una o más afecciones a largo plazo y/o que tienen necesidades adicionales, como una discapacidad. Los sistemas de información y comunicación a menudo no son adecuados para integrar múltiples hilos de información.
Coordinación entre servicios y organizaciones . Las personas que viven con una o más condiciones a largo plazo a menudo interactúan con múltiples servicios u organizaciones (a veces durante largos períodos de tiempo). El personal explicó que los servicios y las organizaciones a menudo no coordinan las comunicaciones, lo que significa que los pacientes pueden estar manejando una cantidad de comunicaciones diferentes de diferentes fuentes, lo que puede resultar confuso.
Inversión en administración . El personal comentó que puede ser difícil mejorar los sistemas administrativos porque gastar en ellos se enmarca como un costo, y la inversión se enfrenta a demandas contrapuestas de otras prioridades, por ejemplo, posibles nuevos servicios clínicos, equipos o propiedades ( particularmente en un momento en que los fondos de capital son limitados) . ). Algunos miembros del personal describieron a la administración como un área de ‘Cenicienta’ que merecía recibir más atención.
Prioridades entre los líderes senior . Los líderes sénior del NHS están gestionando una variedad de prioridades y el personal sintió que es más probable que las presiones operativas atraigan su atención y recursos. Esto puede dificultar la priorización de recursos para mejorar los procesos de administración.
¿Cómo podrían los servicios de salud mejorar la administración orientada al paciente?
Este marco de cinco partes para mejorar la administración del NHS ( consulte la Figura 1 a continuación) se basa en los conocimientos de los pacientes y el personal del NHS. El marco sugiere cómo la administración orientada al paciente podría mejorar las experiencias de atención de los pacientes y contribuir a la prestación de la mejor atención médica posible.
La amplitud de los problemas planteados por los pacientes y el personal apunta a la necesidad de pensar de manera integral sobre la administración y la contribución que hace a la atención de las personas. El marco no ofrece soluciones específicas para las deficiencias de administración. Pretende ser un punto de partida para abordar estos temas que se basa en las perspectivas de los usuarios. Su objetivo es apoyar a los servicios en el trabajo en asociación con los usuarios para codiseñar el trabajo de mejora local. A continuación, para cada dominio, observamos cómo los pacientes y el personal articularon los problemas, cómo sería la mejora y por qué cada dominio es importante.
Figura 1: Marco para mejorar la administración orientada al paciente
La administración está codiseñada por los pacientes y el personal
Problemas identificados por el personal y los pacientes
Está claro, tanto desde la perspectiva del paciente como del personal, que el administrador del NHS a menudo no satisface las necesidades de los usuarios. Muchos factores contribuyen a esto, pero las experiencias y necesidades de los pacientes (y el personal) no se integran de manera consistente en el diseño de los procesos administrativos.
¿Cómo se podría hacer esto mejor?
El codiseño que involucra a los usuarios del servicio es clave para desarrollar mejores procesos de administración. El NHS puede utilizar el aprendizaje del sector de la industria de servicios (Nielsen 2020) para informar el trabajo para mejorar los servicios a través de la participación profunda de los usuarios de los servicios.
¿Por qué es importante?
Este cambio de perspectiva (asumir el punto de vista del usuario y codiseñar procesos y formas de trabajar) podría desencadenar un cambio real para los pacientes y el personal. Creemos que muchos de los cambios que se describen a continuación provienen de la adopción de la perspectiva del usuario y están respaldados por ella.
Administrador que promueve interacciones bidireccionales entre el servicio y los pacientes
Problemas identificados por los pacientes y el personal
Las comunicaciones del NHS a menudo son unidireccionales, usan solo un canal de comunicación (por ejemplo, cartas) y, a veces, son confusas, incorrectas o contradicen otra información que los pacientes han recibido.
Cuando los pacientes tienen preguntas o inquietudes, puede ser difícil hablar con un miembro del personal.
¿Cómo se podría hacer esto mejor?
Usar sistemas de administración que permitan que los servicios se comuniquen con los pacientes a través de diferentes canales (teléfono, correo electrónico, carta y posiblemente otros) según las preferencias de los usuarios. Los pacientes podrían entonces responder a las comunicaciones usando los mismos sistemas.
Garantizar que los pacientes puedan acceder a información y apoyo cuando tengan inquietudes sobre su vía de atención o una comunicación.
¿Por qué es importante?
Algunas experiencias negativas descritas por los pacientes surgieron, en parte, de la sensación de que las comunicaciones de los servicios del NHS se caracterizan por un enfoque único para todos, con los pacientes enmarcados como receptores pasivos de las comunicaciones. El desarrollo de capacidades para adaptar la comunicación a las necesidades de los usuarios y permitir flujos de información bidireccionales podría ayudar a los pacientes a sentirse más comprometidos y empoderados, y reducir el tiempo que los pacientes pasan tratando de averiguar sobre su atención.
Administrador que promueve la comprensión y la confianza.
Problemas identificados por los pacientes y el personal
Los pacientes a veces encuentran que las comunicaciones son difíciles de entender, o tienen preguntas debido al lenguaje técnico o porque las comunicaciones no les facilitan la comprensión de su vía de atención.
La falta de comunicación, por ejemplo, sobre lo que le sucedió a una referencia o sobre los resultados de las pruebas, puede hacer que los pacientes se sientan confundidos e inseguros sobre su atención.
¿Cómo se podría hacer esto mejor?
Garantizar que todas las comunicaciones sean accesibles y fáciles de entender, tanto en términos de simplicidad del lenguaje como de cómo se presenta la información.
Brindar información clara sobre el camino de atención que probablemente seguirán los pacientes, los próximos pasos que pueden esperar.
Reconocer comunicaciones, por ejemplo, mensajes de correo de voz, de pacientes y explicar cualquier acción o progreso resultante.
Problemas identificados por los pacientes y el personal
Para muchos pacientes, el acceso a la atención está íntimamente ligado a los procesos administrativos. Los procesos que no son intuitivos pueden ser barreras para acceder a la atención.
Las personas que tienen necesidades adicionales (p. ej., personas con discapacidad auditiva o visual, o con problemas de aprendizaje) pueden encontrar particularmente difícil comprender su atención porque las comunicaciones no son accesibles.
Algunas plataformas digitales que están destinadas a mejorar las experiencias de los pacientes no están diseñadas para usuarios con una variedad de necesidades y habilidades digitales. Esto puede ser una barrera adicional para acceder a la atención.
¿Cómo se podría hacer esto mejor?
Diseñar comunicaciones que sean inclusivas para personas con una variedad de preferencias y aquellas que tienen necesidades adicionales.
El Estándar de Información Accesible brinda orientación sobre cómo se debe transmitir la información a los pacientes con necesidades particulares. Cumplir con estas expectativas debe ser lo mínimo que se espera de una organización.
Administrador que busca comentarios de los usuarios y los usa para desarrollar
Problemas identificados por los pacientes y el personal
Algunos pacientes tienen malas experiencias con la administración del NHS, pero estas experiencias no se capturan ni se comunican de forma rutinaria al personal y a los líderes del servicio.
Algunas personas plantean problemas de manera proactiva a través de interacciones informales con el personal, presentando una queja u ofreciendo comentarios en plataformas como Care Opinion. Esta percepción tiene un valor real, pero las voces de muchos pacientes con experiencias relevantes no se escuchan o no están documentadas.
Asegurar que existan mecanismos de retroalimentación para invitar a los pacientes a reflexionar, incluidos aquellos sobre experiencias de aspectos no clínicos de la atención, como la administración. Usar la información generada como un indicador de reflexión para los servicios y los líderes sénior.
Explorar las experiencias del personal que interactúa con, o es responsable de, la administración y retroalimentar esto a los líderes senior. Apoyar al personal para que valore los comentarios y se comprometa con la mejora informada por las experiencias de los pacientes.
Diseñar mecanismos de retroalimentación para ofrecer información sobre cómo varía la experiencia entre los usuarios de los servicios, con un enfoque en la comprensión de los grupos que usan los servicios de salud con regularidad y tienen necesidades adicionales.
¿Por qué es importante?
El alcance para movilizar el cambio actualmente se ve obstaculizado, en parte, por la comprensión limitada de las experiencias de administración de los pacientes y el personal, incluida la forma en que la experiencia varía entre los grupos. La recopilación constante de información significativa podría ayudar a comprender mejor la calidad de las experiencias de los pacientes y justificar la mejora. Además, invitar a recibir comentarios puede contribuir a empoderar a los pacientes y al personal y aprovechar sus ideas para mejorar .
Reflexiones finales
La información del paciente y del personal que se comparte aquí comienza a descubrir el papel importante que desempeña el proceso administrativo en la definición de la experiencia de las personas con la atención del NHS. Hay más preguntas por explorar. Pero basándonos en la información reunida para este proyecto, sacamos tres conclusiones.
La administración de alta calidad tiene el potencial de mejorar la experiencia del paciente, promover una mejor atención y contribuir a un mejor entorno de trabajo para el personal . Adoptar una perspectiva de usuario y codiseñar formas de trabajar con pacientes y personal podría ayudar a lograr esto. Esperamos que nuestro marco proporcione un punto de partida para este trabajo que las organizaciones puedan adaptar para el trabajo de desarrollo local. Vale la pena enfatizar la contribución que hace la administración a la atención de alta calidad dadas las muchas otras prioridades que compiten por la atención y los recursos de los líderes , y la tendencia, en algunos sectores, a equiparar de manera imprecisa los gastos no médicos con la burocracia .
Mejorar la administración podría promover la inclusión y contribuir a abordar las desigualdades. Los impactos de una administración deficiente no se distribuyen uniformemente: es probable que una carga más pesada recaiga sobre ciertos grupos, por ejemplo, personas que tienen problemas de salud a largo plazo, usan varios servicios o tienen necesidades adicionales. La evidencia de otros entornos destaca el impacto desigual que las barreras administrativas pueden tener en la forma en que las personas usan los servicios públicos . Dado esto, la atención verdaderamente integrada requerirá sistemas de administración que los pacientes, especialmente aquellos que usan múltiples servicios, encuentren fáciles de usar y navegar. A medida que los sistemas de atención integrados incorporan una atención más coordinada, tienen un papel que desempeñar, trabajando junto con las organizaciones de proveedores, para impulsar mejoras en la administración.
Dado el impacto que puede tener, existe un caso para una mejor comprensión de cómo los pacientes y el personal experimentan la administración del NHS. Nuestro trabajo ofrece una ventana a las experiencias de las personas, pero la falta de recopilación de datos de rutina, con algunas excepciones como la Encuesta de experiencia de pacientes con cáncer, deja preguntas abiertas sobre la escala de las deficiencias administrativas, las variaciones entre los grupos de pacientes y cómo la experiencia está cambiando con el tiempo. Los sistemas de atención integrados y las asociaciones de múltiples agencias que trabajan en el lugar están bien situados para incorporar mecanismos de recopilación de información a nivel local, y los organismos independientes tienen la oportunidad de mejorar la comprensión de cómo la administración está afectando la atención de las personas, recurriendo a una variedad de herramientas de información. incluyendo encuestas nacionales de pacientes.
La dirección estratégica de la salud y la atención en Inglaterra planteará nuevas preguntas sobre cómo deben funcionar los sistemas de administración.
Abordar el legado de Covid-19 en la salud de la población, aprovechar las oportunidades de la tecnología para respaldar nuevos modelos de atención e integrar más completamente los servicios de salud y atención otorgará una gran importancia a los sistemas de administración robustos y fáciles de usar.
La administración del NHS de alta calidad no será suficiente por sí sola para enfrentar estos desafíos, pero será un componente necesario.
El nuevo coronavirus (COVID-19) apareció en Wuhan, China, en 2019, y posteriormente, fue declarado una emergencia global por la Organización Mundial de la Salud [1]. La emergencia de COVID-19 trajo desafíos globales en la industria [2–4], la educación [5], la política [6], la economía [2, 6, 7], el turismo [7] y los servicios de salud [5–12]. Al ser una de las saludes más importantes [6, 13], tener un papel fundamental en la respuesta a la COVID-19 [9] debido a la pandemia de COVID-19 se considera la primera crisis sanitaria mundial en la era digital [10]. El COVID-19 produce altas tasas de contagio en la población y el personal médico [2, 10, 12, 14, 15], alta tasa de propagación [16-18] y alto número de muertes [14] incluido el personal médico [7, 12].
El virus COVID-19 tiene un largo período de incubación que incluso las personas pueden infectarse sin mostrar síntomas [2]. Por lo tanto, se han aplicado restricciones mundiales, como limitaciones de vuelo [16, 19], reducir o suspender el transporte público [20], distanciamiento social [7], cancelación de eventos masivos [3], regulaciones sobre operación comercial [3] y bloqueo parcial o estricto [10, 15, 16, 19, 21–23]. Por todo lo anterior, la pandemia ha afectado el estilo de vida de las personas [7] y los procedimientos médicos rutinarios [11]. Asimismo, existe la necesidad de ofrecer servicios remotos debido a la población más susceptible, que padece enfermedades como hipertensión, cáncer y diabetes. Además, se considera que si falta infraestructura avanzada en tiempos de pandemia, la pandemia no será controlada y en el futuro, otro tipo de virus podría afectar a la sociedad [12]. Así, las tendencias tecnológicas se consideran clave para mejorar la asistencia sanitaria [24] y hacer frente a la pandemia de COVID-19 [7]. De ahí que hayan surgido diversas propuestas en la literatura para luchar contra el COVID-19, entre ellas la Industria 4.0 [4, 25] que es una tendencia de automatización e intercambio de información que evoluciona continuamente en diversos sectores de la población e industrias, permitiendo el desarrollo de procesos y servicios más flexibles y eficientes.
Motivado por el éxito de la revolución 4.0, se desarrolla Salud 4.0, que se centra en el paciente [24] e integra servicios como cloud/fog computing [26–30], big data [15, 26, 28], red 5G [7, 23, 27, 31, 32], red 6G [12], blockchain [33] e Internet de las cosas (IoT) [26–29, 31, 34 ]. Además, se pronosticó que 2021 sería el año que se centra en los sistemas de salud [33]. Por lo tanto, la contribución de esta revisión es analizar el potencial y los desafíos de las aplicaciones de salud 4.0 de vanguardia, incluido el diagnóstico asistido, los entornos aumentados, los pronósticos de COVID-19, la robótica médica y los servicios clínicos remotos para enfrentar la pandemia de COVID-19.
Para la búsqueda de trabajos relevantes se utilizaron las siguientes palabras clave: «COVID-19», «health 4.0», «health care», «pandemic», «artificial intelligence», «machine learning», «deep learning» e «internet of things». En los estudios previamente localizados, se realizó una búsqueda manual en los artículos científicos localizados, de la siguiente manera: se analizaron los trabajos citados que eran similares por título y luego se hizo lo mismo con aquellos similares. Estudios a partir de bases de datos científicas1 y un motor de búsqueda2, se incluyeron: artículos, reseñas y puntos de vista.
El resto de este trabajo se organiza de la siguiente manera, la Sección 2 revisa las tareas médicas en Salud 4.0 que se pueden realizar, incluido el diagnóstico asistido (subsección 2.1), los entornos aumentados (subsección 2.2), las previsiones de COVID-19 (subsección 2.3), la robótica médica (subsección 2.4) y los servicios clínicos remotos (subsección 2.5). La Sección 3 expone los alcances de la Salud 4.0, mientras que en la Sección 4 se presentan los desafíos. Además, la sección 5 incluye conclusiones y trabajos futuros.
Tareas médicas
Diagnóstico asistido
El diagnóstico asistido ayuda a recibir el tratamiento adecuado a tiempo [35]. La investigación ha informado que la inteligencia artificial (IA) y el aprendizaje automático ayudan a desarrollar sistemas de apoyo a la toma de decisiones. Incluso pueden superar el hallazgo de un diagnóstico correcto en comparación con los médicos [36] principalmente en patologías utilizando imágenes [35]. El diagnóstico automático se puede realizar integrando algoritmos de IA con aplicaciones en computación en la nube / niebla [36] que permiten la portabilidad y el análisis de datos desde cualquier lugar [29, 36] a través de diferentes dispositivos IoT [30]. Además, el diagnóstico automático es especialmente útil cuando hay una falta de médicos especializados [37].
Figura 1 representa la canalización general de Salud 4.0 para el diagnóstico asistido, que implica la adquisición de datos, la interconexión de red, el procesamiento de datos y el diagnóstico asistido. Los datos de los pacientes provienen de diferentes fuentes, incluidos implantes inteligentes, sensores e imágenes biomédicas. Los datos se recopilan a través de diferentes redes informáticas. El procesamiento heterogéneo de datos se realiza mediante técnicas de preprocesamiento, selección y extracción de características. Finalmente, el diagnóstico asistido se lleva a cabo mediante técnicas de IA principalmente machine learning y deep learning.
Entornos aumentados
La cuarentena estricta dificulta el aprendizaje, por lo que se pueden utilizar la Realidad Aumentada (AR) y la Realidad Virtual (VR) [25]. AR y VR son formas novedosas de explorar afecciones médicas [38] y mejorar el diagnóstico visual [39]. La realidad virtual puede ayudar a explorar el virus COVID-19 de una manera tridimensional [23]. Además, se puede aplicar para la enseñanza (es decir, anatomía, dermatología [39], enfermería [38] fisioterapia [40]), planificación de procedimientos (es decir, dermatología [39], maxilofacial [41]), seguimiento de lesiones (es decir, dermatología [39]), simulación y capacitación en procedimientos [38], como la capacitación de médicos en ortopedia y cirugía [34, 41 ]. Balian et al. analizaron la viabilidad de un sistema de entrenamiento que utiliza AR para simular la reanimación cardiopulmonar, donde el 98% de los participantes del estudio reconocieron que la visualización ayuda al entrenamiento [42]. Del mismo modo, Kelly et al. concluyeron que las estrategias de razonamiento clínico pueden hacerse explícitas cuando se usa AR [40]. Además, la visión por computadora aplicada en AR y VR permite obtener, procesar, analizar y comprender imágenes y videos [43], por lo tanto, las computadoras pueden comprender el contexto del mundo físico. Además, la aplicación de la IA en AR permite el reconocimiento automático de objetos [43]. Por lo tanto, la IA y la visión por computadora se pueden aplicar para mejorar la experiencia de los proveedores de atención médica y ofrecer entornos personalizados para la enseñanza clínica. Salud 4.0 permite conectar los mundos físico y virtual [44].
Previsiones de COVID-19
Los modelos de previsión proporcionan información cuantitativa valiosa y ayudan a tomar decisiones a corto plazo [45]. Por lo tanto, los modelos de pronóstico pueden ayudar a prevenir la propagación de COVID-19 y asignar suministros médicos [45]. El aprendizaje automático y el aprendizaje profundo pueden predecir brotes de COVID-19 [25, 46, 47] y descubrir trayectorias de enfermedades en zonas geográficas [48]. Además, el aprendizaje automático y el aprendizaje profundo pueden predecir casos de COVID-19 [3, 23, 49–52], muertes [50] y casos recuperados [50]. Además, las previsiones han permitido la generación de mapas y cuadros de mando de propagación de la COVID-19 [17]. Además, utilizando sistemas móviles de información geográfica (SIG), se puede realizar un seguimiento de COVID-19 casi en tiempo real [17]. Del mismo modo, el procesamiento del lenguaje natural (PNL) ayuda a llevar a cabo traducciones de paneles de mapeo a varios idiomas [17]. En la Fig. Figura 2,2, presentamos un ejemplo ilustrativo de un diseño de pronósticos de COVID-19
Ejemplo de diseño de pronóstico de COVID-19
Robótica médica
Los robots son agentes basados en máquinas que interactúan con el entorno y pueden adaptarse para realizar ciertas tareas [14]. Los robots médicos pueden ayudar en diversas tareas, como el tratamiento de pacientes [34], la cirugía y el reconocimiento de actividades quirúrgicas. La cirugía asistida por robot proporciona ventajas como la invasividad mínima [53], una mejor visión y un mejor control del instrumento [54–56], lo que permite su aplicación en condiciones ambientales difíciles [34] y facilita cirugías complejas [57].
Recientemente, se ha observado un aumento en la cirugía asistida por robot, mostrando aplicaciones como prostatectomía radical [55], radiocirugía de cáncer gastrointestinal [57], resección hepática [54], artroplastia de rodilla [56], ginecología laparoscópica [53], bariátrica [58] y cirugía endoscópica de la base del cráneo [59]. Los estudios han demostrado que la recuperación después de llevar a cabo la prostatectomía radical asistida por robot ocurre en un tiempo más corto [55]. Además, los tratamientos se pueden llevar a cabo a través de la telecirugía mediante la incorporación de IA, Internet táctil 5G y computación en la niebla [32]. Igualmente bien, el aprendizaje profundo se puede implementar en cirugía robótica para resolver la cinemática inversa del robot espacial similar a una serpiente [57], mostrando un buen rendimiento en precisión y velocidad. Además, se ha aplicado el aprendizaje profundo para llevar a cabo el reconocimiento de actividades quirúrgicas (como la detección de herramientas y personas) en videos capturados en el quirófano [60, 61], por lo que mejora las capacidades de control del cirujano [61].
Servicios clínicos remotos
Los avances en telecomunicaciones como la red 5G [7, 26, 32], la red 6G [12], Internet táctil [32]), los dispositivos portátiles [26, 31] y las redes de sensores [62] hacen que la telemedicina de servicios clínicos remotos sea factible y útil incluso en lugares remotos [32]. Los servicios de telemedicina ayudan a disminuir el riesgo de contagio de COVID-19 [7, 10, 25, 63] al reducir el número de personas que necesitan asistir al hospital [12, 64].
La telemedicina tiene éxito tanto en emergencias como en chequeos de rutina [10]. La telemedicina tiene aplicaciones en teleodontología [11], teleasistencia [6, 12], monitorización rutinaria [6, 65], consultas [2, 7, 66], recetas electrónicas [10], chatbots [67], robots táctiles/hápticos [12], telecirugía [12], drones médicos [2, 17], teleenfermería [7], manejo del estrés [68] y síntomas comprobación [2, 64]. Figura 3 ilustra la tubería general de Salud 4.0 para monitorear sistemas que interconectan a los pacientes con proveedores de atención médica y hospitales para el monitoreo continuo de pacientes y la generación de alarmas cuando tienen una condición crítica. Los sensores médicos pueden ayudar a obtener información [34], como la temperatura de los pacientes [2]. Además, los implantes inteligentes permiten la captura en tiempo real de datos físicos dentro del cuerpo [34, 69] teniendo beneficios terapéuticos y diagnósticos en la atención postoperatoria y la rehabilitación [70]. Los implantes inteligentes se han utilizado en implantes de corpectomía [70], evaluación postoperatoria en la columna vertebral [71], cirugía ortopédica [70], reemplazo articular [69], tratamiento de fracturas [69] y fijación de la columna vertebral [69].
Flujo de trabajo de Health 4.0 para sistemas de supervisión
Alcances de la Salud 4.0
En este apartado, informamos de las tareas de Salud 4.0 para hacer frente a la emergencia del COVID-19 (Tabla (Tabla 1).1). Figura 4 ilustra las partes interesadas, las tareas y las tecnologías en Salud 4.0. La integración de la IA, la visión artificial y otras tecnologías ofrecen grandes ventajas en diferentes tareas de Salud 4.0, como llevar a cabo la atención sanitaria de una manera más preventiva, predictiva y personalizada [24, 27, 72, 73]. Además, Salud 4.0 conecta a los pacientes con profesionales de la salud incluso en lugares remotos [32], mejora la colaboración utilizando tecnología [24, 74], mejora la atención médica [75], reduce el riesgo de infección [10, 25] y facilita las estrategias pandémicas [15]. Además, los avances en IA, algoritmos, redes 5G [7], redes 6G [12], computación en la nube, IoT, SIG móvil [17] y potencia computacional permiten desarrollar sistemas casi en tiempo real [17, 76], monitoreo remoto de la salud [12, 77] y medición de parámetros clínicos (es decir, temperatura, frecuencia cardíaca, niveles de azúcar, parámetros sanguíneos) [2, 12, 78 ]. Además, se espera que en 2030 IoT sea reemplazado por el Internet de Todo y que la tecnología 6G ofrezca una cobertura global con gran importancia en el mercado de la salud [12]. La cobertura de la red 6G será en espacio-aire-agua, por lo tanto, tendrá un papel importante en Salud 4.0 [12].
Cuadro 1
Tareas de Salud 4.0 para afrontar la pandemia del COVID-19
Tareas de Salud 4.0
Problema de la pandemia de COVID-19
Solución potencial
IA y tecnologías
Diagnóstico asistido
Falta de médicos especializados en lugares remotos Cuarentena parcial o estricta
IA [15, 22, 23, 25, 35, 79] Computación en la nube [30] Aprendizaje profundo [30, 36, 37, 79–83] Computación en la niebla [29, 30] Aprendizaje automático [15, 36, 84] Sensores [12]
Entornos aumentados
Restricciones de contacto Cuarentena parcial o estricta Clases en línea
Seguimiento de lesiones Planificación del procedimiento [41] Simulation Telesurgery [12] Training [23, 34, 41]
AR y VR [23, 34] Blockchain [33] Computer Vision Haptic [12] Holographic communication [12] Kinect sensors Mobile computing Vibrotactile gloves
Forecasts of COVID-19
Generation of industry, school, and government reopening strategies COVID-19 case tracking
Predict the outbreak [25, 46] Risk prediction [2, 15]
AI [2, 15, 25] Deep learning [47] Drone-borne cameras [15] Mobile GIS [17] Machine learning [17] NLP [17] Portable digital recorders [15] Smartphone applications [15]
Robótica médica
Restricciones de contacto
Ambulance robots [85] Assisted surgery [57] Nursing [85] Receptionist robots [85] Tratamiento robótico [34] Esterilización en superficies [2, 85] Telecirugía [26, 32] Seguimiento de las actividades quirúrgicas [60, 61]
5G-tactile internet [32] AI [32] Deep learning [14, 57, 61] Impresión láser Robótica de aprendizaje automático [32, 34]
Servicios clínicos remotos
Cuarentena parcial o estricta Falta de médico especializado en lugares remotos
Estudios de síntomas de COVID-19 [48] Recetas electrónicas [10] Recopilar información [86] Monitoreo de la salud [26, 28, 31] Comunicación holográfica [12] Drones médicos [2] Evaluación postoperatoria [71] Rehabilitación [26] Cirugía remota [12] Teledentría [11] Paquetes de transferencia [86] Plataforma de atención virtual [15]
Redes 5G [7, 31] y 6G [12] IA [12] Big data [31, 87] Bluetooth [31]] Computación en la nube [28] Aprendizaje profundo [12, 62] Drones Computación en la niebla [28, 29] HTTP de alto rendimiento [31]] Aprendizaje automático [31] Aplicaciones móviles [2] PNL [67]] Redes de sensores [62] Termómetros inteligentes [2] Aplicaciones para smartphones [11, 28] Internet táctil [12] Dispositivos portátiles [2, 12, 26, 28, 31, 36, 48] Puntos de acceso Wi-Fi [15] Telemetría inalámbrica
Stakeholders, tasks, and technologies in Health 4.0
Debido a las recomendaciones de que los pacientes con síntomas leves de COVID-19 sean manejados en casa [2], las aplicaciones de Salud 4.0 son una gran alternativa para ofrecer servicios remotos. De ahí que la salud 4.0 haya mostrado el potencial para llevar a cabo diagnósticos asistidos, entornos aumentados, previsiones de COVID-19, robótica médica y servicios clínicos remotos. Además, se ha demostrado una importante colaboración multinacional entre expertos médicos, líderes epidemiológicos y científicos de datos [48]. La colaboración entre los líderes de la salud, el gobierno y la industria tiene un papel importante en el modelado de los pronósticos de COVID-19 [45]. Del mismo modo, la toma de decisiones oportuna ayuda a reducir la velocidad de transmisión [45]. Los resultados obtenidos por los modelos de predicción de COVID-19 no solo se pueden aplicar en el área de la salud, sino también en el gobierno y la industria, para implementar una respuesta rápida a los brotes [45] y generar estrategias de reapertura.
Una de las áreas interesantes del diagnóstico asistido es la detección de COVID-19 donde se analizan principalmente los síntomas respiratorios, los estudios de anticuerpos y las imágenes biomédicas [83]. Además, han surgido estudios basados en el análisis de la tos para detectar COVID-19 [22]. Los enfoques de aprendizaje automático y aprendizaje profundo han demostrado aplicaciones en el diagnóstico de virus [79], sin extracción manual de características [83]. Mesa Cuadro22 revisa las técnicas de IA aplicadas en el diagnóstico de COVID-19 y las imágenes biomédicas analizadas, incluyendo TC y rayos X. Asimismo, los resultados obtenidos se muestran en términos de precisión (ACC), área bajo la curva (AUC), sensibilidad (RE), especificidad (SP) y precisión (PRE).
Cuadro 2
Técnicas de IA aplicadas en el diagnóstico de COVID-19
En el ámbito de la Salud 4.0 se ha demostrado el potencial para hacer frente al COVID-19. Sin embargo, existen desafíos éticos [66], morales [10], técnicos, de privacidad [15], de seguridad [12, 23] y legales. Además, para aumentar la aceptación de la Salud 4.0, es necesario adaptarse a la población, teniendo en cuenta la cultura y los antecedentes religiosos de los usuarios [10]. En el campo del diagnóstico automático de COVID-19, es necesario poner a disposición del público más conjuntos de datos de imágenes para la detección, ya que tener un mayor número de muestras ayudará a desarrollar sistemas más robustos [80]. En la tabla Tabla 3,3, mostramos los retos que existen en las tareas de Salud 4.0.
Cuadro 3
Tareas y desafíos de Salud 4.0
Tareas de Salud 4.0
Desafíos/necesidades
Diagnóstico asistido
Los estudios basados en IA, incluido el aprendizaje automático y el aprendizaje profundo, requieren una gran cantidad de datos para obtener un rendimiento confiable [15, 37, 88]. Es posible que la IA no detecte pacientes asintomáticos [23]. Las imágenes biomédicas para COVID-19 son caras para quienes viven en países de bajo desarrollo.
Entornos aumentados
AR y VR todavía están en desarrollo [12]. Además, necesitan una gran cantidad de datos para proporcionar una excelente calidad de servicio [12]. Alto costo de las aplicaciones de realidad virtual [23]. Falta de expertos para configurar la rv virtual [23].
Previsiones de COVID-19
Es necesario trabajar en conjuntos de datos disponibles públicamente, para que los estudios puedan ser validados por diferentes investigadores.
Robótica médica
Los robots necesitan alimentación de CA/CC para garantizar la disponibilidad [85].
Servicios clínicos remotos
Los drones están expuestos a la piratería [23]. La falta de comunicación directa puede llevar a la desconfianza en el paciente [11]. Necesitan una alta velocidad de comunicación en red [12]. La telecirugía sigue siendo un campo emergente [12].
Todas las tareas
Las redes 5G y 6G podrían ser costosas en los países en desarrollo [23]. Algoritmos de IA que utilizan grandes cantidades de recursos computacionales [12]. Las redes de comunicación requieren un alto nivel de seguridad porque la posible falla impactará en la vida del paciente [12]. Es necesario redefinir el modelo de negocio en los hospitales [12]. Los datos de salud son datos personales sensibles y requieren medidas de privacidad [66].
Conclusiones y orientaciones futuras
La pandemia de COVID-19 promueve la disrupción en diferentes sectores de la población. Esta investigación analizó las aplicaciones de Salud 4.0 que involucran IA y tecnologías de comunicación para ser aplicadas en diagnóstico asistido, entornos aumentados, pronósticos de COVID-19, robótica médica y servicios clínicos remotos. A través del uso de tecnologías como las redes 5G / 6G, la computación en la nube / niebla e Internet táctil, se pueden llevar a cabo varias tareas complicadas, como la recopilación de datos médicos casi en tiempo real, las tareas de simulación y la interconectividad con varios sectores de la medicina. Surgen estudios basados en robótica y realidad aumentada para mejorar la educación sanitaria de una forma menos invasiva y más interactiva. Además, Salud 4.0 permitirá mejorar los tratamientos de diagnóstico y rehabilitación. Por el contrario, todavía queda un largo camino por recorrer en Salud 4.0, se deben abordar áreas de oportunidad, para que la Salud 4.0 pueda aplicarse no solo en la pandemia de COVID-19, sino también en futuros virus globales y desastres naturales. El trabajo de investigación futuro debe centrarse en:
Realizar estudios de COVID-19 mediante análisis de tos, para poder realizar estudios en países que carecen de equipos médicos como escáneres de TC para realizar estudios de virus.
Desarrollar técnicas de IA que utilicen menos recursos computacionales.
Incluir diferentes sectores, como los sectores médico, empresarial, legal y político, para desarrollar servicios de salud altamente confiables utilizando IA.
Implementar aplicaciones móviles más personalizadas según el paciente.
Poner a disposición del público más conjuntos de datos sobre COVID-19.
Optimizar los componentes electrónicos de los sensores inteligentes. Además, busque formas de reducir costos, para que su uso sea factible en países semidesarrollados.
Realizar estudios de telecirugía utilizando IA.
Promover los servicios de Salud 4.0 en los países en desarrollo.
Dr. Carlos Alberto Díaz. Profesor Titular Universidad ISALUD.
Implementar una iniciativa de cambio, propone e impone múltiples desafíos y la generación de un proyecto común en el cual ganen la mayoría de los actores institucionales, estas transformaciones son complejas, que imponen sacrificios, compromisos sinceros, modificaciones de los modelos asistenciales, inversiones, adquisición de nuevas competencias, implican cambios de paradigmas, como así también ponen en superficie comportamientos oportunísticos, la falta de una visión común, de un propósito compartido, surgiendo restricciones de inversión, de decisión política, por desconocimiento y porque implica una estrategia de largo plazo, que superan las urgencias del racionamiento financiero, genera la aparición de respuestas inesperadas por la afectación de los intereses.
Este cambio viene motorizado por la transiciones demográficas, epidemiológicas, económicas, sociales, políticas y fundamentalmente tecnológicas, del manejo inteligente de la información en la era del conocimiento. Recalco sobre este último aspecto porque las innovaciones tecnológicas provocan aumento del costo y del gasto, son casi el 50% de toda la inflación en salud.
Además, nuestro sistema de cobertura no tiene medido la carga sanitaria que implican todas estas decisiones de cobertura, que tienen una fuerte raigambre en cuanto a que en argentina la atención de la salud debe ser un derecho asegurado, pero se han superados fronteras de eficiencia y evidencia, para autorizar el uso de tecnologías que deberían tener restricciones, indicaciones más precisas.
Cuando se investiga y se estudia la cobertura y provisión de diferentes tecnologías es llamativo como surge o se incurre en la judicialización, en el mecanismo del amparo. No siempre esto responde a una indicación que mejore la costo efectividad del insumo utilizado.
El cambio, la transformación requiere que se transite por la ciencia de la implementación, movilización de voluntades, creación de los ámbitos para el desarrollo de las tareas, identificación de los procesos, los procedimientos y los circuitos y poder una vez realizado el diagnóstico adecuado es poder modificar algunas acciones, que resultan desperdicios, en tiempo, insumos, movimientos innecesarios, stock excesivos, falta de escucha a quienes ejecutan el proceso, mala calidad, procesamientos innecesarios. Formación de equipos multidisciplinarios, que se adapten a los cambios, tengan flexibilidad y una llamativa capacidad para reinventarse, para realizar procesos diferentes.
Tener claro que esta gestión Lean tiene propósitos, que señalan el verdadero norte de la organización. El valor fundamental de las personas o los equipos y el profesionalismo. Pensar en procesos que pueden ser mejorados en todo el tiempo y con ciclos continuos, con un enfoque de largo plazo, para reinvertir y asumir el compromiso con la calidad, identificar los flujos continuos donde todo tiene que estar bien relacionado en una cadena de valor de medios orientados a los propósitos de la medicina basada en el valor. Con una logística de flujo tenso, que siempre tenga bajo el radar a los pacientes, para darles un modelo de longitudinalidad y continuo, nivelar las cargas de trabajo, solucionar los problemas, tratar de estandarizar las tareas que se puedan hacer, desarrollar la secuencia de actividades de gestión clínica a prueba de errores, desarrollando con presencia la gestión visual, utilizando tecnología fiable y absolutamente probada. Con procesos de mantenimiento que eviten las paradas de los equipos y la interrupción de un proceso de diagnóstico y tratamiento. Desarrollar a las personas y los equipos. Respetar la red extendida de socios estratégicos y proveedores. No solo hay que ver las cosas con sus propios ojos, sino comprender al verlo el problema. Tomar decisiones escuchando y con el mayor consenso posible. Identificar los problemas y los desperdicios.
Los análogos de insulina de acción prolongada se desarrollaron específicamente para reducir el riesgo de hipoglucemia en pacientes con diabetes que requieren insulina, especialmente hipoglucemia nocturna, así como para mejorar la comodidad del paciente mediante la reducción del número de inyecciones, mejorando así las tasas de adherencia, lo cual es una preocupación continua con la insulina. 7 , 9 , 27 – 30 ].
Sin embargo, todavía existe controversia con respecto al nivel de beneficio observado con los análogos de insulina de acción prolongada frente a la NPH y otras insulinas [ 31 – 33].
Una revisión sistemática reciente y un metanálisis en red sugieren que los análogos de insulina de acción prolongada fueron superiores a las insulinas de acción intermedia en áreas clave que incluyen hipoglucemia grave, grave y nocturna [ 34 ].
Habiendo dicho esto, los beneficios percibidos por el paciente de los análogos de insulina de acción prolongada se reflejan potencialmente en su uso que ahora suele exceder el de las insulinas humanas en países de ingresos medianos altos y altos, además de crecer en países de ingresos medianos bajos, incluido Bangladesh [ 35 – 37 ].
Además, el gasto mundial en insulina glargina ya era de 3880 millones de dólares estadounidenses en 2018 de un mercado total de 24 millones de dólares estadounidenses y se prevé que alcance potencialmente los 9260 millones de dólares estadounidenses para 2025, ayudado por las crecientes ventas de Toujeo® 300 UI/ml [38 , 39 ]. El gasto en insulina detemir fue de 2700 millones de USD en 2015, con un crecimiento del 7,5 % anual [ 40 ], y las ventas de insulina degludec también aumentaron con estudios que demostraron su mayor eficacia y rentabilidad frente a otros análogos de insulina de acción prolongada [ 41 – 45 ] .
Sin embargo, existe preocupación por los altos costos de los análogos de insulina de acción prolongada en comparación con la protamina neutra Hagedorn (NPH) y otras insulinas [ 31 , 35 , 46 ].
Esto no es universal, aunque los estudios publicados muestran que los costos de adquisición más altos de los análogos de insulina de acción prolongada pueden compensarse total o parcialmente con los ahorros de los costos evitados de la hipoglucemia y otras complicaciones asociadas con la diabetes [ 47 – 51 ].
Los biosimilares son una forma potencial de reducir el costo de los análogos de insulina de acción prolongada aprovechando las apreciables reducciones de precios observadas con los biosimilares para tratar la artritis reumatoide [ 52 – 56 ].
Además, una serie de estudios publicados ahora han demostrado una eficacia y seguridad similares entre los análogos de insulina de acción prolongada originales y biosimilares [ 57 – 61 ].
Sin embargo, los ahorros potenciales de la insulina glargina biosimilar pueden verse limitados en la práctica, acentuados potencialmente por el dominio de tres empresas que actualmente controlan el 96 % del mercado mundial de insulina por volumen y el 99 % por valor, lo que desalienta la competencia [ 36 , 46].
Hemos visto esto en el Reino Unido con diferencias de precio limitadas con Semglee® (insulina glargina biosimilar 100 UI/ml) cuyo precio actualmente es solo un 20 % inferior al precio original y solo un 15 % inferior al precio de Abasaglar® (otra insulina glargina biosimilar) [ 62 ].
Además de esto, existen preocupaciones sobre el aumento de las tasas de hipoglucemia si se cambia a los pacientes entre diferentes formulaciones de insulina glargina 100 UI/ml con diferentes dispositivos sin una educación completa del paciente [ 63 – 65].
Estas diferencias de precios limitadas también se observaron en un estudio reciente de Ewen et al. donde los precios medios de los biosimilares para la insulina glargina en los países de ingresos bajos y medianos (LMIC) oscilaron entre un 2 % y un 25 % por debajo de los precios originales y, a veces, los precios de los biosimilares fueron más altos en las farmacias privadas [ 35 ].
Sin embargo, este no fue el caso en un estudio reciente en Bangladesh con reducciones apreciables de precios para la insulina glargina biosimilar mejorada por la competencia entre fabricantes [ 37 ]. La precalificación de la OMS también debería mejorar la competencia, lo que conduciría a precios más bajos para los análogos de insulina de acción prolongada biosimilares [ 66]. Esto es bienvenido ya que las reducciones de precios limitadas para los análogos biosimilares pueden ser fácilmente igualadas por la empresa original para proteger su mercado dado el bajo costo previsto de los productos además de la insulina detemir [ 46 , 67 ]. Como resultado, el atractivo del mercado europeo de análogos de insulina de acción prolongada para los fabricantes de biosimilares podría reducirse potencialmente y, por lo tanto, la posible competencia conduciría a precios más bajos.
Las preocupaciones con respecto a los diferentes dispositivos entre el original y los biosimilares bien pueden haber resultado en el bajo uso de biosimilares de insulina glargina (9 %) entre los diabetólogos en el Reino Unido en 2017, lo que limita aún más el atractivo del mercado de biosimilares de insulina de acción prolongada [ 68 ]. Sin embargo, esto no es universal, ya que algunos grupos de puesta en marcha en Inglaterra lograron tasas de utilización del 53,3 % para la insulina glargina biosimilar en diciembre de 2018 frente a la insulina glargina total [ 69 ].
Otras actividades para reducir el atractivo del mercado de análogos de insulina de acción prolongada para los fabricantes de biosimilares incluyen el lanzamiento de formulaciones patentadas más concentradas por parte de la empresa original para mejorar la comodidad del paciente y reducir potencialmente aún más las tasas de hipoglucemia, es decir, una formulación de 300 UI/ml de insulina glargina ( Gla-300) [ 41 , 70 – 75 ]. Habiendo dicho esto, otros investigadores no han encontrado diferencias en la efectividad entre las diferentes concentraciones de insulina glargina y preocupaciones sobre una posible infradosificación con la formulación de 300 UI/ml [ 76].
Estas actividades “evergreening” de la empresa original para preservar su cuota de mercado frente a la competencia potencial son similares al lanzamiento de diferentes dispositivos para el tratamiento del asma para tratar de mejorar las tasas de adherencia y proteger las ventas, así como el desarrollo de tratamientos a largo plazo. formulaciones orales y formulaciones intramusculares de antipsicóticos atípicos para mejorar el cumplimiento y reducir las recurrencias [ 77 – 80 ]. Estas actividades de la empresa también se observan en otras áreas de enfermedades. Estos incluyen el lanzamiento de esomeprazol versus omeprazol, escitalopram versus citalopram y pregabalina versus gabapentina [ 81 – 85 ]. Somos conscientes de las restricciones de prescripción de Gla-300 en algunos países europeos [ 86]; sin embargo, esto no es universal, y las ventas están creciendo especialmente con publicaciones que sugieren una mejor relación costo-efectividad en comparación con las formulaciones de 100 UI/ml [ 41 ].
En consecuencia, en vista de las controversias actuales y los problemas que rodean el uso de análogos de insulina de acción prolongada, así como los biosimilares, creemos que es necesario evaluar los patrones actuales de uso y gasto de los análogos de insulina de acción prolongada, incluidos los biosimilares en toda Europa. y la justificación de cualquier patrón observado.
Las autoridades sanitarias de toda Europa pueden utilizar los resultados para mejorar el uso de análogos de insulina de acción prolongada biosimilares cuando sea pertinente para limitar el impacto presupuestario del aumento del número de pacientes con diabetes en toda Europa, incluidos los que necesitan insulina. Esto será importante para preservar el acceso universal, especialmente después de la COVID-19, con su impacto resultante en los recursos disponibles, junto con el aumento de pacientes con ENT y sus complicaciones como resultado del confinamiento y otras medidas [87 , 88 ].
2. Materiales y métodos
Incluimos una variedad de países europeos que incorporan tanto países de Europa occidental como central y oriental (CEE) que cubren una variedad de geografías, epidemiología y poder económico en términos de PIB por población. Esto es similar a otros estudios realizados en toda Europa [ 89 – 91 ]. En particular, queríamos incluir a los países de ECO, ya que ha habido un uso considerablemente menor de productos biológicos en estos países en comparación con los países de Europa occidental debido a problemas de costo y asequibilidad [ 92 – 96 ].
Por lo general, utilizamos datos reembolsados de las bases de datos de las autoridades sanitarias y las compañías de seguros médicos desde 2014 o después hasta 2020 al evaluar los patrones de utilización y precios de las diferentes preparaciones de insulina. Estos fueron proporcionados por coautores en cada país, ya que el contenido de estas bases de datos generalmente no está disponible públicamente. Esto es diferente a los estudios de Beran et al. y Ewen y colegas, que utilizan una amplia variedad de fuentes al calcular los datos de costos [ 35 , 46 , 97 ]. Esto se debe a que la perspectiva de este documento es la de una autoridad sanitaria; en consecuencia, nos concentramos en sus bases de datos. Estas bases de datos también se consideran sólidas y se auditan periódicamente [ 89 , 98 , 99]. En consecuencia, los datos de las autoridades sanitarias se consideran una fuente fiable para comparar y contrastar los patrones de utilización y gasto entre países [ 98 ]. Nos centramos principalmente en la insulina glargina, ya que es la única insulina biosimilar actualmente disponible en toda Europa en el momento del estudio.
Los datos de utilización se desglosaron en dosis diarias definidas (DDD). Esto se debe a que los DDD se consideran un estándar clave para comparar patrones de uso entre países, especialmente si hay diferentes tamaños y concentraciones de paquetes entre países [ 100 – 102 ]. Reconocemos que algunos estudios publicados han sugerido que las DDD pueden subestimar la cantidad de insulina que reciben los pacientes a quienes se les recetó 300 UI/ml de insulina glargina en comparación con los que recibieron una formulación de 100 UI/ml; sin embargo, otros no han visto esto [ 74 , 103 ].
Hemos utilizado este enfoque anteriormente en múltiples publicaciones al evaluar los patrones de utilización y gasto en áreas de enfermedad y países [ 89 – 91 , 104– 107 ].
Los datos de gastos fueron principalmente datos de reembolso ya que, como se mencionó, la perspectiva de este trabajo es la de una autoridad sanitaria. En una minoría de situaciones, también usamos el gasto total cuando resultó difícil desglosar los gastos en componentes individuales. De nuevo , esto está en consonancia con publicaciones anteriores [ 89-91 , 104-108 ] . Los datos de gastos se mantuvieron en la moneda local donde fuera relevante, ya que nos interesaba principalmente las diferencias porcentuales en los costos a lo largo del tiempo entre el original y los biosimilares, así como las reducciones de precios a lo largo del tiempo, en lugar de niveles absolutos y sin ninguna influencia de las fluctuaciones monetarias.
Los datos de uso y gasto de insulina glargina se desglosaron aún más en las diferentes formulaciones, por ejemplo, diferentes formulaciones de 100 UI/ml, así como para la formulación de 300 UI/ml (Gla-300) ya que, como se mencionó, sabíamos que la la empresa matriz había estado cambiando sus actividades promocionales hacia la fórmula patentada de 300 UI/ml en los últimos años para proteger su mercado y ayudar a disuadir a los fabricantes de biosimilares.
Combinamos la información de más de 20 países y regiones europeos para proporcionar los siguientes conjuntos de datos para realizar comparaciones:(I)Utilización de análogos de insulina de acción prolongada como porcentaje de la utilización total de insulina basada en DDD(ii)Gasto en análogos de insulina de acción prolongada como porcentaje del gasto total de insulina en moneda local(iii)Utilización de insulina glargina biosimilar (100 UI/ml) como porcentaje de la insulina glargina total (100 UI/ml) nuevamente basada en DDD(iv)Utilización de 300 UI/ml de insulina glargina como porcentaje de la insulina glargina total basada nuevamente en las DDD(v)Costo/DDD tanto para la insulina glargina original como para la biosimilar (100 UI/ml) a lo largo del tiempo y los datos se utilizan posteriormente para realizar un seguimiento de los cambios de precio a lo largo del tiempo
La información sobre los patrones de utilización y gasto se complementó con comentarios de los coautores sobre los patrones observados en sus países para brindar orientación futura. Los coautores de alto nivel también contribuyeron a las discusiones sobre los próximos pasos potenciales para mejorar los ahorros futuros a partir de una mayor utilización de biosimilares en función de su considerable experiencia en esta área. Hemos adoptado enfoques similares antes para brindar orientación futura en esta y otras áreas [ 55 , 89 , 104 , 109 – 113 ].
No buscamos aprobación ética ya que no tratábamos con pacientes. Esto está en consonancia con la legislación nacional y las pautas institucionales, así como con varios artículos anteriores realizados por los coautores en otras áreas y situaciones de enfermedades [ 89 , 104 , 105 , 114 – 116 ].
3. Resultados
3.1. Utilización de las diferentes preparaciones de insulina a lo largo del tiempo
Ha habido una creciente utilización de los análogos de insulina de acción prolongada a lo largo del tiempo entre los países occidentales y los de ECO, sin diferencias obvias en las tasas de utilización y aumento entre los países occidentales y los de ECO (Figura 1 ). Esto refleja el creciente reconocimiento del papel y el valor de los análogos de insulina de acción prolongada en el tratamiento de pacientes con diabetes mellitus en toda Europa, junto con su creciente promoción.
Figura 1Utilización de análogos de insulina de acción prolongada como porcentaje del total de insulinas a lo largo del tiempo en toda Europa (basado en DDD).
La mayor utilización de análogos de insulina de acción prolongada en los últimos años se observó en Estonia (56,5 % del total de insulinas), República Checa (47,8 %) y Malta (40,0 %). También ha habido una prescripción considerable de análogos de insulina de acción prolongada en Cataluña en los últimos años alcanzando el 55,2% del total de insulinas en 2020 (no se muestra en la figura 1 ). Sin embargo, el uso variable de análogos de insulina de acción prolongada en Malta refleja las prácticas de adquisición para ese año; en consecuencia, las tasas pueden ser flexibles entre los años con implicaciones para la precisión de cualquier año.
El menor cambio en los patrones de prescripción de análogos de insulina de acción prolongada se observó en Escocia (aumento del 2,7 % a lo largo del tiempo), y el mayor cambio se observó en Polonia (aumento del 210,6 % a lo largo del tiempo), pero partiendo de una base baja. En Polonia, esto puede reflejar una actitud más cautelosa hacia los análogos de insulina de acción prolongada junto con problemas de asequibilidad. También hubo un enfoque más cauteloso en la prescripción de análogos de insulina de acción prolongada en Eslovenia, con tasas de prescripción similares a lo largo del tiempo (aumento del 10,7 % entre 2014 y 2019). Esto nuevamente puede reflejar problemas de valor y asequibilidad; sin embargo, se necesita más investigación antes de que podamos decir algo con certeza.
La utilización estable de análogos de insulina de acción prolongada en Escocia en los últimos años (Figura 1 ) bien puede reflejar la adherencia al consejo del Servicio Nacional de Salud de Escocia de que los pacientes en Escocia deberían comenzar idealmente con insulinas humanas de acción intermedia, considerando solo los análogos de insulina de acción prolongada. basado en una evaluación del riesgo de hipoglucemia de un paciente. La adherencia a la guía acordada se ve reforzada por el control regular de la prescripción médica de análogos de insulina de acción prolongada frente a otras preparaciones de insulina en Escocia [ 117 ]. Hemos visto que el seguimiento de los consejos aumenta las tasas de cumplimiento de la orientación prescrita en otras áreas de enfermedades en Escocia [ 83 , 84 , 118 ].
3.2. Gasto de las diferentes preparaciones de insulina a lo largo del tiempo
El uso creciente de análogos de insulina de acción prolongada como porcentaje del total de insulinas (Figura 1 ) también se reflejó en cambios similares en su gasto en comparación con el gasto total en insulinas (Figura 2 ).
Figura 2Gasto en análogos de insulina de acción prolongada como porcentaje del gasto total de insulina a lo largo del tiempo entre los países europeos.
Las variaciones variaron desde una ligera caída en Rumanía y Eslovenia a lo largo del tiempo con el costo/DDD para la insulina original glargina 100 UI/ml cayendo un 20,3 % a lo largo del tiempo en Eslovenia (Tabla 1 ) hasta un cambio limitado en el gasto total en Malta con el costo/ DDD cayendo un 61,3% durante el período de estudio (Tabla 1 ). Esto se compara con un aumento apreciable en el gasto de análogos de insulina de acción prolongada en Kosovo a lo largo del tiempo, pero desde una base baja.
tabla 1Cambios en las diferencias entre los precios de la insulina glargina 100 UI/ml original y biosimilar en toda Europa en los últimos años (según los costos locales/DDD).
El aumento del gasto en insulinas de acción prolongada en Kosovo en los últimos años refleja nuevamente las percepciones de una mayor comodidad para el paciente y mejores resultados en comparación con las insulinas estándar, como las insulinas NPH. Hay una situación similar en Hungría, donde el gasto en insulinas de acción prolongada alcanzó el 53,7 % del gasto total en los últimos años, similar a las altas tasas de gasto en Estonia (63 % en 2020), la República Checa (62,4 %) y Letonia (45,5 %). %). También hubo un gasto apreciable en análogos de insulina de acción prolongada en Cataluña actualmente en el 63,2% del gasto total de insulina (no se muestra).
El gasto relativamente alto en insulinas de acción prolongada en Rumanía en los últimos años refleja una vez más el éxito de la comercialización de las empresas originales, siendo la insulina glargina uno de los medicamentos más vendidos en Rumanía en los últimos años, junto con la insulina detemir.
3.3. Utilización de Insulina Glargina incluyendo Biosimilar 100 UI/ml y 300 UI/ml (Gla-300)
También ha habido una variación considerable en el uso de insulina glargina biosimilar (100 UI/ml) frente a insulina glargina total en toda Europa (Figura 3 ). Esto refleja una serie de diferencias entre países en términos de cambiar la prescripción de insulina glargina de 100 UI/ml a 300 UI/ml patentada (Gla-300), así como las actividades de la empresa original para reducir su precio y hacer que el mercado sea menos atractivo para los biosimilares.
figura 3Utilización del biosimilar de insulina glargina (100 UI/ml) como % del total de 100 UI/ml de insulina glargina (basado en DDD) a lo largo del tiempo en toda Europa.
Actualmente, no se comercializa insulina glargina biosimilar en Albania, Austria o Letonia. Esto puede reflejar el aumento de la utilización de Gla-300 en los últimos años, llegando al 45,3 %, 47,7 % y 51,4 %, respectivamente, del total de insulina glargina en estos países como resultado de actividades comerciales y de otro tipo (Figura 4 ). Esto, junto con la reducción de la prescripción general de insulina glargina (Letonia) y las reducciones de precios del original a lo largo del tiempo (Albania y Letonia) (Tabla 1 ), parecen haber hecho que el mercado de biosimilares de 100 UI/ml sea poco atractivo en estos países. Esto es a pesar de que la insulina glargina es el análogo de insulina de acción prolongada predominante prescrito en Albania en los últimos años, aumentando al 81,1 % del total de análogos de insulina de acción prolongada (base DDD) prescritos.
Figura 4Utilización de insulina glargina 300 UI/ml (Gla-300) como % del total de insulina glargina (basado en DDD) en toda Europa a lo largo del tiempo
Actualmente tampoco hay insulina glargina biosimilar importada a Kosovo debido a una serie de problemas, incluidas las preocupaciones sobre su eficacia y seguridad frente al original, y actualmente no hay insulina glargina biosimilar recetada en Malta a pesar del uso muy limitado de Gla-300 (Figura 4 ). ). Esto probablemente refleja la considerable reducción de precios por parte de la empresa original, lo que hace que este mercado sea poco atractivo para los fabricantes de biosimilares (61,3 %, Tabla 1 ). De manera similar, aunque el biosimilar de insulina glargina se reembolsó recientemente en Rumania (Abasaglar® 100), su aceptación hasta la fecha ha sido muy limitada (no se muestra) debido a las políticas de reembolso y precios en curso, junto con incentivos médicos limitados para prescribir biosimilares preferentemente sin problemas de copago. para pacientes
También hubo una utilización muy limitada de biosimilares de insulina glargina en Estonia, en contraste con su creciente utilización en Lituania como otro miembro clave de los Estados bálticos. De nuevo, esto probablemente refleja que la empresa original cambió las actividades promocionales a Gla-300 patentado en Estonia para reducir la competencia biosimilar, con una utilización de Gla-300 que aumentó al 55,4 % del total de insulina glargina en 2020 (Figura 4 ). Además, la empresa original redujo su precio en un 24,9 % a lo largo del tiempo (Tabla 1 ), lo que resultó en diferencias de precios limitadas en los últimos años entre el original y los biosimilares (2,1 %-7,1 %).
La baja y constante utilización del biosimilar de insulina glargina en Bulgaria refleja nuevamente las continuas actividades de marketing por parte de la empresa original junto con la actual falta de incentivos médicos para prescribir biosimilares de manera preferencial junto con una diferencia de precio limitada en la práctica entre el original y el biosimilar (Tabla 1 ), con ambos reduciendo sus precios con el tiempo.
La baja utilización de biosimilares de insulina glargina en Noruega también refleja potencialmente diferencias de precio limitadas entre el original y el biosimilar en los últimos años (Tabla 1 ), junto con la creciente utilización de Gla-300 (Figura 4 ). Esto contrasta con Suecia, que tiene el mayor uso de biosimilares entre los países europeos estudiados (Figura 3 ), a pesar del uso creciente de Gla-300 (Figura 4 ). Esto probablemente se deba a una tradición de prescripción de medicamentos de múltiples fuentes con sustitución genérica obligatoria en Suecia, junto con iniciativas en curso para mejorar la calidad y la eficiencia de la prescripción, incluida la prescripción de biosimilares [ 55 , 106 , 119 ,120 ]. Las iniciativas en curso también incluyen la transferencia de presupuestos a nivel local para mejorar el enfoque de los médicos de atención ambulatoria en la eficiencia de prescripción.
La situación en Lituania contrasta con la de otros países bálticos, ya que ha habido una utilización creciente de insulina glargina biosimilar como porcentaje de toda la insulina glargina 100 UI/ml en los últimos años, alcanzando el 26,5 % del total de insulina glargina 100 UI/ml en 2020 (Figura 3 ). Esto refleja el hecho de que todos los análogos de insulina de acción prolongada se encuentran en el mismo grupo de precio de referencia y los pacientes cubren los costos adicionales de un medicamento más costoso [ 121 , 122 ]. Dicho esto, la utilización de la formulación de 100 UI/ml se ha moderado en los últimos años en Lituania al aumentar la utilización de Gla-300, llegando al 39,0 % de toda la insulina glargina a principios de 2020 (Figura 4 ).) junto con reducciones de precios por parte del originador (21,1% entre 2015 y 2020) para limitar las diferencias de copago.
También ha habido una creciente utilización de biosimilares de insulina glargina en Bosnia y Herzegovina (B & H), pero desde una base baja con la agencia estatal alentando recientemente a los médicos a recetar biosimilares para nuevos pacientes cuando sea posible, y los médicos generalmente siguen las pautas nacionales en B & H. H [ 108 , 123 ]. Sin embargo, un mayor crecimiento se ve obstaculizado por la alta utilización de Gla-300, que alcanzó el 52,1 % de todo el uso de insulina glargina en 2019 (Figura 4 ), y el fabricante que redujo su precio para reducir cualquier diferencia de precios resultante (Tabla 1 ).
El crecimiento en la utilización del biosimilar en Hungría también es bienvenido, ya que este no fue el caso de los biosimilares para infliximab y rituximab [ 124 , 125 ]. Sin embargo, ahora hay reformas en curso en Hungría para animar a los médicos a que inicien a los pacientes con el biosimilar menos costoso, así como el sistema de precios de referencia con los pacientes obligados a financiar la diferencia de precios entre el original y cualquier biosimilar ellos mismos [ 126 ]. Habiendo dicho esto, la utilización de insulina glargina biosimilar en Hungría nuevamente se ve afectada negativamente por la caída del precio del fabricante con el tiempo (Tabla 1 ), junto con el uso creciente de Gla-300 que alcanza el 58% del total de insulina glargina en los últimos años (Figura 4 ).
El crecimiento en la prescripción de insulina glargina biosimilar de 100 UI/ml en Italia en los últimos años (Figura 3 ) probablemente refleja las medidas regionales y nacionales en curso del lado de la demanda para mejorar la prescripción de biosimilares dadas algunas de las diferencias de precios observadas, incluida la insulina glargina biosimilar. (Cuadro 1 ) y la necesidad de conservar los recursos [ 127 , 128 ]. Sin embargo, una mayor utilización de la insulina glargina biosimilar puede volver a verse obstaculizada por la creciente utilización de Gla-300 en Italia en los últimos años (Figura 4 ).
También estamos viendo una utilización creciente de insulina glargina biosimilar en Escocia. Sin embargo, el crecimiento está limitado por la preocupación de cambiar entre el original y el biosimilar de insulina glargina de 100 UI/ml, y los médicos solicitan recetar por marca [ 64 , 65 ]. Esto funciona en el Reino Unido con farmacéuticos comunitarios que no pueden sustituir un producto original por un genérico sin la aprobación de un médico [ 80 , 129 ]. Habiendo dicho esto, tradicionalmente hay tasas muy altas de prescripción de DCI en Escocia [ 83 , 84 , 118]. Actualmente hay un uso bajo de Gla-300 en Escocia como resultado de la guía de prescripción en curso para limitar su uso, potenciada por la preocupación de que los pacientes puedan sobredosis inadvertidamente [ 86 ].
La utilización considerablemente mayor de insulina glargina biosimilar en Polonia en los últimos años en comparación con otros países de la CEE (Figura 3 ) bien puede verse facilitada por una tasa de reembolso plana con pacientes que pagan la diferencia de precio por un original más caro [ 126 , 130 ] . Además de esto, el Ministerio de Salud y el Fondo Nacional del Seguro de Salud de Polonia buscan fomentar el uso de biosimilares para ahorrar recursos, especialmente porque Polonia es un productor líder de biosimilares en Europa [ 130 , 131 ]. Sin embargo, su prescripción también se ve obstaculizada por la creciente utilización de Gla-300 que alcanza el 37,1 % del total de insulina glargina a principios de 2020 (Figura 4 ).
Los precios ahora también son similares entre el biosimilar de insulina glargina y el original en la República Checa, lo que podría afectar su uso luego de una caída en los precios del original (25,5 %) y también en los precios del biosimilar (7,7 %) (Tabla 1 ). Como resultado, existe un uso limitado de biosimilares a pesar de la creciente utilización de análogos de insulina de acción prolongada en la República Checa, que alcanzó el 47,8 % del total de insulinas en 2020 (Figura 1 ).). Existen restricciones actuales con respecto a la prescripción de análogos de insulina de acción prolongada en la República Checa, y los análogos de insulina de acción prolongada solo se reembolsan si los regímenes de tratamiento actuales no logran alcanzar los niveles objetivo de HbA1c por debajo de 60 mmol/mol o si los pacientes a los que se les recetó insulina humana experimentan repetidamente hipoglucemia Simultáneamente con esto, el tratamiento con análogos de insulina de acción prolongada ya no debe reembolsarse a menos que haya una mejoría demostrable en los niveles de HbA1c del paciente dentro de los tres meses posteriores al inicio, es decir, una reducción de al menos un 10%, o una reducción significativa en la incidencia de hipoglucemia Sin embargo, actualmente existe un seguimiento variable de estas restricciones en la práctica.
3.4. Estrategias potenciales para mejorar la prescripción de insulina glargina biosimilar
El recuadro 1 contiene una serie de posibles estrategias para mejorar la utilización de análogos de insulina biosimilares de acción prolongada en Europa. Esto se basa en la utilización actualmente variable de insulina glargina biosimilar en toda Europa. Esto se considera esencial para estimular el mercado en beneficio de las partes interesadas clave en el futuro.
Iniciativas educativas(i) Fomentar programas que eduquen a los pacientes cuando sea pertinente con respecto a la eficacia y seguridad similares entre la insulina glargina original y la biosimilar. Esto incluye la difusión activa de los hallazgos de estudios anteriores y actuales, incluidos estudios con datos del mundo real.(ii) Instigate/help with additional research regarding the potential savings/cost-effectiveness from increasing use of biosimilar insulin glargine—building on current studies, with potential savings used to enhance either greater availability and use of long-acting insulin analogues in suitable patients with rising prevalence rates; alternatively, increase the number of professionals available to improve the care of patients with diabetes requiring insulin with the savings made(iii) Alongside this, work with patients to ensure they are familiar with the different pens/devices where this exists in cases where switching between unfamiliar devices may cause confusion—the objective being to minimise any potential for hypoglycaemia(iv) Al mismo tiempo, trabajar con organizaciones de pacientes para facilitar un mayor uso de la insulina glargina biosimilar, especialmente donde los recursos/copagos son un problema y ayudar con la educación del paciente para mejorar el uso óptimo de los dispositivos disponibles cuando sea pertinente [ 132 ](v) Una mayor competencia con una mayor disponibilidad de biosimilares debería ayudar a reducir aún más los precios, lo que beneficiaría a todos los grupos clave de partes interesadas.Otras actividades sugeridas(i) Fomentar mayores descuentos de las empresas para mejorar el uso de insulina glargina biosimilar a costos más bajos, basándose en ejemplos con genéricos orales [ 122 , 133 , 134 ]. Esto incluye ayudar a cubrir los costos de cualquier actividad educativa necesaria para mejorar la familiaridad con los diferentes dispositivos para minimizar la posible hipoglucemia.(ii) Las actividades potenciales para alentar una mayor prescripción de biosimilares (y, por lo tanto, la competencia) podrían incluir lo siguiente: (a) Introducir/avanzar en prácticas de adquisiciones anuales, dando preferencia a las empresas de biosimilares (b) Considerar la posible exclusión de la insulina glargina original 100 UI/ml de las listas de reembolso y formulario y/o autorizar únicamente el reembolso de biosimilares, aprovechando los éxitos en otras áreas y situaciones de enfermedades [ 118 , 135 ] (c) Introducir objetivos de prescripción de biosimilares para pacientes nuevos y existentes con diabetes que requieran insulina para su control, y cuando sea necesario brindar apoyo educativo adicional (con la ayuda de organizaciones de pacientes y otros profesionales de la salud) (d) Introduce prescribing restrictions/guidance for still patented Gla-300 IU/ml to further enhance the market attractiveness for 100 IU/ml formulations—similar to the situation in Scotland [86]. This builds on the successful introduction of prescribing restrictions in other disease areas across Europe [91, 136–138](iii) Potentially form consortia surrounding the purchasing of biosimilar insulin glargine to encourage greater competition among manufacturers to reduce the current monopoly of insulin availability from the three leading pharmaceutical companies. This can build on current Pan-European consortia activities [139–141](iv) buscar aumentar la producción europea de insulina glargina biosimilar basándose en las actividades actuales en países como Polonia y Malasia [ 130 , 131 , 142 ]. Los precios más bajos de la insulina glargina biosimilar deberían ayudar a los países de ingresos bajos y medianos que luchan por financiar análogos de insulina de acción prolongada debido a problemas de asequibilidad [ 35 , 143 , 144 ]
Caja 1Posibles actividades entre las autoridades sanitarias para mejorar la prescripción y dispensación de insulina glargina biosimilar.
4. Discusión
Creemos que este es el estudio más completo hasta la fecha para explorar los patrones actuales de utilización y gasto de diferentes preparaciones de insulina, con un enfoque particular en la insulina glargina y sus biosimilares, en toda Europa. Por lo general, ha habido una mayor utilización de análogos de insulina de acción prolongada en toda Europa a pesar de su precio más alto (Figura 1 ), lo que refleja los beneficios percibidos por el paciente en términos de reducción de la hipoglucemia y mayor comodidad. Este mayor uso se observa tanto en los países de Europa occidental como en los de ECO, lo que demuestra que la asequibilidad no es un problema a diferencia de varios países de ingresos bajos y medios [ 35 , 143 , 145]. Se observaron patrones similares al evaluar los cambios en el gasto en análogos de insulina de acción prolongada como porcentaje del gasto total en insulinas (Figura 2 ).
Sin embargo, existe preocupación por el uso limitado o nulo de la insulina glargina biosimilar en varios países europeos, a pesar de que varios estudios no muestran diferencias en la eficacia y la seguridad entre el original y los biosimilares [ 57 – 60 ] (Sección 3.3 ). Esto se debe a una serie de factores, incluidos los esfuerzos promocionales de la empresa original para cambiar las recetas a Gla-300 patentado con iniciativas limitadas del lado de la demanda de las autoridades sanitarias para desalentar esto, con la excepción de Escocia con sus sugerencias de prescripción para limitar el uso de Gla. -300 [ 86 ]. Además, la compañía baja el precio del producto original a menudo a precios cercanos o similares a los biosimilares (Tabla 1), lo que, junto con las preocupaciones con los diferentes dispositivos entre las diferentes formulaciones de insulina glargina 100 UI/ml en algunos mercados, ha limitado aún más el uso de biosimilares. Además de esto, el dominio continuo del mercado de la insulina por parte de tres fabricantes desalienta la competencia [ 36 , 46 ].
Estos problemas deben abordarse para mejorar el atractivo del mercado de análogos de insulina de acción prolongada biosimilares, especialmente con el potencial de bajo costo de los productos [ 46 , 67 ]. Hemos visto con los biosimilares para el manejo de pacientes con enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide que una mayor competencia puede conducir a precios bajos para los biosimilares [ 52 , 54 , 56 , 146], y esto debería fomentarse para los análogos de insulina de acción prolongada en Europa. El no hacerlo limitará el atractivo de este mercado para otros fabricantes de insulina glargina biosimilar, así como para los posibles fabricantes de otros análogos de insulina de acción prolongada, ya que estos compuestos pierden sus patentes. Esto irá en detrimento de los principales grupos de partes interesadas, especialmente dado el aumento de las tasas de diabetes en toda Europa [ 9 ] y los crecientes problemas de recursos posteriores a la COVID-19. El recuadro 1 contiene una serie de actividades que las autoridades sanitarias europeas pueden impulsar para aumentar la competencia y la prescripción posterior de análogos de insulina de acción prolongada biosimilares, basándose en la demanda y otras medidas en otras áreas de enfermedades, y las monitorearemos en el futuro.
Somos conscientes de una serie de limitaciones con este estudio. Estos incluyen el hecho de que no incluimos todos los países europeos. Sin embargo, no creemos que aumentar el número de países europeos hubiera alterado apreciablemente nuestros hallazgos. Además, solo utilizamos las bases de datos de las autoridades sanitarias y de las compañías de seguros de salud. Esto fue deliberado por las razones expuestas. En tercer lugar, usamos DDD para documentar y analizar los datos de utilización conscientes de los posibles problemas con Gla-300. Esto nuevamente fue deliberado por las razones expuestas. Finalmente, no realizamos un análisis en profundidad de la lógica detrás de las tendencias observadas en cada país. Sin embargo, la retroalimentación se basó en la experiencia de los coautores de alto nivel en cada país. En consecuencia, creemos que nuestros hallazgos y sugerencias son sólidos y brindan una dirección futura.
5. Conclusión
En conclusión, hemos visto un uso creciente de análogos de insulina de acción prolongada en toda Europa, lo que refleja sus beneficios percibidos para mejorar el cumplimiento y reducir la hipoglucemia. Sin embargo, existen preocupaciones sobre el uso limitado o nulo de biosimilares de análogos de insulina de acción prolongada en varios países europeos debido a una serie de factores. Estos incluyen esfuerzos promocionales por parte de la empresa original y reducciones de precios que igualan los de los fabricantes de biosimilares. Estos problemas deben abordarse para mejorar la utilización de biosimilares en el futuro en beneficio de todos los grupos clave de partes interesadas.